Capítulo 7

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Narra Bon:

Ayayayay.

– ¡Bonnie, puedo oírte caminando ahí dentro! ¡Ábrenos!

– ¡Foxy, se más cortes!

– Cl-claro, Chica... ¡¿Y tú qué me ves, niño rico?!

– Nada, sólo que tu rostro está completamente rojo, así como tú feo cabello.

– Eh, Golden, deja en paz a Foxy que después terminas mal...

– Freddy, ¿en serio? Bueno, mejor no me rebajo al nivel de este cabello de menstruación...

– ¡Golden!

– Lo siento, Chica...

Mientras ellos hablaban, yo ya estaba en tocando la puerta de la habitación de Bonnie.

– ¡Bonnie! ¡¿Te demoras?! ¡Ya llegaron! –dije preso de los nervios–.

– Un minuto... –dijo algo forzado–.

¿Estaba haciendo fuerza? Qué raro. En fin, debía esperar... Aparte, no es como si los amigos de Bonnie fuesen a entrar y me fuesen a ver...

– ¡Pero mira nada más como dejas la puerta abierta toda la tarde! Ay Bonnie, no sé cómo no te han robado aún...

Me quedé paralizado.

Mierda.

¡¿En serio, Bonnie?! ¡¿La puerta abierta?! ¡Este chico es muy confiado!

– Diles que ya bajo –dijo él–. Oh... Cierto, que no deben saber que estás aquí.

– Exacto –susurré–.

¡¿Por qué tarda tanto?!

– ¡Bonnie! ¿Para esto nos llamas? ¡Ya ven! –oí sus pasos en las escaleras–.

Santos aguacates...

Corrí por todo el pasillo sin saber que hacer hasta que vi la puerta de la habitación de los padres de Bonnie, él dijo que no entré pero ya que.

No creo que guarden cadáveres o...

Oh demonios.

Narra Foxy:

Empezamos a oír unas carcajadas que parecían de foca con retraso, definitivamente no era Bonnie el que se reía. Todos nos miramos un poco alarmados. ¿Acaso esta casa no es la de Bonnie y estamos en la típica casa abandonada en donde murió una familia entera y el asesino tuvo un fatal pasado y busca sangre?

– ¡Vámonos alv wey! –grité mientras corría por las escaleras–.

– ¡Foxy! –chillaron todos–.

¿Me creen héroe de película para salvar sus traseros? Domamen.

Ya estando en la puerta principal, pude sentir unas manos en mi espalda. Azopotamadre pero que bajito ah sido el demonio asesino.

– ¡F-Foxy! ¡Para! –dijo Golden sin poder respirar–.

– ¡¿Qué pare?! ¡Ay no, no sé! ¡Se mueren ustedes que yo puedo vivir sin sus molestas presencias! Excepto la tuya, Chica –dije abriendo la puerta–.

– ¡Foxy!

Dejé de oírle porque le cerré la puerta en la cara. Ya podía ver el futuro, en primera plana: "Se encuentran tres adolescentes muertos en casa embrujada".

Chica, Golden y Freddy.

Ajá, muertos.

Fueron buenas personas... Excepto Golden, ese no.

Buscando marido |BxB| |FxF|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora