Capítulo 20

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11 Meses después...

Narra Michael:
Pasaban días de mucho estrés y trabajo, la cantidad de cosas que me esperaban hacer parecían no terminar pero.. al llegar casa y ver a mi esposa con ese vientre notorio me llenaba de una felicidad que podría jurar me haría explotar de la emoción.

Meses después de haber regresado de nuestra Luna de Miel, nos enteramos de que un pequeño angelito venía a nuestras vidas. Venía a recordar el gran amor que Lisa y yo nos tenemos.

Los primeros meses estuvieron tranquilos, pero cuando el vientre de Lisa empezó a crecer, cambios de humor y unas cuantas discusiones aparecieron. Pero se los atribuía a que el cambio en su cuerpo por el embarazo era el que causaba tales acciones. Yo me encargaba de cuidarla y traerle todo lo que necesitara.

Solo faltaba una semana para que Lisa entrara al hospital y así poder tener máxima seguridad de su progreso antes de que el doctor pudiera practicarle el procedimiento para conocer a nuestro bebé. Quisimos esperar al nacimiento para saber si era un niño o una niña.

(A los pocos días, Lisa presentó dolores en su espalda baja y decidieron ir al médico para un chequeo rápido. Pero terminaron por saber qué ella ya se encontraba en labor de parto y la tuvieron que alistar para empezar todo.

Fueron muchas horas de trabajo pero felizmente todo salió bien y el bebé nació sano y en excelentes condiciones.

La pareja y su hijo recién nacido estaban ya en su casa. Lisa había presentado complicaciones después del parto por lo que se tuvo que quedar unos días más en el hospital. Finalmente la dieron de alta y se encontraba en reposo.

El día después de que todos estuvieran en Neverland, los familiares de Michael y Lisa los fueron a visitar para conocer al nuevo integrante de la familia. Estaban encantados y enternecidos por el pequeño bebé.)

-Michael-
Debido a un par de cosas que tuve que posponer por el nacimiento de mi hijo, me encontraba ahora resolviendo algunos papeleos. Decidí hacerlo de una vez para evitar más retrasos e, inclusive, adelantar más cosas y así pasar aún más tiempo con mi esposa y bebé.

Mi pequeño Prince, había nacido sano. Tenía unas facciones tan finas y me daba tanta alegría saber que ya estaba junto con nosotros.

Por las mismas razones de trabajo, le pedí a Taylor si podía hacerme el favor de cuidar a Lisa y ayudarla con el bebé. Mi familia se encontraba algo lejos del rancho y no quería que hicieran viajes largos todos los días, de igual forma quise evitarlo para la familia de Lisa.
Taylor aceptó y cuando podía llamarla, ella me comunicaba el estado de las cosas.



Taylor: Te traje un poco de té Lisa (le acercó la taza)

Lisa: (se encontraba reposando en su cama) Déjala mejor en esa mesa. Lo tomaré más al rato.

Taylor: (hace lo que le pidió) Sabes, si quieres puedo ayudarte a levantarte y caminar un poco. Aunque sea por los pasillos de este piso para que tu cuerpo no se tensé de que estés mucho tiempo acostada.

Lisa: Yo sé lo que mi cuerpo necesita. Estoy bien.

Taylor: Entiendo pero-

Lisa: Preferiría que solo nos dirijamos la palabra cuando sea necesario. Por el momento estoy bien.

Taylor: (suspira) De acuerdo. (Va hacia la salida de la habitación) Pero, puedo pasar ver al bebé a su habitación?

Lisa: Como quieras (se acuesta para empezar una siesta)

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