Doce.

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Narrado por Frank.

Habia escuchado bien??.

Mi cara de perplejidad no se hacía disimular, Gerard me estaba rechazando. Medite demasiado sobre el asunto, hice una mueca mirando a otro lado, el pelinegro solo me miraba confuso y cauteloso. Bien. Debo decidir si hacerle caso y alejarme de el o seducirle para que caiga en la cuenta de que nos gustamos y no puede hacer nada para evitarlo.

Me paré decidido a hacer un experimento, el se paro igualmente conmigo observando cada uno de mis movimiemtos.
"Bien... "
"Hmm?..."sin esperar mas me abalance a el rodeando mis manos a su cuello besandole sin pena, metiendo mi lengua a su cavidad, saboreando.

Vamos Gerard.
Se que quieres....

El no se movia, me aprete mas a el mojandole, pero haciendo que sintiera TODO de mi.

SI!.

Poco a poco y como gelatina, empece a sentir sus manos resbalándose en mi espalda, aferrandome a el.
El beso se intensifico, ahora ambos nos correspondiamos con ritmo sin parar. Era delicioso.
La falta de aire nos hizo alejarnos poco a poco.

Solo sonreí.

Gerard se hallaba rojo y sin mirarme.

Me salí poco a poco de la bañera tomando una toalla que había cerca y me seque.

"Veo que tus palabras contradicen tus acciones." dije sonriendo a lo bajo. De reojo le vi suspirando muy alarmado y nervioso.
"No se puede volver a repetir."
Idiota, acaso se creía mas listo que yo...
"Se repetirá." dije seguro. "recuerdas nuestro viaje de entrenamiento?, bueno pues seria bueno hacerlo ahora. Con esto que ha pasado, papa no se negara." señale mis heridas para luego alzar una ceja y sonreír victorioso.
"No habra viaje de entrenamiento Frank, que no entiendes!, no podemos estar juntos por mas que queramos."
"Por que no Gerard!?"
"Por que.... por que no!" solo me reí, una risa demaciado burlesca, ni siquiera tenía una respuesta a mi pregunta. Idiota.
"Vale. Sigue pensando eso. Pero te hare caer. Ya veras, ese viaje lo demostrara."
"No habrá ningún viaje. Tu iras a la escuela normal y yo te protegere. Lindsay no se ha ido así que seguire pasándo con ella las tardes hasta que se vaya. Cheech querrá que visites un medico y de paso un psicólogo. Yo te apoyaré en lo que necesites."
"Acaso crees que necesito un psicologo!?, tan mal me ves!?"
"Deliras al creer que podemos tener algo solo por gustarnos."
"Sabes que es mas que eso!!"
"No lo se!"
"A no!?. Te lo voy demostrar en ese viaje, si se hará. Asi que empaca tus maletas."
"No se hará. Ademas tienes que visitar un medico y un..."
"Estoy perfectamente bien! Fui entrenado para peores torturas. Esto no ha sido nada. "
"Frank!. Escucha!"
"No tu escuchame a mi!. Solo necesitaré ese viaje para hacerte ver que no te puedes resistir a esto. Deja de quejarte. Ahora vámonos. Papa debe estar esperandonos."

El camino a casa fue silencioso. Preferí no encender mas el fuego. No quería pelear. Realmente me dolían las heridas. Puede que si necesitara un medico, pero no le diria a Gerard, eso solo haría que se complicara mas las cosas al viajar. Ahora tenía que armar un plan para hacer que papa le obligue a llevarme a ese viaje de entrenamiento.

Tenia sueño...

Maldicion. No había comido nada ni dormido en mas de un día.

"Frankie?... Frankie!
"Hmm." me había perdido.
"Ya hemos llegado... estas bien Frank!?" Maldito capullo arrogantemente bello. Gee con aquella cara de preocupado era una exquisitez.

Solo asentí bajando de la camioneta. En la entrada pude apreciar a mi madre que corrió hacia mi llorando, su abrazo me hizo gemir levemente gracias a mi hombro, ya adentro el tio Phil me saludo seguido por Donna, mis ojos se sentían tan pesados que solo sonreí.

Papa se hallaba en la sala de mi hogar hablando discretamente con Derek, al verme despidió al chico con algo y se dispuso a acercarse a mi.

