Mi arrogante tentacion{Editando}

Capítulo 24

— ¿Cómo te fue hoy en el trabajo?

— Muy bien —Le dijo mientras se comía el helado de barquilla.

— Que bien –Le dijo mientras también se comía su helado.

Amber dejó de concentrarse en el helado por un momento.

— ¿Te puedo hacer una pregunta?

La manera en que Amber dijo esto preocupó un poco a Riley, no parecía algo bueno.

— Claro, ¿Sucede algo?

— ¿Por qué… —Amber pensaba mucho antes de formular la pregunta. Era como si estuviera eligiendo  las palabras correctas o algo parecido —Por qué le mentiste a Dylan?

Riley enseguida lo comprendió y bajó un poco la mirada. Ella prosiguió.

— Sobre… Ese día, en el supermercado, no dijiste lo que realmente sucedió —Su voz ahora sonaba triste, algo débil, era como si le hubiera desilusionada lo que él había hecho.

Riley se comenzaba a poner algo tenso, su corazón comenzó a latir muy rápido y sus manos comenzaban a sudar.

—Yo…

Amber esperaba una respuesta pero Riley no dijo más, solo agachó un poco la mirada nuevamente y comenzó a peinarse el flequillo con los dedos.

—¿Te estás poniendo nervioso?

— No, estoy bien —Le dijo con una sonrisa nerviosa y bajó su mano, necesitaba controlar eso.

— Es que no puedo entender por qué le inventaste toda esa mentira. No quise preguntarte nada, ni decir que era una mentira delante de Dylan, porque  me di cuenta rápidamente que le estabas ocultando algo —Amber sonríe débilmente— y no quería arruinar el momento, de verdad la estábamos pasando bien.

Los pensamiento de hace algún tiempo comenzaron a atosigar a Riley nuevamente, sentía que había llegado el momento de contarle la verdad. Que Dylan no tenía ni idea de que cuando no estaba en el hotel estaba con ella, que él había intentado utilizarla aun cuando le prometió a Dylan que no lo haría.

Riley tragó saliva y la miró a la cara.

— Lo que sucede es que… verás <<Me va a odiar por completo, no va a querer verme nunca más cuando se entere de lo que le intenté hacer. No lo voy a soportar, no permitiré que eso pase, la necesito a mi lado, no la quiero perder.>> Dylan no sabe que tú me gustas, es todo, tampoco tiene idea de que yo vengo aquí.

No le iba a mentir, a ella no, pero tampoco fue capaz de contarle la historia completa. Pero el prosiguió.

— Si le decía que en ese momento en realidad te estaba siguiendo ¿Te lo imaginas?

Amber bufó y le dedicó una sonrisa sarcástica.

— Lo dices con tanta seriedad que cualquiera diría que es cierto, que de verdad lo que sientes por mí es real —Le dijo con antipatía.

El comentario de Amber le causó gracia a Riley y pudo relajarse un poco.

— Es real —Le dijo con un suspiro.

— Si, ajá —Le dijo aun sin el más mínimo interés, simplemente no le creía— Ya entiendo por qué  tanto misterio, entiendo porque no le dices a Dylan, debería darte vergüenza andar buscando chicas por ahí para pasar el rato, deberías ponerte a escribir alguna canción nueva, ¡has algo productivo! —Exclamó.

— Y tú deberías dejar de decir bobadas, ese tono de voz tuyo… A veces es molesto cuando te irritas ¿Lo sabias pequeña grillo?

—Te dije que no me llames así.

Riley solo sonrió y se recostó al espaldar de la banca, colocó sus manos entrelazadas detrás de la cabeza y cruzó las piernas.

Amber lo observó detalladamente por un momento. El resplandor del sol le iluminaba el rostro de una forma increíble, hacía que sus hermosos ojos rasgados color avellana se vieran más claros y atractivos que nunca, tuvo que desviar la mirada, no podía verlo de esa forma por más tiempo.

— ¿Qué harás esta noche? —Le preguntó sacándola de sus pensamientos.

— Nada en particular, ¿Por qué? —Le preguntó con curiosidad.

— Esta noche cenaré con los chicos ¿Quieres venir?

Amber lo miró asombrada.

— ¿Con el resto de DarKBoys?

—Le preguntó con un entusiasmo evidente.

— Sí, con Min Lee y Go Hyun.

— ¡Wow! Sí, me encantaría.

— Bien, entonces ¿Paso por ti a las 7:30?

Amber rascaba su cabeza algo indecisa.

— No lo sé Riley… Me da algo de vergüenza ¿Y si no les caigo bien?

— Eso no va a pasar, verás que son geniales, Min Lee es un buen chico, y Go Hyun… Bueno solo es algo imprudente he hiperactivo hay que saber controlarlo un poco.

— Min Lee se ve como  un buen chico, tienes razón, además es muy lindo.

Riley la miró con una “seriedad” mal fingida.

— Conque te parece lindo ¿no?

Amber le dedica una gran sonrisa.

— Es la verdad  –Le dijo graciosa.

— Bien  —Se levanta— Creo que mejor no te llevaré a ningún lado, solo iras para coquetear con él, es mejor que vaya yo solo —Le dijo aun tratando de que su seriedad fuera creíble.

Amber lo agarró rápidamente del brazo para detenerlo.

— ¡No! – Exclamó con una sonrisa preocupada de que no la llevara— Era broma.

— Sí, claro —Le dijo riendo— Paso por ti a las 7:30 –Le repitió.

—¡Por dios! ¿Que me debo poner? de seguro cenaran en uno de esos lugares muy lujosos —Le dijo preocupada.

— No te preocupes por eso, ponte lo mejor que tengas, te verás hermosa.

— ¿Tú crees?

— Totalmente —Le dijo guiñándole el ojo.

Amber sonrió y asintió con la cabeza. Riley le había transmitido seguridad hacia ella misma y le agradaba mucho.

— Ok, entonces pasa por mí –Le dijo emocionada.

—Bien entonces espérame lista, yo debo irme ya.

Amber se levantó y ambos caminaron por el camino del parque hasta llegar a la carretera.

— Nos vemos en la noche –Le dijo dándole un abrazo.

Amber lo abrazó de igual manera, sintió una sensación extraña, se sentía muy cálido, inevitablemente percibió el aroma del perfume de Riley, no era un perfume de carácter opulento, dramático o francés, era más bien una fragancias cálida y oriental y se unía a una fusión de vainilla. Riley rompió el abrazo lo que saco rápidamente a Amber de esos pensamientos.

— Cuídate —Le dijo mientras abría la puerta del auto.

— Claro —Le dijo aun fuera de sí.

Riley se puso en marcha y Amber cruzó la calle para irse a su casa, elimino los pensamientos con una pequeña sacudida de cabeza, y se centró en buscar algo para usar en la noche.