Capítulo - 15PETER
Llegamos a casa y mama estaba en la cocina, cuando nos vio junto abrió una grande sonrisa y seco sus manos para luego hablarnos.
-Pero que buena sorpresa! -gritó sonriendo y abrazando a Lali- Como estas bonita?
-Muy bien señora, gracias. -sonrió tímida y mama enarcó una ceja riéndose y mirándome-
-No me digas señora, es muy de vieja -se rió y Lali asintió- Dime Clau.
-Nuy bien... Clau. -mama sonrío con un brillo en los ojos y luego se dirigió a mi-
-Hola mi amor. -me dio un abrazo y un beso en la mejilla- Tienen hambre? -mire a Lali y está negó rápidamente con la cabeza y me reí-
-Si mama. Que hiciste?
-Milanesa con puré. -vi que Lali agacho la cabeza sonriendo, es su comida favorita-Pasamos a mi habitación y deje las cosas de ella sobre mi cama, la mire y estaba observando todo como en la última vez. Vi que sonrío al mirar una firo misma y de mis hermanos, aún no los había conocido, pero seguro que le encantaría.
-Donde están? -preguntó apuntando los chicos en la foto-
-Salieron, pronto llegan y podrás conocerlos. -sonrío agachando la cabeza pero luego la levanto y me miro a los ojos-
-Gracias.
-Porque?
-Por todo. Por ser así de tierno conmigo y ayudarme siempre. -sonreí asintiendo- Puedo... puedo abrazarte? -me reí ante su pregunto y su carita tierna-
-Obvio tomatito. -me miro mal y luego corrió hacia mi, rodeo mi cintura con sus brazos y se fundió en mi pecho, puse mi mentón en su cabeza y olí su pelo, tenía un perfume increíblemente dulce y delicioso-
-No me digas tomatito. -murmuró sobre mi pecho y me reí-
-Como quieres que te diga entonces?
-No se...
-Me gusta, me parece tierno como vos. -vi que de sonrojo y me reí aún más- bueno tomatito no te jodo más. Bajamos a comer? -asintió medió tímida y le tome de la mano saliendo del cuarto-Sentamos en la mesa lado a lado, estaba nerviosa y me daba mucha gracia, no tenía porque estarlo. Mi mama la agora y mis hermanos harán lo mismo cuando la conozcan.
Escuche que abrían la puerta y Lali de tenso y bajo la mirada, le tome de la mano y me miro, sonreímos y se tranquilizó un poco. Yeyo entró corriendo y Euge venia caminando atrás. Cuando se depararon con ella se quedaron mirándola, Euge con una ceja levantada y Yeyo sonriendo.-Chicos, creo que ya la conocen pero esta es Lali. Lali, mi hermano Yeyo y allá mi hermana Eugenia. -ambos sonrieron y Yeyo se aproximó-
-Hola. -le dio un abrazo medio torpe y tímido y un beso en mejilla y se sentó al lado de mama- Hola ma' -hizo lo mismo en cuanto Euge se aproximaba también-
-Por fin te conozco, hola. -dijo sonriendo y me sonroje yo ahora, le dio un beso en la mejilla y miro nuestras manos, aún juntas y de un momento al otro, que no había percibido hasta ahora, habíamos entrelazado nuestros dedos. Se rió y se sentó a mi lado- Hola mama. -le dejo un beso en la frente y empezamos a comer- Quiero todos los detalles después boludo. -me susurró riéndose y asentí, era una buchona-La cena fue increíble, Lali cayó bien a todos. Hice mi cama y deje sus cosas en mi armario, ella estaba en el baño cambiándose y se quedaría en mi cuarto, yo me iría al salón o al cuarto de Yeyo, no quiero hacerla sentirse incómoda.
Salió del baño con una remera mia, no había llevado mucho s la cabaña y se veía demasiado tierna y sexy con mi ropa. La mire de arriba abajo y luego a los ojos, no sé cómo no mirarla en este momento, está muy hermosa así.
-Eh... bueno... dormirás acá si? Yo me voy a la habitación de Yeyo. -bajo un poco la camisa y me miro a los ojos, tenía el pelo suelto y un leve rubor en la mejilla-
-No...no es necesario Peter. Puedo dormir en el sillón.
-Ni manera. Dormirás acá.
-Bueno... puedes quedarte si quieres. -la mire y bajo la mirada- No me gusta dormir sola, a veces tengo pesadelos y no me gustaría desperta a tu hermano. -sonreí y asentí, no sé cómo podré aguardar estar en la misma cama que ella, pero si me quería aqui, es aqui que estaré-
-Está bien, puedes acostarte si quieres, voy a cambiarme y vuelvo. -asunto sonriendo y me fui al baño, me puse unos shorts de dormir y estaba sin remera como dormía normalmente-Entre en la habitación y ella ya estaba acostada, tapada solamente hasta la panza dejando torso descubierto. No sé cuando me demore pero se veía que estaba cansada, respiraba pausadamente y sus ojitos cerrados le daban una imagen demasiado tierna.
Me acosté a su lado y me tape hasta la cintura como ella, tenía ganas de abrazarla y que se duerma en mi pecho como en la cabaña, pero eso sería invasor su espacio, cosa que no me atrevi a hacerlo.En el medio de la noche me desperté, un acto de puro impulso y sensación. Sentí un calor que no era mío y mire mi torso, ahí estaba ella. Aferrada a mi. Su cabeza sobre mi pecho y su brazo sobre mi cintura, yo tenía un brazo mío sobre su mano, con nuestros dedos entrelazados, y el otro rodeando su cintura y pegándola a mi. No sé en que momento nos quedamos así, pero se sentía demasiado bien. Encajábamos a la perfección, nuestros cuerpos tenían una sintonía y una manera que nos hace querer estar juntos mismo sin saber, mismo sin pensar hacerlo, como si estuviéramos juntos realmente y nuestros cuerpos se conectasen con nuestras mentes y corazones, formando una unión única y con un encaje perfecto.