Veintinueve.

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Narrado por Frank.

El agua corría libremente hacía algún lugar del mundo, yo solo la veía irse mientras lavaba mis manos. Ella era libre, yo no.
"Frank."
"Si!" El pelinegro me miro extrañado, luego negó con la cabeza para así acercarse a mi y acomodarme mi saco negro, el cual había llevado en mi plan de no reconocimiento junto con aquellos lentes y peinado extraño. Phil me habia ayudado a salir de la casa y contactar a Gerard, el resto lo veía yo.

Las vegas era dominado por los Way, asi que era casi imposible  el hecho de que mi padre supiera que salí con el pelinegro. "Ya esta." su sonrisa amplia me hizo sentir culpable.
"Gracias." mi reflejo en el espejo era deprimente; mis ojeras se extendían por casi todo el terreno de bajo a mis ojos.
"Frankie."
"Hmm."
"Sucede algo?." Gerard me miraba serio. Me voltee hacía el sonriendo ampliamente.
"Que podria suceder?" mi voz estaba algo entre cortada, tenía un nudo en la garganta. "Gee... no pasa nada. Solo estoy feliz de tenerte a mi lado." Apoye leve mi cara a su cuello, rodeando con mis brazos su cintura, inhalando fuerte su aroma.

Iba a extrañar eso.

Poco a poco el fue cediendo a mi mentira, sin nada que decir, me rodeo igualmente por mis hombros, depositando un ligero beso en mi cabeza, uno profundo.


"Estas listo?" dijo el mayor sonriendo de oreja a oreja.
"N-o lo se..." cerré mis ojos enseguida dejando que la sensación de la subida se calmara; el coche avanzaba a medida de que llegaba a la cumbre.
"Yo estoy a tu lado cariño" Escuche para enseguida sentir como mi corazón se salía de mi pecho; habíamos bajado para empezar las maromas de aquella montaña rusa.
Estaba seguro de que lo que oía a mi lado eran risas, asi como que aquellas risas eran a causa de mis grititos alterados a causa del movimiento. "Solo respira Frankie."
"Cállate!!" alcance a responder. Sentía ya algunas lágrimas descender hasta mis mejillas; me sostenía firme de aquel fierro que nos envolvía por seguridad, yo ya quería bajarme.

"Ves, sigue comiendo algodón de azúcar." Mis arcadas seguían saliendo mientras Gerard me daba pequeños golpecitos en la espalda para así vomitar todo lo que tenía que sacar.
Me sente en una banca limpiando los residuos de aquellos desechos. "Ten" El pelinegro me extendió una botella de agua. La tome y la bebí completa. Al acabar retome mi respiración sintiéndome mejor. "Quieres ir a por otra vuelta?" una risa burlona salió del mayor logrando que le mirara asesinamente.
"Idiota!."
"Eyy tranquilo, era broma amor." Desvíe mi mirada irritado, mi estomago estaba demaciado revuelto. "Que tal ir a almorzar?"
"Es enserio!?"
"Bueno... que tal no...." Solo le fulmine con la mirada "Lo siento cariño" Acaricio leve mi mejilla para luego depositar en un beso en mi frente. "Vamos, te llevare a casa."
"A casa?"
"Mi casa."
"Gee..."
"Aja..."
"Tengo que tomar un vuelo. "
"Por que no te quedas esta noche?, luego vemos que inventarle a Cheech." Joder. Rapido Frank, piensa rápido....
"Si!"
"Bueno entonces, vamos!."
"Digo no... no puedo por que tengo que llegar a ver a Jamia..."
"Oh." La estaba cagando. "Entiendo, vamos, te llevare al aeropuerto." Nos subimos al auto, ahora yo en el copiloto; Miraba el paisaje con un contraste del atardecer, mis manos tenian un cosquilleo tremendo; Gerard no me hablaba, ni me miraba; le veía de reojo y solo distinguía su cara sin expresión.
"En que piensas?..." Jugueteaba con mis dedos con la mirada baja.
"En nada en especial. Llegamos." Mire la entrada del aeropuerto esperandome. "Te acompañare hasta la entrada." Se quito el cinturón de seguridad, disponiendose a salir del auto.
"Gee..." Temblaba. Mi mano temblaba tal gelatina. Mi miraba estaba baja de nuevo y mis ojos cerrados con fuerza. "Espera..."Era la ultima vez, mi ultima oportunidad. "Yo..." sentía mis ojos arder por negar el acceso de descenso de mis lagrimas. "Te amo." dije sin mas. Mis lagrimas bajaron a mis mejillas al pasar los segundos sin obtener respuesta. El estaba enojado y lo entendía, pero esa sería mi ultima oportunidad. "Por favor no lo olvides. " Cerré de nuevo los ojos aun mas fuerte que la vez anterior y asi solte poco a poco su brazo.
"Yo tambien Te amo Frank." Respingue al sentir sus manos envolverme en un abrazo. Enseguida me aferre a el llorando en silencio sin derramar muchas lagrimas. Mis manos estrujaban su camisa por su espalda, queriendo jamas separarme. "Quédate cariño... quedate esta noche." Mi corazón se estaba quebrando. Sentía como toda mi alma se marchitaba poco a poco.
"N-no pue..do."
"Por que Frank!, Por que!?" Por tu bien.
"Ya te lo he dicho... Mañana ira Jamia a casa." Su cuerpo se tenso.
"Acaso..." Sentía su corazón acelerarse. "Acaso tu sientes algo por ella?...
"Que!?, no!." Me separe con esfuerzo de el. "Es solo que..." Le mire a los ojos, estaban opacos, un poco lacrimógenos. Mi culpa. "Necesito verla pues, le diré acerca de la ruptura de nuestro compromiso." Su boca se curvo logrando asi una sonrisa perfecta. Obra de mi mentira.
"Oh amor!" Su voz cambio a una llena de entusiasmo. "Te amo, te amo, te amo, te amo!!" Beso cada parte de mi cara concluyendo con un beso leve en mi boca, que yo, sin dejar que se despegue, intensifique.

Una ultima no?... Solo una...

Me puse a horcajadas aferrandome mas a el; este metio sus manos entre mi ropa acariciando brusco mi cuerpo. Mi lengua lo saboreo, grabando cada detalle de su sabor en mi mente y gusto. El hizo lo mismo; de vez en cuando mosdisqueaba sus labios para luego seguir embarcados en probarnos mas y mas y mas disfrutando todo de ambos.
Nos despegamos lentamente, sintiendo asi, la hinchazón en mi boca.
Sonreí.
"Te voy a extrañar."
"Yo mas amor. Contare los días para verte. Aun así recuerda que tengo una reunion pendiente con tu padre."
"Si, lo se..." Un ruido proveniente de mi celular nos interrumpió. "Espera..." Respondí. "Bueno?"
"Frank, Soy Phil."
"Tío Phil." Me estremecí. "Sucede algo?"
"Sigues con Gerard?"
"A-asi es..."
"Frank escuchame bien, Toma un avión directo para aca. Cheech ya sabe que estas en Las Vegas con Gerard. " Fantástico. Era mi fin.

IMPERIO "Frerard versión"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora