muñecas 2 [Sin Editar]

82. solo seré otra

-¿Que haces?- pregunto apartando el cabello de mi rostro. Julián levanta la cara y me mira palmeando el lugar junto a él

-Ven, siéntate - sonrió y lo hago -Quiero hablar

-¿De que?- suspira y me mira unos segundos antes de sonreír

-No se, algo

-¿Que es algo?- se recuesta en el borde del yate mirando hacia las estrellas

-No lo se... ¿Que es lo más cursi que le has dicho a alguien? - le miro sorprendida sin saber que responder y el sonríe de lado -Bien, si no quieres no respondas, es una pregunta extraña

-No se... - lamo mis labios y a mi mente vienen varias imágenes de David: el día en que le conocí, el día en que me llevo a su casa por primera vez, cuando conoció a mi mamá, cuando tuvimos sexo la primera vez, cuando conocí a su hermano, cuando le cambie por su hermano y cuando me dejó ir. -Le dije a la persona que más he amado, que merecía a alguien que lo amara y que le diera más de lo que yo alguna vez le di- le veo inclinarse y de una mini nevera saca una botella de Brandy

-¿Quieres?- tomo la botella y le doy un gran sorbo quemando mi garganta

-¿Y tu?- ríe levemente quitándome la botella de las manos

-Le dije que la amaba- da un trago

-¿Que es lo que te respondió? - suelta un profundo suspiro

-Que me amaba también. -vuelve a beber - aún puedo escuchar su voz en mi cabeza diciendo que me ama - me tiende la botella -¿Que fue lo que respondió mi hermano?- le sonrió sin ganas y bebo

-Que fui lo mejor que alguna vez le paso- ríe suavemente negando con la cabeza

-¿Quien es la persona que más extrañas?- doy otro trago

-La persona que creía que era mi padre. -me recuesto quedando con mi cabeza en sus piernas -Aquella que nunca me dejaría y que siempre cuidaba de mi - pone su mano en mi cabello dando una suave caricia -aquella persona que siempre olía a café y pintura, que siempre tenia una sonrisa en el rostro y que amaba a mi mama. 

-Tu padre siempre será el mismo- murmura -siempre te va a querer

-Ahora tiene otro hijo

-Eso no hace que te quiera menos- me pasa la botella y yo me incorporo levemente para tomar un trago antes de volver a acostarme - Tu no dejas de querer a David porque estás conmigo, no dejas de extrañar tu casa aunque tengas ese apartamento y no dejas de querer a tu padre porque ahora tengas un padrastro. - le miro notando que mira hacia el cielo y de alguna manera me siento en paz y tranquila, con el suave oleaje sacudiendo el yate y el tenue viento soplando en nuestros cuerpos, es una sensación casi celestial y me encanta. Si pudiera sentir algo toda mi vida, sería esto.

-Si me quería tanto ¿Porque me dejó?

-No lo se, eso tendrás que preguntarle a él. Tal vez tenia una buena razón.

-Tal vez...- cierro los ojos -¿Porque yo?

- Porque eres guapa- responde sabiendo a que me refiero

-Luce también lo es

-Si, ¿Por que en lugar de seguirle dando vueltas a esto no disfrutas?

-Porque si no tenes una respuesta para eso yo solo seré otra y todo esto se terminará en algún momento- baja la mirada hasta que choca con la mía

-Sabes perfectamente que eso es lo que pasará. - Asegura -No te jure amor eterno ni nada de eso. Solo te ofrecí un escape a tus problemas y te traje a una ciudad donde puedes comenzar de cero en el momento en que esto acabe - vuelve la vista arriba y yo le quito la botella