70. Adiós Melanie

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Melanie:

- Hola cariño - murmura él hombre frente a mi - me alegra que decidieras venir, no estaba seguro de que fueras a aceptar -da un paso hacia mi y al notar que no me muevo se acerca mas y quiero alejarme, de verdad quiero pero estoy petrificada, en completo shock y no me creo capaz de moverme.

- Esa es mi manilla - señalo su muñeca, él baja la mirada y asiente mientras la acaricia con los dedos - ¿Por que tiene mi manilla? 

- Tu me la diste cuando eras pequeña, supuse que podía seguir usándola - asiento lentamente y trago saliva, esto es incomodo a un nivel exagerado. - ¿Quieres tomar algo? - Niego lentamente

- Tengo prisa, mi novio me esta esperando - entorna los ojos

- Estas grande y hermosa, si te veía en la calle no te reconocía -murmura y yo ruedo los ojos volviendo en mí

- Han pasado ocho años, era obvio que no estaría igual - respondo borde, mira sobre mi hombro y frunce el ceño 

- Ese chico del auto, ¿Es tu novio? - Miro en aquella dirección y veo a David recostado en el auto con las piernas y brazos cruzados mirando en nuestra dirección. 

- No - vuelvo a mirar al hombre - es un amigo - suspira y me mira fijamente

-¿Podríamos ir a tomar algo? quiero hablar contigo y este es un lugar algo incomodo para la conversación que tendremos -suelto una bocanada de aire y asiento abrazándome a mi misma. 

Siento que tengo tanto para decirle a este hombre pero no tengo idea de por donde empezar. Quiero saber tantas cosas pero al mismo tiempo siento que estoy mejor en la ignorancia, siento que si sé sus motivos para irse lo primero que querré hacer sera estrellas su cabeza contra el suelo y dudo poder contenerme. Él me hace un gesto y yo empiezo a caminar, David me mira interrogante y yo me acerco a él.

-Vamos a ir a tomar algo ¿Quieres venir?- me besa la frente y niega

-Esto es algo entre ustedes dos, no creo que deba meterme en medio. Te espero en el coche ¿Vale?- asiento y le beso la mejilla 

-Gracias por hacer esto, se que es difícil para ti- se encoge de hombros

-Debo admitir que me hace sentir especial que cuentes conmigo para cosas tan importantes de tu vida y no con mi hermano- aparto la mirada incomoda 

- No creo tardar mucho 

-Melanie- lo escucho llamarme y me giro para seguirlo, entramos en una pequeña cafetería con estilo bastante moderno y nos sentamos en la ultima mesa, él pide un cafe y yo un tequila con sal y limon, Si me enfrentarse a él no quiero estar completamente sobria -Bueno... henos aquí

-Han pasado 8 años desde la ultima vez que hablamos, y el tiempo ya no se puede recuperar así que ni siquiera intente salir con la excusa de que me busco para recuperar el tiempo perdido porque no me lo trago. -Entorna los ojos y yo decido que lo llamare por su nombre  - ¿Que es exactamente lo que quiere?

-Tienes razón, el tiempo ya no se puede recuperar pero por lo menos puedo intentar remediar un poco el daño que pude haber causado- intenta tocar mi mano pero yo la aparto, no quiero que me toque -Veo que estas hecha toda una mujer, tu madre debió hacer un muy buen trabajo- lamo mis labios 

-Ya no soy la misma de antes Matthew, ya no tengo diez años, ya no soy la que come dulces sin cesar, ya no soy la niña que inventa historias y soñaba con ser grande. - Gesticulo mientras hablo para dar énfasis a lo que digo -Ahora soy la chica que perdió a su padre y se crió con un padrastro que le cobro todo en cuanto empezó a crecer, soy la mujer sin alma ni corazón que cambio a su novio por el hermano de este sin siquiera pensarlo, soy la que no puede dormir sin medicación a causa del pánico que me causa tener pesadillas, soy la que vive en una casa gigantesca con un hombre que cree que soy una puta. Soy la mujer que aprendió del lado malo de la vida pero no permite que su máscara de borre. Eso soy ahora padre.- Escupo mientras veo que cada una de mis palabras le molesta e incomoda

muñecas 2 [Sin Editar]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora