— ¡Hola Ryu-chan!— sonreía. —Buenos días...
El joven que llegaba corriendo se tomó unos momentos para recuperar el aliento antes de contestar. Cuando estuvo mejor se paró derecho y la miró expectante, ella continuaba sonriéndole como si fuera la mejor noticia del día y no pudo evitar ruborizarse un poco, intentó disimularlo como si hubiese sido ocasionado por el trote hacia allí.
—Buenos días Temari, ¿Cómo te encuentras hoy?
—Muy bien a decir verdad, lo de ayer solo fue un susto...
—Menos mal... me había preocupado...
— ¿Qué vamos a hacer hoy?— ella se le acercó con su lindo kimono rosado y su corazón comenzó a latir desbocado.
Aún no se acostumbraba a las sensaciones que le producía Temari, todo era demasiado nuevo y percatarse de sus sentimientos recientemente no ayudaba a asimilarlo con más rapidez, solo lo ponía más nervioso. ¿Pero como no hacerlo? Era hermosa. Su cabello negro largo lucía sedoso, se notaba que la habían creado pensando en cada detalle. Se preguntó si su maestro la veía como a una hija o a una amante, no parecía que la hubiesen ideado con un sentimiento fraternal, pero le molestaba pensar que hubiesen tenido intensiones oscuras hacia ella.
—Si no te molesta... me gustaría que continuáramos con la conversación que tuvimos ayer...— contestó Ryu dubitativo. Ella se puso a la defensiva en un instante, lo supo por la expresión que tenía en el rostro.
—Mmm... bueno.... está bien...
—No te gusta mucho hablar del señor Ichiro ¿No Temari?
—Pues... es que siento que lo traiciono, suena a que todo era malo cuando estábamos juntos— la frase no le había gustado a Ryu, sus sentimientos... ¿Acaso no eran correspondidos?
—Él te liberó ¿O no? Ya no eres su ánima, eres libre... puedes hacer lo que tú quieras sin pensar en él ¿Qué dices?— le tendió la mano para que la tomara, ella lo hizo. —Vamos, cuéntame.
—Él me creó a imagen de una persona...— la noticia no le sentó bien a Ryu, de hecho se quedó estático. ¿Temari no era un ánima hecha al azar? Tenía entendido que era muy difícil lograr crear un ánima que se mostrara con una forma específica, por no decir imposible.
—Déjame adivinar, esa persona... Había muerto.
—Sí...— ¿Por qué las personas no podían dejar ir a sus seres queridos? Comprendía que era algo muy doloroso de llevar pero no era motivo para traer un ser al mundo que nada tenía que ver con eso.
—Continúa.
—Y bueno, en un principio me dijo que yo sería un reemplazo perfecto para aquella mujer, me dio su mismo nombre y me enseñó a vivir como una humana, me explicaba cómo había sido la antigua Temari... El problema era mi falta de...
—Un cuerpo...
—Sí, él iba a darme uno... Pero, no salió bien... Quiero decir, ¿Por qué pensé lo contrario? Yo no era ella... Pero el señor Ichiro se veía tan feliz cada vez que la nombraba que yo...
—Entiendo, es muy normal que hayas pensado así— le explicó el muchacho. —Entre maestro y ánima hay una conexión muy importante... Ahora ya no debes sentirte así ¿Cierto?
—No, ahora es distinto... Él solo es... Mi creador...— Ryu apretó un poco más su mano. —Gracias por escucharme Ryu-chan.
—Oye, "Ryu-chan" suena muy infantil, no soy tan pequeño... Tengo casi dieciséis años Temari, soy más alto que tú.
ESTÁS LEYENDO
Is Our Beginning
FanfictionSecuela de Is Our Destiny. Tiempo después de la batalla sucedida la paz retorna a la ciudad de Tomoeda, sin embargo esto no es duradero, las presiones del concejo de ancianos y los nuevos enemigos amenazan la afianzada relación de Sakura y Shaoran...