El pirata y la sirena (Adrinneth)

Cap. 2

Hola a todos mis Miraculers, acá estamos con un nuevo Cap. de esta historia.

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Cap. Anterior:

Flasblasck

Cuando Adrian era un niño de apenas 8 años, el y su hermana melliza no podían dormir así que su madre le contaba un cuento de peter pan y se emocionaba ya que tenía casi lo que a él le gustaría ser solo que sin las desgracias que al pobre capitán le pasaban.
Su madre en ese momento lo vio bien pensativa así que desidio hablar con el:

Amelia: Hijo cariño te encuentras bien?- pregunto preocupada por la actitud de su pequeño.

A: ah, si, si mami- dijo un poco desorientado.

Amelia: No te creo, andas bien pensativo, que ocurre?- dijo dudosa.

A: No, no es nada- le mintió ya que le daba pena contarle sobre que el quería ser el mejor capitán de todos, así como su amado padre.

Amelia: Mi cielo, sabes que puedes contar conmigo para cualquier cosa, eso incluso decirme sobre tus asuntos?- dijo cariñosa, eso le dio confianza al pequeño rubio de contarle sus asuntos y desde ese momento le empezó a apoyar para que su gatito (así le llamaba ella a el, primero sus fáciles de curioso, jugueton y travieso).

Fin del flasblack

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Empezamos:

En otro lugar debajo del mar

Se encontraba cierta azabache viendo la naturaleza que se le rodeaba, ella siempre a deseado ver el mundo exterior (mundo humano) pero no la dejaban o por qué no se podía, le molestaba mucho que no pudiese conocer y experimentar aquel mundo que le gustaba pero que no veía, sabía algunas cosas por la biblioteca de los libros de los barcos desaparecidos.

Algunos se preguntaran comi es que una sirena, al cual no sabe nada de los humanos, pues es cierto, pero ella había descubierto aquella biblioteca, hace ya más de 5 años.

Al principio le pareció raro, el cual tantas cosas que desconocía, pero a pesar de todo ella fue aprendiendo lo esencial, el barco en el cual constaba de una gran biblioteca con un montón de libros ya muy antiguos ya algunos dañados con las páginas todas descoloridas y esas fracciones de un libro mojado, pero con muy buena cálidad, ya que estos estaban en bun estado a pesar de que estuvieran en el agua. Ya algunos libros se habían dañado,por el paso del tiempo, ya que se mira por su aspecto que ya se llevan bastantes años unsidos en el mar.

Nuestra azabache no sólo pasaba en la biblioteca sino que también había ido a ver y supervisar todo el barco en todo su interior, era grande y ella se imagina de el cuando estaba a la flota es decir bueno, no es que se diga que está mal, pero cuando estaba arriba flotando, se a imaginado que había sido hermoso y más verlo y estar ahí en el, admirando su belleza.

No era por alusinar ni nada, pero le hubiese encantado haber nacido siendo una humana y lo único que tenía de la superficie era aquel barco.

Titanic, ese era el nombre del lugar en donde a ella le encantaba ir, sabiendo que era aquel barco, donde la podrian descubrir en cualquier momento,pero aun así le gustaba estar ahí.

Había escuchado anteriormente ese nombre pero eso era cuando estaba con Tikkie, ella era su mejor amiga, que aunque pareciera una total gruñona, sabía que era muy buena contando historias a la cual a ella le encantaba escucharlas por que todas las cual decía la mayoría eran ha cerca del mundo humano, la superficie.

Ella sentía que necesitaba ir, por alguna razón en su interior, decía ve, ve y conoce que vas a encontrar algo maravilloso, siempre se ponía a pensar que eso estaba mal y que tenía que dejar de pensar en eso.

Decidió despejar su mente un poco y fue a buscar a sus amigos para hablar y sobretodo, sacar esos pensamientos. A lo lejos se miraba una sirena de cola rosada que estaba nadando divertidamente, hasta que se tropezo con unos arbustos y escuchó a alguien riéndose un poco bajo pero era audible, en eso mira y se da cuenta que es su amigo Mateo, después de levantarse se puso a hablar con el:

M: de que te ries- dijo molesta.

Mateo: por que te tropezarse, siempre vos de distraída, nunca, ni por el pasar del tiempo cambias.

M: ja ja, que gracioso - dijo sarcastica.

Mateo: jajajaja te hubieras visto, fue tan gracioso jajajaja- no paraba de reírse, en eso siente que le tiran algo y ve que fue mari, que tenía cara(-.-).

Mateo: auch, pensé que te agradaba, por lo que paso- se quejo por el golpe que le dio con la rama que le tiró.

M: te lo mereces, por burlarte de mi, aprende a saber cuando hay sarcasmo - en eso cambia su cara a una triunfadora.

Mateo: oye lo siento, pero es que te mirabas super chistosa- se empezó a reír.

En eso mari empezó a hacer un adorable puchero, en este se notaba que estaba un poco molesta por lo sucedido.

Mateo: que adorable, hoy veo que estas super alocada- con confusión.

M: de que hablas- confundida.

Mateo: de que primero estabas molesta y ahora te miras adorable.

M: yo simpre me miró adorable- con superioridad.

Mateo: bueno cambiando de tema, a donde ibas tan emocionada.

M: Bueno iba a ir a haber a los chicos, hace mucho que no los veo.

Es cierto ella casi no los iba a ver por pasar metida en la biblioteca de aquel barco gigantesco que le llamaba tanto la atención por la belleza de aquel o aquella a la cual era exquisito por la importancia valiosa que aportaba en información de lo prohibido por así desirlo.

Mateo sólo la quedaba viendo, con cara de curiosidad por aquellos actos que hacía aquella joven sirenita.

De un momento a otro estos dos salieron de su transe de pensamiento y fueron rumbo a casa de su amiga roselin, aunque le dicen rose, el nombre según su madre se lo puso por las palabras rosas y linda (rosa linda, pero sin sonar mal).

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