Más allá de los ecos

Capítulo catorce.

Iba caminando a mi casa era alrededor de media noche. Estuve todo el día en el centro de atención de "Muerte profunda" así se llamaba el lugar dónde en una pequeña parte, podías encontrar a un forense, a un doctor, a un policía. Pues a eso se dedicaban, a tratar la muerte. Enseñé mis cartas a los oficiales, al principio no me creían hasta que vieron la carta de Iris, la carta que me destruyó por completo.

La puerta de mi casa se abrió, al estar del otro lado de la calle, en la acera, era Richard.

— ¡Hey Kaley! —Alzó la mano para saludarme con ésta.

Me alegré de tenerlo en casa, pero temía que tuviese malas noticias. Bajé la cabeza y comencé a pensar en qué momento mi vida había cambiado tanto, fue cuando por primera vez fui a un bar.

Fue en el momento en que George me engañó, me había dicho que una noche se había metido con una mujer a la cual embarazó, mi mejor amiga me había dicho que fuésemos a un bar a olvidar todo, ya que no era el único hombre, pero era al que yo quería y amaba con todas mis fuerzas. Ahí fue donde Tres me vio y se enamoró perdidamente, o al menos eso dice.

Sentí una mano tomar brutalmente mi brazo, intenté gritar, pero me había puesto un pañuelo en la nariz.

— ¡Kaley! —Fue lo último que escuché, para después caer en un sueño profundo.