Las Muñecas de La Mafia

Italia no es para ti -Capítulo 5

-Laura, Dime de una malparida vez. Dijo Manuel

-Mate a Milá, la menor de las Stone y les deje un pequeño mensaje en su brazo. Dije

Nos alejamos un poco y nos escondemos donde podíamos ver a las Stone.

Cuando Susana se bajó de el auto se acercó a Verónica y le dijo algo a lo cual Verónica se encogió de hombros, hasta que fijó su vista hacia donde estaba el cuerpo inerte de su hermana y lanzó un grito, en ese momento Verónica se volteó y cayó de rodillas en el suelo. Lo logre, las debilite, son débiles sin su Hermanita.

Después de ver aquella maravillosa y bella escena nos subimos en el auto y nos fuimos a casa.

Cuando llegamos todos estaban en la sala, con cara de preocupados, cuando entramos todos dieron un brinco.

-¿dónde estaban? ¿porque estas tan despelucada? ¿tan rápido y ya cogiendo? ¿porque tienes sangre en la blusa?. Dijo Edward, que tiendo se preocupaba.

-bueno, estábamos en las carreras y lo mejor de todo, mate a una Stone, ahora responderé a tus preguntas Edwardito, Carreras a unas calles de aquí, estaba peleando con una Stone que ahora les diré quien y como, cogemos desde que llegó aquí y no necesito tu aprobación, porque mate a la Stone con mi navaja y salpico. Dije

-a ver si entendí, se fueron a las carreras y no fueron a la escuela porque planeaban matar a alguna Stone, así que diciendo a quien y como. Dijo Martín

-mate a Milá Stone, la menor de ellas, por ende la mas querida y con la que se debilitaran para hacer más fácil la tarea de que desaparezcan de Italia y nos dejen a los grandes hacer lo nuestro. Tomé un momento para respirar. -la mate de un navajazo en el cuello y en el pecho y cuando ya estaba en su último suspiro le escribí en el brazo que Italia no era para ellas y que nunca lo sería. Dije

-eres una total genio, debilitaste a la Mafia Estado Unidense. Dijo Devond.

Después de eso nos fuimos a dormir, bueno eso creían los demás porque mi habitación tenía aislante, o sea no se escuchaba de afuera a dentro.

Nos desnudamos poco a poco y tomando el tiempo necesario para sentirnos, basarnos y a cariciarnos, pero no por eso fue suave, Manuel sabía como hacerlo, Duro e intenso, fuerte y caliente, como nosotros, una mezcla rara y salvaje, peligrosa y sobre todo letal.

Después nos fuimos a dormir ya con la dosis de cansancio necesario, nos dormimos profundamente.

A la mañana siguiente nos despertamos y nos bañamos, nos alistamos para el Instituto ya que los chicos habían pedido traslado de Milán a Florencia entonces ya íbamos todos en el mismo Instituto, podríamos estar juntos.

-Bien chicos, en la escuela Manuel es mi novio, Martín el de Cass, Devond el de Aleja y Edward tu el de Sunny, yo hablé con ella y dijo que encantada.

Ya así nos fuimos en los autos habituales, pero los chicos conduciendo ya que las chicas haríamos la entrada triunfal claramente con Sunny que ya estaba en el auto con Edward.

Manuel y yo íbamos adelante, Cass y Martín a la izquierda, Aleja y Devond a la derecha y Sunny y Edward atrás ya que Franko se había ido de vacaciones con sus padres a Australia.
Cuando llegamos al Instituto se nos quedaron viendo como siempre, pero la sorpresa se la llevaron cuando vieron a los chicos bajar con el uniforme y tomados de nuestras manos.

Las más afectadas fueron las Stone las cuales nos miraban y se les escapaba las lágrimas, pobre criaturas.

