Amor Contra Aceptación (Brittana).

Capítulo 4: Fantasmas del pasado.

Santana entró en el gran salón donde se encontraba la alberca de la escuela, se quedó unos instantes en la puerta admirando con una sonrisa inocente porque en el techo había montones de globos en forma de corazón, tantos que lo cubrían totalmente. Había rosas por todos lados, el aroma era precioso e inigualable, había docenas de notas de amor cubriendo las paredes, todo lucía increiblemente hermoso. Caminó hacia adentro, notó que la alberca estaba cubierta y no podía ver el agua, le pareció extraño pero no le tomó importancia. Esperando reunirse con aquella chica que tanto le insistía en que se vieran, esa chica que le había dejado cartas y regalos anónimos en su casillero durante los últimos dos meses, ya era Día de San Valentín, día perfecto para conocerla. Cartas realmente cursis, chocolates, todo tipo de presentes simples pero lindos detalles siempre.

De pronto la magia se apagó, su sonrisa se desvaneció en un abrir y cerrar de ojos, ya se encontraba empapada, todo se volvió oscuro, ella apareció desnuda y en medio de la nada. ¿Qué estaba sucediendo?

-¡Maldita lesbiana de mierda!

-¡Nadie te quiere aquí cerda!

-¡Alejate de mí asquerosa, me vas a pegar algo!

Escuchaba los insultos y las risas pero no podía ver absolutamente nada, todo era oscuro y no entendía lo que pasaba, quería salir de ahí pero no sabía cómo, no tenía a dónde ir. Sus agresores aumentaban el tono de su voz y Santana cada vez se hacía más pequeña, la ansiedad y la desesperación le estaban ganando. De pronto despertó exaltada y soltó un grito ahogado, su respiración aumentó tan rápido que le costaba trabajo hacerlo, comenzó a sudar abundantemente, su corazón no paraba de latir a un ritmo acelerado. Se levantó quedando sentada en la cama aún muy alterada.
Quinn inmediatamente sintió el movimiento en la cama, despertó lentamente hasta que cayó en cuenta de que su amiga acababa de tener una pesadilla y tenía un ataque de ansiedad. Se acercó a ella rápidamente, la abrazó fuertemente por atrás mientras le decía "Santana, Santana, reacciona, por favor Santana reacciona" y gritaba desesperada implorando la ayuda de Maribel.

En ese momento se abrió la puerta de la habitación, entró Maribel rápidamente, observó la escena que tenía en frente, salió a la cocina, encontró una bolsa de papel y regresó rápidamente a la habitación de Santana. Entró y colocó la bolsa cerca de su hija para que su respiración se calmara y poco a poco esta se fue tranquilizando. Santana comenzó a reaccionar, se quitó la bolsa de la cara y aunque seguía algo agitada se mantenía estable. Las lágrimas corrían por su rostro intentando olvidar aquella pesadilla tan horrible que había tenido mientras Quinn y su madre se encontraban a su lado, intentando tranquilizarla para que recuperara el sueño.

-Ya pasó San... ya pasó...-repetía la rubia mientras la retenía fuertemente contra su pecho-.

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Rachel despertó la mañana del sábado, era una mañana agradable, soleada pero fresca, pareciera que sería un día perfecto. No estaba segura de lo que haría pero el día pintaba para algo bueno. Y no se equivocaba, en ese momento un mensaje llegó a su celular sacándole de sus pensamientos. Era la rubia con ojos color avellana.

-Hola hermosa :).

No pudo evitar sonrojarse y sonreír pero seguía molesta por la huída tan repentina de la chica el día anterior. Dudó unos segundos en responderle ya estaba a punto de hacerlo cuando llegó un segundo mensaje:

-¿Estás ahí verdad? :(.

-Hola.

-¿Podemos hablar?

-¿De qué?

-¿Estás molesta? Me gustaría que nos viéramos, sólo si tú quieres, estaré una semana en Ohio, mi mejor amiga se mudó aquí ayer, le haré compañía unos días.

-¿Hablar? ¿vernos? No quiero ver como sales huyendo al verme otra vez.

-Sabes, a pesar de que sólo te ví unos segundos, puedo decir que te veías preciosa.

Rachel se sonrojo aún más.

-No me cambies el tema. Y... gracias... igual tú :).

-Rach, quiero verte, te explicaré todo. Por favor.

-¿Puedo llevar a Brittany?

-¿Eso es un sí? :3

-¿Puedo llevar a Brittany o no?

-Qué genio, claro que sí, entonces yo llevaré a San pero, ¿dónde nos veremos? No conozco nada por aquí :(.

-Pasarán por nosotras a mi casa, te enviaré la dirección, una vez que lleguen ya les diremos a donde ir.

-Pero... bueno, como tú digas, ¿merezco que me cantes una canción si hago todo eso? :3

-No lo arruines Fabray... a las 5:00 p.m. aquí, puntuales.

-De acuerdo, te quiero Rach, nos vemos en la tarde :).

-También yo, hasta la tarde.

Segundos después le envió un último mensaje a Quinn con su dirección.

A pesar de su enojo no podía negar y mucho menos ocultar que estaba emocionada por esa cita con la rubia. De inmediato se dispuso a llamar por teléfono a Brittany.

La rubia despertó con el sonido del teléfono, revisó la hora y observó el teléfono fulminándolo con la mirada hasta que contestó molesta:

-¡Rachel! ¿Qué demonios te pasa? Son las 7:30 a.m. y es sábado.

-¡Me invitó a una cita!-dijo entusiasmada-.

-¿Quién?-preguntó algo adormilada hasta que reaccionó- oh... tu chica...-.

-Que no es mi chica, como sea, incluso la obligué a que vinieran por nosotras a mi casa-dijo presumiendo-.

-¿Vinieran? ¿Nosotras? ¿Quiénes? ¿De qué hablas Rachel?-preguntó sin entender-.

-Oh sí, sobre eso... No quería ir sola así que irás conmigo y le harás compañía a su amiga, recordé su nombre, se llama Santana.

-¿Su amiga la... la... l..la more...na q..que e...sstaba co..n..n ella ay...ye..err?-no paraba de tartamudear-.

-¡Esa misma! ¿es linda no? -no dejó que esta contestara y siguió hablando- Te veré en mi casa a las 3 para arreglarnos, no llegues tarde Brittany-colgó-.

Brittany despertó completamente desde que Rachel le dijo que saldría con la latina que tanto había llamado su atención un día antes. Estaba nerviosa, no creía que la vería tan pronto, saltó de su cama y se dispuso sin más a comenzar su día, dejar cosas pendientes listas (como su tarea), para no perder ni un minuto y que no se le hiciera más tarde para su cita con Santana. Notó su exageración en los tiempos cuando eran las 11:00 a.m. y había terminado todas sus cosas. Suspiró cansada al ver la hora, dejándose caer sobre su cama y quedándose dormida.

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¡Hola! Mi nombre es Mónica y soy totalmente nueva en esto de los fanfic, pero la verdad es que estoy disfrutando mucho el escribir esto, aunque también esperando que sea de su agrado. Aún falta mucho más y me ayudarían mucho comentando qué les va pareciendo esta historia. También se aceptan quejas y sugerencias. Gracias por leer, un abrazo enorme :).