No Me Dejes Ahogar

Capitulo 17:

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¿Que debes hacer cuando no encuentras salida estando sola?
La mayoría de las personas dicen
"Debes ser fuerte y luchar"
Hablar es fácil, pero nadie sabe lo que exactamente sientes en ese momento.
Nadie sabe que esta pasando por tu cabeza, el jodido dolor que tienes que soportar, fingir no es fácil y cada vez se hace peor no encontrar una salvación.
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Pasaron los meses, justo hoy sería mi graduación, Lee y mis padres estaban ahí, pero eso no me importó del todo, yo lo quería ver a él y nunca apareció.
Cuando acabó la ceremonia, en vez de ir con mis padres, fui en busca de Oliver, no lo encontré.
Él prometió estar ahí.

Me llevaron a cenar y todo el rato estuve pensando en él, mi molestia se notaba a kilómetros y no quería desquitar me con mis padres.

-Hija ~habló mi mamá~ ¿Volverás a casa con nosotros?
-¿Qué? No, no, estoy bien con mi hermano, o acaso él te dijo que no me quiere, ¿es eso verdad? ~hable desesperada~ Te odio Lee, te odio.
-_____ Malia ~gritó~ tu hermano no me dijo nada, ni siquiera se porque te estas comportando así, todo el rato haz estado de malas, ¿que te ha pasado cariño? No eras así.

La vergüenza invadió mi ser, ¿por qué era así? que había sucedido conmigo, era verdad, yo no era así, nunca antes me había comportado así, no con ellos.

Comí en silencio, evadiendo las miradas de mis padres.
Regrese con Lee a su casa, entre corriendo esperando ver a Oliver y no estaba. Los chicos me felicitaron y me sentí mal, después de todo ellos se siguen comportando muy lindos conmigo.

Me dirigí a mi habitación desanimada, tomé una toalla y un conjunto de ropa, entré al baño, abrí la llave del agua.
Desabroche el vestido dejándolo caer, baje mis bragas y entre a la ducha.
Relajé mi cuerpo con el agua tibia que ahora caía sobre mi cuerpo.

Pasados 20 minutos salí, me había olvidado del maquillaje, lo traía todo corrido. Tomé una toallita especial para estos momentos y la pase por mi rostro un par de veces, quitando todo rastro de maquillaje.

Me vestí, cepille mi cabello y mis dientes, me recosté en mi cama esperando a caer dormida.
A los minutos tocaban mi puerta, sin ganas me levante y la abrí, era Lee.

-Los chicos quieren que bajes.
-Estoy cansada Lee.
-Lo sé, pero ellos quieren verte, te tienen una sorpresa.
-¿Una sorpresa? ~sonreí.
-Sí, anda, baja ~rió.
-Espero y no sea una broma tuya little bear ~sonreímos.

Ése era su apodo de pequeño; bajamos tomados de la mano, los chicos estaban en el salón, en cuanto me vieron corrieron a abrazarme.
Me dieron regalos y estuvimos bebiendo el resto de la noche, no tendría a Oliver pero si a unos amigos que valen mucho la pena.

Desperté en la habitación de Oliver, desnuda. No había nadie a mi lado.
Tomé mi ropa y comencé a vestirme, no recordaba nada y mi cabeza me estaba matando.

Entró Oliver a la habitación, en cuanto me vió sonrió grande.

-La pasamos muy bien anoche gatita.
-¿Que paso?
-¿No lo recuerdas? ~negué y él rió~ anoche te hice mía.
-Joder ~mis mejillas comenzaron a tornarse rojizas.
-Descuida linda, estuviste increíble.
-Tengo que irme.
-Tu no vas a ningún lado.

Su mirada cambió radicalmente a una diferente, sus ojos se hicieron oscuros y en ella se reflejaba el odio y rencor.
Trague grueso y me senté en la cama.

-¿Por qué estabas con ellos?
-Me invitaron a beber, sólo quería pasar un rato con ellos, Oliver, también son mis amigos.
-Tienes prohibido pasar tiempo con ellos, no te quiero cerca, ¿entiendes?

Apretó mi mandíbula y me besó.
-Ahora eres sólo mía Ha.. Coño ~gritó.
-Ya basta Oliver, estoy harta.
-Jodete lindura.

Salió dando un portazo.
Mientras yo secaba las lágrimas y salía directo a mi habitación.
Me estaba costando seguir con esta relación.