Las Crónicas de Fuego: los cuatro príncipes del infierno

Salvamos la ciudad

Nathaniel: National Mall

La cúpula cayo en mil pedazos ante el rugido de Fenrir, el lobo miraba calmado a su rival mientras el contrario lo miraba furioso y sediento de su sangre. Surt profirió un grito de guerra aterrador y se lanzo contra Fenrir con los puños en llamas, lanzo una bola de fuego negro contra el lobo, este lo esquivo con bastante facilidad. La bola impacto contra la hierba incendiándola y encerrándonos en un circulo de fuego negro. Eikki saco un hacha de guerra vikinga de mango corto que casi le doblaba el tamaño, la hoja brillaba a la luz del sol veraniego mientras el niño rubio sonreía de manera inocente y miraba pidiendo permiso a la chica que ataco con anterioridad a Spencer, esta asintió haciendo que la sonrisa inocente se transformara en una sonrisa traviesa, miro a Nils que estaba a mi lado.

-amigo ahora veras de lo que soy capaz. -y con esa sonrisa se lanzo al ataque. Subió al lomo del gigantesco lobo, el dios animal empezó a correr hacia Surt el cual miraba con cierta superioridad a sus contrincantes.

-¿de verdad piensas que un bastardo de Asgard tiene las cualidades para derrotarme? -miro con desprecio al lobo. -me das lastima.

Eikki salto del lomo del lobo y golpeo con la parte lisa de la hoja a su enemigo. Surt, al cual había pillado de sorpresa el ataque salió volando hasta chocarse contra el lago que hay frente al Lincoln memorial. Eikki se lanzo en picado contra el gigante de fuego y volvió a golpear con el hacha a Surt pero este detuvo el ataque con las manos, intento fundir el hacha con el calor que desprendían sus manos pero el arma no se fundía.

-buen intento pero este hacha fue forjada por los enanos que fabricaron Gleipnir (las ataduras con las que los ases encerraron al lobo Fenrir) y fue forjada con el fuego de Nidhug (dragón de la mitología Nórdica que vive en las raíces del árbol de los mundos). -sonrió de nuevo, aprovechando la incredulidad de Surt libero su hacha y volvió a golpearlo con esta lanzando lo contra nosotros. Nils se lanzo sobre mi apartándonos de la trayectoria de Surt, Eikki grito desde el lago.

-lo siento chicos, la próxima vez tendré mas cuidado. -Nils fulmino a su amigo con la mirada. Me miro a mi y dijo.

-ve preparando el portal al lugar de donde provenga este monstruo. -mire interesado a Nils era la primera vez desde que lo conozco que lo veía dar una orden lo que me impresionaba.

-¿y que harás tu pequeño príncipe? -miro hacia donde luchaban Surt y Eikki.

-derrotare a Surt y salvare la ciudad. -el chico empezó a desprender un aura de liderazgo que hasta ahora no había tenido. Sonreí confiado.

-Ok, un portal hacia Muspelheim marchando. -Nils encendió sus manos con el fuego escarlata, sus ojos volvieron a billar, bajo sus pies apareció una estrella de cinco puntas dibujada a fuego, el chico apoyo sus manos sobre la estrella y en sumerio dijo.

-"fuego de lo mas profundo del mundo enciende las puertas de los infiernos y trae a los cuatro jinetes del apocalipsis a mi presencia para servirme en mis mas oscuras misiones".

Frente a Nils apareció una puerta de acero totalmente negra, en la parte superior de esta estaba escrito en griego antiguo "todos los caminos de la vida convergen aquí" bajo la inscripción había grabada una cabeza de carnero con una estrella de cinco puntas invertida en la frente y con rubíes por ojos. Las puertas se abrieron de golpe dejando ver a cuatro jinetes, el primero montaba sobre un caballo blanco y vestía con un traje lujoso de Louis Vuitton, en su cabeza llevaba una corona de oro que desentonaba con el carísimo traje, el segundo jinete montaba sobre un caballo rojo y llevaba el uniforme de gala del ejercito estadounidense, el tercero también vestía un traje de Louis Vuitton, montaba sobre un caballo negro y sostenía su móvil desde el que veía los últimos movimientos de la bolsa de Wall Street, por ultimo salió un caballo bayo, sobre su lomo estaba un esqueleto totalmente cubierto por una túnica negra y en su mano llevaba una guadaña. Tanto caballos como jinetes se arrodillaron ante Nils.