I live for you, Olivia ; harry.

«14»

El agua me cubría hasta la rodilla,  era fría como el viento y el aire tan fuerte como las armas, había fuego, había sangre y cuerpos sin vida, entonces estaba yo observando como el barco se alejaba cada vez más de mí, ella se iba a un lugar seguro mientras las bombas explotaban en mi espalda.

− ¿Por qué no los detuviste? –alguien me pregunta mientras sacude mi cuerpo con mucha fuerza, pero yo no dejo de mirar como mi Olivia se marcha − ¡Maldición, Edward! –me suelta y doy pasos torpes hacia la derecha recuperando la postura –Esos malditos se escaparon –su voz se apaga cuando se aleja de mí.

Escucho disparos y algunos gritos, detrás de mi están matando a unos judíos pero estoy completamente negado a girar, en todos los encuentros que tenemos con ellos debemos de matarlos o llevarlos hacia una fábrica para que hagan cosas para nosotros, siempre escojo llevar a las personas a fábrica, soy incapaz de observarlos morir frente a mi mientras suplican porque los dejen con vida.

−Sargento –alguien se para a mi lado.

−Dime –hablo en voz baja, el barco se ve tan pequeño desde aquí.

−El comandante ordeno que nuestra tripulación se quedara aquí por si algún otro barco regresa.

−Bien, nos quedaremos –jamás giro a mirarlo.

El día transcurre y mi gente está en esta playa cumpliendo las órdenes que vienen de arriba. Estamos sentados en la arena mientras fumamos algunos puros y tabacos, otros incluso sacan el juego de cartas, unos pocos están en silencio acariciando la arena y solo yo miro el delgado collar dorado que sostengo con mi mano derecha.

− ¿Es de su esposa, sargento? –un soldado que es tan joven como yo pregunta mientras mira el collar.

−Sí, es de ella –le respondo serio.

−Pensé que usted estaba solo, luce muy joven –giro a mirarlo –Sé que no es de mi incumbencia y yo respeto su autoridad y privacidad, pero por su aspecto creí que no tenía a nadie.

−Siempre la tuve a ella –él enciende un cigarrillo –Pero la saque del país, no es seguro aquí.

−Yo también saque a mi madre de aquí, daría mi vida por protegerla –comienza a confesar –Pero tengo miedo de no volverla a ver –giro a mirarlo, su rostro se muestra tenso y sus ojos asustados –Nadie saldrá vivo, sargento, lo sé.

−No puedo darme el lujo de morir aquí, soldado –él ríe bajamente –Tengo que regresar con ella, se lo prometí –guardo el collar en el bolso oculto de mi saco –"Voy a vivir por ti, Olivia", pensé justamente cuando se marchó.

− ¿Cree entonces que salgamos de aquí? –sus ojos llenos de esperanzas y recuerdos me observaban esperando la respuesta correcta.

−Claro que sí, saldremos de esta –palmee su espalda.

El cincuenta y dos por ciento de los soldados alemanes no querían matar, no querían la guerra pero tenían que ser parte de ella porque entonces el cuarenta y ocho por ciento los acusaría con Hitler y nos matarían antes de poder explicar algo.

El sol casi se estaba escondiendo y la luna asomándose, cuando tuvimos que ponernos de pie y comenzar a correr mientras disparábamos ciegamente. Los franceses habían llegado a la costa y no estaba planeado sino hasta dentro de dos días más. Ellos explotaron nuestras camionetas y la mitad de mi equipo logro derrumbar a solo un cuarto de la gente que ellos tenían. Eran muchos más que nosotros pero en este punto no podíamos pedir tregua, ellos ya habían matado a personas de mi cargo y nosotros a personas de la suya.

Había gritos en donde se daban órdenes, había cuerpos tirados y un fuego infernal que consumía nuestros medios de transporte. Corrí hacia las piedras cuando vi al soldado que pregunto por mi Olivia, estaba desangrándose con el arma en su pecho.

− ¡Soldado, resiste, voy a sacarte de aquí!

−Señor –balbuceaba mientras la sangre salía por su boca –Dele esto a mi madre –saco una hoja de papel arrugado y manchado de rojo –Cuídela por mí –sus manos estaban en mi pecho tratando de ponerse de pie pero él ya estaba casi muerto –Se lo suplico.

−Yo me haré cargo de ella, no mueras con esa preocupación –las lágrimas salían de sus ojos aterrados –Jamás permitiré que le hagan daño –balbuceaba mientras moría en mis brazos.

− ¡Sargento! –gritaron a mi lado izquierdo, un soldado con dos armas en cada mano y el rostro manchado estaba de pie gritando − ¡Están acabándonos!

No pude pensarlo dos veces porque no estaba permitido, deje el cuerpo caído y me levante tomando mi arma y la que él tenía en su pecho. Corrí hacia ahí y era una lucha limpia, estábamos de frente disparándonos sin pudor.

Una bala se estrelló en mi brazo izquierdo pero aun podía sostener mi arma, otra se coló en mi muslo pero aun cojeando pude matar a dos.

− ¡Cúbranlo! –un soldado ordeno al verme herido.

Pero cuando mis hombres se dieron cuenta de que su sargento estaba herido ya era muy tarde, dos balas habían atravesado mi pecho, las rodillas se me doblaron y caí al suelo, no podía respirar porque tenía sangre subiendo por mi garganta.

Alguien tomo mi rostro y me gritaba que aguantara un poco más, pero entonces alguien le disparo justo en la cabeza y él cayó al instante dejando mi cuerpo rebotar en el suelo.

A punto de morir veía imágenes vagas pasar mi mente, veranos corriendo, comida robada y rodillas raspadas, cortes de cabello hechos por Olivia y sus manos, el calor que emanaba su cuerpo y el sabor de sus labios secos. Cuando mamá la corrió de la casa por tirar el plato de comida y cuando escapamos por la noche a jugar, cuando estábamos en el lago y...

Sentí mi cuerpo caer sin detenerse, mis ojos se cerraban y todo era cada vez negro, mi mano soltó el arma y el pecho me ardía, decidí entonces cerrar mis ojos para que el dolor se fuera. Pude sentir antes de morir la tristeza de no haber cumplido mi promesa, no pude vivir tanto por mi Olivia.

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Nota: Lo siento mucho, pido disculpas porque ya sé que nadie quiere ver a Harry morir dos veces (aunque aún no sabemos si exactamente muere en la película), pero así es la historia. Espero que les haya gustado, sé que es corta pero no quería algo largo porque entonces perdería la inspiración y al final acabaría siendo otra cosa. Este es el último capítulo de la historia pero aún falta el epilogo, ese no estoy muy segura de subirlo hoy o mañana, veré que sale porque tengo que salir hacer unas compras. Ya sin mucho más rollo me despido, gracias por leer y votar, las quiero mucho. xox

Posdata: Deje un gif en multimedia de Edward cuando los franceses llegaron (no me odien), también es sacado del trailer de Dunkirk.