Polos Opuestos

15 de Septiembre, de nuevo hay que volver a la cárcel de todo estudiante, el instituto. Mi hermana Anais, mi hermano Zayn y yo nos levantamos como todos los años, sin entusiasmo, en nuestra solitaria casa. Nuestros padres habían muerto en un trágico accidente de coche hace 9 años. Desde su muerte Zayn no había vuelto a ser el mismo. Después de prepararnos y de más mi hermana y yo salimos juntas desde casa, justo después de que nuestro hermano Zayn, con el que no nos llevábamos muy bien, se fuese con sus amigos, los populares del instituto, rumbo a él para hacerle la vida imposible a personas como yo, sensibles y maltratadas desde pequeñas por sus compañeros de clase.
Llegamos al instituto y nos dirigimos hacia las listas donde pondría la clase que nos habían asignado. Desgraciadamente este año no me había tocado con mi hermanita preferida, es más, me había tocado con el imbécil, subnormal, gilipollas y cabrón de mi hermano Zayn y sus amigos Niall y Liam. Mi hermana corrió a ver su clase. De repente empezó a soltar barbaridades por la boca.
Anais: SERÁN HIJOS DE LA GRAN PUTA LOS DE DIRECCIÓN ¿NO HABÍA CLASES SUFIENTES QUE TENÍAN QUE METER A ESTOS DOS MARICONES DE MIERDA EN MI PU...
Anabel: Anais, para, joder. Creo que ya te has desahogado lo suficiente jeje. A ti al menos no te a tocado con nuestro hermano.
Note como una lágrima caía por mi mejilla y como rápidamente Anais me abrazó.
Anais: Vamos Anabel, no llores. Vallamos a soltar los libros en la taquilla.
Le contesté con una sonrisa. Nos dirigimos hacia las taquillas, soltamos los libros y nos despedimos para ir a clase. En ese abrazo de despedida noté demasiada preocupación por parte de mi hermana. Creo que tenía miedo de lo que me podía ocurrir al estar tan cerca de mi hermano, y lo que era peor, tan cerca de la persona a la que había amado y amaba aún,la cual me había hecho la vida imposible desde primaria, Niall.
Entré en clase y, como todos los años, fui hasta el fondo de la clase al lado de la ventana, me senté en la solitaria mesa y esperé hasta que llegara el profesor. El profesor entró y explicó lo mismo que todos los años. Después de un cuarto de hora nos dio media hora de descanso para conocer mejor a los nuevos alumnos. En ese momento me llego un mensaje de Anais:
“ Anabel siento no poder estar junto a ti en el intercambio :( pero es que estábamos hasta las narices del profesor y Perrie y yo nos iremos a faltar xD . Espéranos a última en las taquillas. Te quiero :) ”
Me derrumbé al ver el mensaje pero lo comprendí, aguantar a su antipático tutor no sería agradable. Cogí aire y lo solté mientras me deslizaba por la pared hasta quedar sentada en el suelo.
De pronto noté a alguien sentándose a mi lado.
***: Hola Anabel.
Anabel: ¿Qué quieres Niall?
Era Niall, el fantasma fiel de mi hermanito, del cual yo estaba enamorada desde los 6 años. Lleva metiéndose conmigo desde hace 11 años. Empezó en 1º de primaria y la ultima vez fue el año pasado en 1º de bachillerato.
Niall: Hablar. - me dijo este mientras se encogía de hombros.
Anabel: Tú no eres de hablar.
Niall:  Ui que borde vienes este año.
Anabel: Y tú que graciosito, ¿no?
***: Niall, ¿que haces aquí?
Mire hacia arriba para ver quien era. Era Zayn. Al verlo, la cara de asco me salió automática.
Zayn: ¿QUÉ MIRAS IMBÉCIL?- dijo refiriéndose a mi.
Anabel: AL GILIPOLLAS QUE VIVE CONMIGO.
Zayn: YA HABLAREMOS TÚ Y YO EN CASA. Niall, ¿vienes o qué?
Niall: No - Dijo este
Zayn : ¿Enserio que te vas a quedar hablando con esto?
Yo le respondí con una mirada desafiante mientras me levantaba para irme.
Niall: Anabel, no te vallas- me dijo Niall mientras me cogía del brazo.
Anabel: Déjame. - le dije en un tono frío mientras me soltaba de su agarre.
Por fin acabó el día. Al sonar el timbre fui hacia las taquillas y esperé a mi hermana Anais y a nuestra mejor amiga Perrie. Siempre acompañábamos a Perrie hasta su casa porque nos cogía de camino a la nuestra. Hoy iban los chicos delante nuestra andando hacia casa, seguramente hablando mal de nosotras porque no paraban de mirar hacia atrás. Llegamos a casa de Perrie y nos despedimos de ella con un gran abrazo. Zayn ya había llegado a casa pero como siempre se había dejado las llaves dentro, así que tenía que esperarnos, cosa que no le hacía ninguna gracia. Al llegar a la puerta de casa, mi hermana y yo vimos a Zayn y todos sus amigos en la puerta.
Anais: Ya se le olvidaron otra vez las llaves al tontolava este - dijo Anais mirándolo con esta cara: ¬.¬