"Entonces se dijeron el uno al otro: Verdaderamente somos culpables en cuanto a nuestro hermano, porque vimos la angustia de su alma cuando nos rogaba, y no lo escuchamos, por eso ha venido sobre nosotros esta angustia. "
Génesis 42.21
Quiero expandirme de mis ramas, tocar el cielo y sentir su presencia. Pero hay algo que me lo impide. Me vuelvo y esas manos verdosas con esas garras largas y negras me atrapan otra vez. Una luz resplandeciente renace de los cielos y yo sigo suplicando por ayuda. La angustia y el terror me llenan y siento que voy a morir. Me quedo en la orilla, doblegada y tratando de soltarme de las manos. Grito pero nadie me ayuda << ¿qué está pasando?>> pienso al momento que siento las garras hundirse sobre mi piel.
De nueva vez ha sido una pesadilla. Diana que se encontraba al lado mío, se levanta y me sacude. Yo despierto sudada y sobresaltada, muerta aun de miedo y tratando de recuperar el aliento. Respiro atormentada de una manera muy rápida.
ꟷ¿Que estabas soñando? Me has espantado, nenaꟷ dice Diana tocándome el pecho y ayudándome a tomar aire.
ꟷ Fue solo un sueño... has dicho tuꟷ digo tomando aire
ꟷ Ya cálmate, ven entra a ducharte en lo que nos preparamos para ir a desayunarꟷ me dice abrazándome.
La sangre va bajando de mi cabeza, teniendo conciencia de que podría haber muerto de un infarto. No estaba respirando, literal. Pero Diana se mantenía tranquila, sabía que algo malo me estaba pasando. Y a pesar de ello, no tocaba el tema porque sabía cómo dolía el matar a un hijo, a un ser querido, a una persona inocente. Aun no entendía cómo podía vivir con eso el resto de su vida. En cambio yo me sentía fatal; la peor persona del mundo.
Mis músculos se relajan al sentir el agua ardiente caer sobre mi espalda. Lloro en silencio, para que nadie pueda escucharme. Pienso en que debería de contarle a mi madre, esta carga que siento es tan pesada y siento que no merezco ningún perdón. Al salir, me enrollo la toalla sobre todo mi cuerpo y me veo en el espejo. Tan fea y desgastada, esta no es la mujer de la que yo soñaba ser cuando era pequeña. Cuando busco bajo el lavabo un cepillo para peinarme el cabello me encuentro con una cuchilla filosa para depilar. Lo observo empezando a oír en mi subconsciente una voz. <<Úsala, al fin y al cabo terminaras muerta. Dejaras de tener pesadillas. Mátate. >> La tomo y lentamente me siento sobre el suelo. A lo lejos oigo pasos y enseguida tocan la puerta.
ꟷ ¡Aurora, ¿ya vas a salir?!ꟷ pregunta Diana.
Yo me vuelvo y aviento la cuchilla. Trago saliva e inhalo antes de contestar.
ꟷ Si, ya voy. Estoy cambiándome.
Me levanto y tomo mi muda. Al terminar de cambiarme y maquillarme salgo pero ya nadie se encuentra en la recamara. Salgo hacia el balcón, observando el movimiento de las olas. Respiro profundamente llenando mis pulmones de la sal y el aroma a mar. Siento como el oxígeno entra a mi pecho. ¿Cómo puedo pensar en la muerte cuando esta sensación de respirar es tan gratificante? La vida misma hace que sienta estas cosas tan hermosas. No podría, no quiero dejar de sentir, ver, oler y aun.... quiero saber que se siente sentirse amada. De lo lejos escucho.....
Nada puede apagar tu amor, Dios... Fiel hasta el final, fiel hasta el final. Que la luz de tu amor encienda un fuego en mi corazón....
Unos jóvenes se encuentran cantando y danzando sobre la arena, cerca del mar. Todos vestidos de blanco y algunos de ellos con guitarras y tambores alabando a su Dios. Verlos de esa forma, hace sentirme totalmente desgraciada. Quisiera sentir ese gozo y tener ese brillo en sus ojos. Rio y meneo la cabeza, y pensar que hace un momento la tentación de quitarme la vida me invadía. ¿En que estaba pensando? Sera mejor que salga y disfrute del día antes de que cualquier pensamiento suicida me mate.
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Esperar merece la pena ( TRILOGIA )
EspiritualAurora nunca imagino que una desicion podría marcar eternamente su vida. Cautivada por las costumbres, tentaciones y las modas del mundo, Aurora cuelga su vida de un hilo al dejarse llevar por deseos y amistades que liberan en ella lo peor. Entre su...