Mi Amor Peligroso

24-noche de chicos...

                          SAM

Después de varias horas de hablar con los chicos de la pandilla, reirnos de las estúpidas, beber, bueno yo no tanto, jugar estupidos juegos, como disparar a botellas de cerveza, claro yo gané, tenía buena punteria. Miré el reloj de mi muñeca y comprobé que eran las 2 de la mañana.

—  hola chicos!! —escuché un grito y los chicos festejaron, logré vizualizar de quien se trataba, era Eathan, un amigo que viajó a México, traficando la mercancía que Martin envió a ese pais. Él se acercó y yo le sonreí claro porque no lo atraparon— Sam! Hermano cuanto tiempo —dijo mientras me pasaba la mano.

— solo fueron dos semanas —dije y los chicos rieron.

— bueno... —alargó y se sentó a mi lado en la barra— te estuve llamando y no me contestabas ¿qué pasa? ¿Estás enojado conmigo? Porque hasta donde sé no he hecho nada en tu contra —dijo levantando sus manos. Mierda lo había olvidado, mi teléfono lo tenía el idiota que se hizo pasar por mi he hizo que Sarah me dejara plantado en nuestra primera cita. Dios como lo había olvidado, seguro que por lo que pasó con mi padre. Bueno ya estaba ingeniando algo.

— Eathan ¿me ayudas en algo? —le pregunté y el asintió sonriendo

Estabamos fuera de un club, había una gran fiesta dentro con luces y música. Bueno les contaré que haré . Le conté a Eathan sobre lo de mi teléfono y que un imbécil estaba intentando quitarme una chica, el muy idiota no paró de decir que nadie se metía conmigo. Bueno el plan consistía en asustar al imbécil para que se alejara de Sarah, no iba a permitir que me la quitara de ninguna manera, ella era mía y punto. Entramos al club y le hice una seña a Eathan para que nos separemos para así buscarlo, si alguno lo encuentraba teníamos unos comunicadores en la oreja, obviamente Eathan sabía de quien se trataba. Lo busqué, pero no lo encontré.

— Sam...Sam ¿estás hay? —preguntó Eathan por el comunicador.

— si aquí estoy ¿lo encontraste? —

— si está detrás del club con una chica, lo tengo en la mira —

— atrapalo y no lo dejes escapar hasta que llegue —dije caminando entre la gente.

— por dios Sam ¿con quién crees que estás hablando? —habló ofendido.

— hablo con un completo idiota que dejó escapar a uno —dije ya llegando donde estaba ,visualice a Eathan con su pie aplastando la cara de Augusto, me acerqué y Eathan sacó una navaja de su bolsillo.

— oye eso fue un accidente —dijo refiriéndose al tema anterior, yo solo rodé los ojos.

— Augusto... —lo llamé colocando de cuclillas y de di un par de golpesitos en la cara— levantalo —le ordene a Eathan quien obedeció y lo puso de rodillas. Augusto sonrió.

— ¿crees que me das miedo solo por que le dijiste a éste para que me atrapara? —preguntó y se hechó a reir, Eathan subió una ceja y yo solo sonreí.

— ¿y crees que estaba jugando cuando te dije que te des por muerto? —cuando terminé la frase Eathan colocó la navaja en la garganta de Augusto quien se asustó y yo reí al ver su cara— será mejor que te elejes de mi y de Sarah... —lo amenace y me acerqué más a él— si no te irá muy mal —noté que respiraba con dificultad por el miedo que tenía a pesar de que no lo quería demostrar— por cierto, me devuelves mi teléfono el lunes ,ha y si le dices a alguien de esto, recuerda que sé donde vives —dije y Eathen lo soltó ,Augusto quedó también con las manos en el piso, aproveché su posición y le di un punta pie en el estómago, cayó al piso por completo y gimio de dolor.