-Stone ¿no?. Dije y ellas me miraron

-si, soy Verónica Stone y ella Susana y ustedes son los Di'Binchi y los Mc'Daniels, las dos mafias más poderosas de Italia y Europa en general. Dije la tal Verónica

-ustedes las Stone, las mafiosas Estadounidense a las cuales les mataron ayer a su hermana Milá la menor. Dije cruel

-¿cómo lo sabes? Tú sabes algo no. Dijo Susana

-Si yo supiera o no, no importa, pero les diré algo perras sarnosas, Italia no es para ti, su pobre mafia no durará un año, miren que ya están desapareciendo y aprendan a desaparecer de donde no las ven, a irte de donde no te quieren y a no regresar de donde nunca estuviste, Italia es para los grandes, los Di'Binchi, los Mc'Daniels y los Di'Laurentti, las Stone son peso aquí, un peso que estorba. Dije y seguí caminando como la Perra que soy.

Manuel se me acerco al oido y me dijo Esa es mi Perra favorita. Y me tomó de la cara y me beso, su lengua y la mía hicieron una batalla mientras todos nos veían.

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Las clases pasaron rápido gracias a que Manuel estaba conmigo en todas y nos pusimos a hablar de todo lo que se nos ocurrió porque para ser sincero , me sabía de memoria lo que estaban dando.

Al salir me entró una llamada telefónica de Edward.

Laura, estamos en el hospital, a Sunny la atacaron las Stone con una navaja y se la clavaron en la pierna, esta perdiendo sangre en abundancia y se necesita una transfusión, lo malo es que es AB- y hasta donde yo se la única con ese tipo de sangre eres tu.Dijo Edward.

Voy para allá, llegó en cinco minutos. Dije.

Corrí hasta mi auto con Manuel pisandome los talones, hasta que me alcanzó y me tomó del brazo.

-¿dónde vas? Dijo

-al hospital, Sunny esta herida y necesita una transfucion de sangre la cual le puedo dar, tenemos el mismo tipo de sangre. Dije y Manuel se montó en el auto y arrancó.

Al llegar me baje lo más rápido que pude y fui a la recepción a ver en donde estaban.

-¿la puedo ayudar?

-si, necesito saber donde esta Sunny Di'Binchi.

-¿es su hermana?

-no lo se, eso creemos.

-primer piso, tercer puerta a la izquierda.

Me fui corriendo si dar las gracias.

-Sunny!, Doctor hágame los exámenes dígame si le puedo dar la sangre.

-bien, necesito una muestra de sangre tuya y una de Sunny.

-bueno pero m uevase que no ve que se desangra. Le dije "dulcemente al médico "

Llevaba medio hora esperando los resultados y estaba perdiendo la paciencia, Manuel seguía allí acompañamdome y ayudándome a tranquilizarme.

-Laura Di'Binchi, pase porfavor. Dijo una enfermera.

- ya voy, Manuel quédate, te necesito. Dije y entre.

Cuando entre el Doctor estaba con esas tablas donde se ponen los resultado.

-bien, Felicidades, vea a su hermana. Puede robarle sangre, ya que son familia y el ADN es el mismo, haga el favor y recuérdese en aquella camilla que ya va a empezar la transfucion. Dijo el Doctor

-Laura, somos hermanas, hermanas de sangre, somos Di'Binchi ambas, las originales. Dijo Sunny emocionada

-nunca te separadas de mi lado ahora hermana, ya que tu eres la mayor pero yo sigo al mando. Dije

-claro, yo no podría manejar la Mafia como tu, además no soy tan despiadada como tú. Dijo mi HEMANA.

En ese momento entró Manuel y se puso como loco.

-¡SON HERMANAS ESTUPIDAS, LAURA TIENES UNA HERMANA VERDADERA!. Dijo muy clamadamente Manuel

-Amor lo se me acabo de enterar, tu novia tiene una hermana mayor. Dije

-¿novia? Esto me está gustando cada día más.

-lose, somos novios desde que lo hicimos por primera vez.

-de eso me Di cuenta.

-chicas la transfucion empieza, te sacaremos un litro y medio de sangre. Dijo la enfermera

-haga lo que haga falta. Dije