"Vaya, asi que Gerard si pudo traerte a casa a salvo." Viejo idiota. "Me alegra que hayas vuelto hijo." un calido abrazo me hizo sentir como en casa realmente de nuevo. De igual forma extendí un poco mis brazos para igual abrazarle pero una punzada en mi cabeza y mi vista totalmente negra me lo impidieron.
Cai en los brazos de Morfeo.

Narrado por Gerard.

"Deliras al creer que podemos tener algo solo por gustarnos", "Sabes que es mas que eso!!", "No lo se".

Por supuesto que lo sabía.

Teníamos algo mas que un gusto, pero no me iba a arriesgar a que me alejaran de el. Cheech era un demonio al enojarse. Si se enteraba de que Frank y yo teniamos "algo", seguro lo enviaría lejos y a mi me mataría.

Me daba igual morir por el. Pero no soportaría verle sufrir.

Suspire resignado.

"Gerard!" Me exalte al oir aquella voz
"Cheech." Dije nervioso.
"Gracias." seco, frio y orgulloso. Solo sonreí.
"Fue mi culpa que lo secuestraran era mi responsabilidad traerle. Que ha dicho el medico?" dije sonando no tan insistente e interesado.
"Estará bien, la bala no le atravesó ningun nervio y las quemaduras solo dejaran cicatrices."
"Le llevaras a algun psicólogo?"
"Fue buena idea, pero no quiere. Me ha dicho que cree mas conveniente el ir al viaje de entrenamiento que me habías mencionado."
"Pero..."
"No hay pero que valga. Derek se encargara de todo. Solo cuidale esta vez y ve que tenga una pronta recuperación emocional Gerard." Y al parecer se estaba saliendo con la suya. JODER.
" Y Lindsay!? ella aun sigue aqui... ya sabes como se pone y..."
"La mandare a casa. Tu prioridad ahora es Frank. Entendido.!?" Joder!!. Ahora tendría que luchar contra lo que haría Frank...

Descarado.

Descaradamente hermoso. Idiota. Solo se me haría mas difícil resistirme a el.
Ash.

"Entendido." suspire resignado.
"Ah y... Ben..."
"Que con el..."
"Es de los de Donald.
"Lo se."
"Haría que Derek se encargue pero..."
"Yo lo hare. No me importa que sea uno de los de Donald." dije seguro. No le perdonaría a ese bastardo el haber lastimado a Frank.
"Frankie lo hará. El quiere ser el que se encargue de el."
Mi cara llena de sorpresa e intriga se formo al instante.
"Ya vale... entiendo." Cheech asintió sonriendo. Sabia que Frank se saldría de control. Le daba igual. Si su hijo queria matarle que así lo hiciera.
Típico de los Iero.

Toque leve pero firme. Un "pase" le siguió en respuesta. Al entrar mi enojo con el se suaviso. Se veía lindo en pijama, y al estar indefenso le hacía ver como un corderito en peligro.
"Veo que te has salido con la tuya." dije apoyándome en la esquina de su cama.
"Te dije que lo haría." arrogante.
"Vale. Mañana saldremos a primera hora. Asi que te levantaras, tendremos que hacer el "asunto" de Ben antes de partir a nuestro destino."
"De acuerdo." Idiota. Aquella sonrisa que ponia solo le hacía ver mas lindo.

Basta Gerard. Duro como piedra.

Una risa me saco de mis pensamientos.

"Por que no te rindes ahora?, eso nos ahorraría el viaje..."
"No. " dije dispuesto a salir.
"Espera" el castaño se me adelanto quedando frente a mi. "Sabes que caeras..." aveces odiaba su forma de ser.
"Basta, Frank." dije acorralándolo sin parpadear. "No caeré; nada cambiara. Ni ahora..." me acerque a su oido susurrándole. "ni en el viaje, ni nunca."
Me separe sonriéndole victorioso por ser fuerte a sus encantos. Pero al parecer había perdido de nuevo.

Un Frank corderito con un puchero en la cara me abofetio sin tocarme.
Una mirada algo triste invadio su antes sonrisa de sol. Me incomodó al instante saliendo de la habitación.

Maldicion.

Solo una mirada. Una maldita mirada y aquel chico ojos avellanas, me dominaba al instante.

IMPERIO "Frerard versión"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora