⚫1. Viejos recuerdos⚫

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"Dicen que Ninjago se construyó sobre leyendas. Y que las leyendas son un modo de entender las cosas mejor que nosotros mismos. Son fuerzas que dan forma a nuestra vida. Sucesos que carecen de explicación. Individuos cuya vida se eleva hasta la tierra. Así es como nacen las leyendas..."

La luna lucía como una joya resplandeciente

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La luna lucía como una joya resplandeciente. El serpentin que huía notó ésto y le hizo pensar en lo que yacía cubierto bajo una manta, siendo custodiado en la espalda del ladrón. Una gota de sudor descendió por el camino maltrecho que hacían las escamas blancas de su cara. Dobló un poco las rodillas y tomó impulso para saltar a otro techo de una de las edificaciones de la ciudad. De cierta forma, las alturas le brindaban seguridad. Claro que era un aerobrai, aunque eso no significaba que toda su vida su hogar hubiesen sido las alturas, como sus antepasados. No, todo lo que él había llamado "hogar" habían sido las oscuras cuevas subterráneas a las que los humanos habían exiliado a su raza. Su gusto por las alturas parecía venir de la sangre que fluía por sus venas. Era un sentimiento antiguo.

Pensar en su tribu le hizo bajar el ritmo. El cetro en su espalda lo golpeteo un poco mientras descendía del último edificio y se alejaba hacia el desierto que bordeaba la ciudad.

No estaba acostumbrado a largas caminatas, pero consiguió llegar a su destino. Miró el volcán dormido frente a él y sus escamas se tornaron iridiscentes ante el calorcillo que se formaba alrededor del volcán.

<<-Perfecto, de una cueva a otra>>, pensó con amargura, sabiendo que a partir de entonces ése sería su nuevo hogar.

El aerobrai se movió nervioso de un extremo a otro, intentando dar con la entrada, pero no importaba desde qué ángulo miraba la falda del volcán, ninguna grieta parecía formarse entre las rocas. Se le ocurrió esperar allí a que quien esperaba saliera y lo recibiera. Se sentó de cuclillas en la grava volcánica y consideró "abrir" lo que llevaba envuelto en la espalda.

Se llevó las manos al objeto alargado que yacía bajo una manta cuidadosamente envuelto pero, cuando estaba por tomarlo, una voz habló entre las sombras y lo sobresaltó.

Ninjago 1: Bajo ataque (COMPLETA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora