Capítulo 14

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Valeria

Llegamos a mi casa después de una muy larga e incómoda caminata. Después de esto juro que matare a Adam, solo a él se le ocurre, no sé si lo hizo con la intención de molestarme, o de verdad este hombre tiene mala memoria.

Voy dispuesta a entrar a mi casa, por la puerta trasera, pero Adam me toma de la mano para detenerme.

—¿No te piensas despedir? —pregunta como si nada. Como si lo que hizo fuera algo sin importancia para mí.

Antes de que pueda contestarle, su teléfono suena. Él contesta.

—¿Qué pasa?- contesta con tono preocupado—. ¿En serio? Está bien, voy para allá —contesta rápidamente, pasa después darme un beso rápido en la mejilla, darle la mano a la maestro y gritar adiós mientras corre en dirección a casa de su novia.

Genial, mi fin de semana, es estupendo. Me quedo de allí, parada mirando hacia el piso, y ella me observa. Esto es súper incómodo. No sé qué hacer. Ella decide rompe el silencio.

—Al parecer el que me iba a enseñar el departamento tuvo una emergencia —dice como si nada, como si nada hubiese pasado, no sé qué quiere lograr con ello, lo único que hace es ponerme nerviosa. No pienso dejar que me haga sentir de esta manera.

—Si, tal parece que su novia está ansiosa por ser penetrada por él —contesto con indiferencia—, siempre inventa excusas sin sentido para que él llegue más rápido, y no tengo idea de que excusa puso esta vez, pero en cuanto la sepa, se lo comunico —digo secamente—. Así que si me permite quiero dormir en la comodidad de mi cama, ya que como puede ver tuve una fiesta anoche, y no ando para nada presentable en estos momentos. Si quiere ver el departamento es el que esta después de esa casa- digo señalando la casa color naranja con amarillo de la Señora Díaz-. El dueño vive en la casa cruzando la calle, y todo el tiempo está allí, así que no creo que tenga problema en que le muestre el departamento en este momento —finalizo para después empezar a caminar hacia la parte trasera de mi casa.

Magdalena

Nunca la había visto comportarse de esa manera. Yo solo trato de enmendar las cosas de la mejor manera, pero ella al parecer no quiere eso. Aun así no me daré por vencida, si tengo que llegar a utilizar el chantaje lo hare.

—¡Espera! —le grito para llamar su atención, ella voltea haciendo un gruñido.

Antes de que pueda continuar, un carro se estaciona en frente de la casa, y una señora bastante joven baja de el con una bolsas del supermercado, cuando está incorporada por completo no tarda en hacerme preguntas.

—Disculpe, ¿se le ofrece algo? —cuestiona manteniendo una distancia como de un metro y medio, como si yo fuese peligrosa.

—No... Bueno, sí. Déjeme presentarme, soy maestra de su hija, mi nombre es Magdalena —digo amenamente extendiéndole la mano, ella gustosa la toma—. Supongo que debe ser la madre de Valeria —continuó mirando desafiante a Valeria, quien me mira con odio.

—Sí, soy su madre —contesta mientras voltea hacia donde esta Valeria—; donde están tus modales señorita, pensabas acaso dejar a tu profesora aquí afuera —la regaña mientras camina hacia ella—.Discúlpela al parecer la fiesta estuvo muy buena ayer, y supongo que llego tarde a casa de Adam a dormir, por ello anda de mal humor —continua mientras observa el aspecto de su hija—, pero adelante, hablemos en lo que Valeria se pone presentable.

Esto se pone interesante. Al final de todo conseguiré muchas cosas de Valeria su consigo una amistad con su madre.

Valeria

La cosa no puede ir peor, pensé que me libraría de ella fácilmente, ya que pensaba dejarla allí afuera, me importaba una mierda en ese momento si decidía chantajearme con reprobarme en su asignaturas que imparte, lo único que quería evitar era tener más contacto con ella, que todo se redujera a como era al principio, una simple maestra que me da clases.

Aunque puedo entrar dramáticamente a la sala donde se encuentra ahora conversando amenamente con mi madre, y decir todo lo que paso solo en esta semana, pero no quiero que ella pierda su trabajo, conociendo a mi madre, es capaz de hacer de todo para que la corran por el simple hecho de que me beso, y trato de no exagerar.

Puedo fingir que me siento mal, así no me veré en la necesidad de bajar de nuevo y no tener que acompañarla a ver el apartamento, si es que esas son sus intenciones. Esa es una buena idea, aunque mi mamá tal vez se ofrezca a llevarla y no se cuales sean sus intenciones con mi madre; estoy exagerando demasiado.

Dejo a un lado todos mis pensamientos para meterme a ducha, no sin antes poner música. Twenty One Pilots siempre es la mejor opción para distraerme.

No no no no no no
Yeah yeah yeah yeah yeah yeah

The loser hides behind
A mask of my disguise
And who I am today
Is worse than other times
You don't know what I've done
I'm wanted and on the run
I'm wanted and on the run
So I'm taking this moment to live in the future

Apenas y abro la regadera, alguien toca la puerta. Por esta razón le dije a mi madre que cada cuarto tuviese su baño propio, para que nadie interrumpiera. Pero veamos que quiere mi madre.

Salgo media mojada de la ducha.

—Mamá acabo de entrar, no puedo tomar una ducha tranqui... —abro la puerta del baño para encontrarme con la maestra del otro lado, me cubro rápidamente con las manos, para después cerrar la puerta y cubrirme con la toalla.

I'm a lesbianDonde viven las historias. Descúbrelo ahora