Entre la guerra y el amor [Cancelada]

/•Cap.16•/

Pov Silver

Cada segundo que pasaba, Blaze perdía más y más sangre, no podía creer como una pequeña niña como Rosy pudiera hacer tanto daño.

Pero ahora, solo una cosa había en mi cabeza "habia que salir de aquí", no importa lo que cueste. Sabia que si no escapaba me matarían.

Si tan solo fuera un roedor seria fácil escapar de la celda en la que me encontraba, seria fácil si fuera un roedor.

Lo deseaba tanto para lograr escapar. Lentamente cerré mis ojos, una vez haberlos abierto, todo era aún más grande que yo. No entendía que pasaba hasta que vi mis manos, sorprendiéndome al ver unas pequeñas garritas blancas.

"Corrí" como pude donde un trozo de vidrio, logrando ver mi reflejo..... ¡Era un ratón!..... No entendía como paso esto o como regresaría a mi forma normal. Lo único que sabia es que debía buscar ayuda.

Salí de mi prisión por las barras, corriendo de esquina en esquina para evitar que me vieran. Corrí como nunca antes, con algo de dificultad debido a que ahora corría en 4 patas, algo muy raro.

Mis ojos se posaron en la puerta semi abierta de la sala, logrando escabullirme por esta, logrando mi escape de la sala.

Corrí rápidamente por los pasillos con algo de desesperación al saber que si tardaba mucho podrían matar a Sonic si descubrían que no estaba. Corrí con todas mis fuerzas, no pensaba detenerme, pero una extraña sensación y un gran poder maligno me hizo detenerme de golpe.

"Creo que lo que quieres es que te mate, ¿No?"

Escuché en mi mente, ¿Era telepatía?, no lo sabía.

De pronto, una de las puertas del pasillo salió disparada de golpe. De ésta salió aquel erizo idéntico a mí, provocando que volviera de golpe a mi forma normal. Lo más extraño en él era que estaba pálido, lleno de sangre y heridas.

- Estas herido. - le dije con cierto miedo de que me atacará -.

- Eres un maldito.... V..oy a.... Matar...te, te haré pagar.... Por lo... Que me... Hiciste. - gruño con dificultad acercándose a mi lentamente para "atacarme" -.

¿Eh?, ¿De qué habla?, apenas lo he visto dos veces, ¿Por qué me esta culpando?

Se acercó a mí, usando todas sus fuerzas, lentamente a cada paso perdiendo más y más sangre hasta que se desplomó en mis brazos.

Dios, hasta a sus compañeros los tienen en estas condiciones. No pude evitar quitarme el chaleco que llevaba para envolverlo en este, cargándolo en mi espalda.

- Debemos salir de aquí. - susurré a mi mismo intentando buscar una salida hasta que encontré una ventana. - Eso es. - chillé aliviado elevándome a mi mismo y al erizo en mi espalda logrando salir por la ventana. - Pues tienen una seguridad muy mala. - dije en mis adentros hasta que divise a una hiena de estatura pequeña con un hacha la cual goteaba, lentamente, un espeso color carmesí de esta debido que, en la punta, ya hacia una cabeza de un pequeño borrego a lo que me asuste tanto que caí de golpe al suelo.

- ¿Heee...?~ ¿Quién está ahí?. - canturreo de forma siniestra mostrando una sonrisa de lado a lado olfateando cada lugar -.

¿Por qué nos busca?, caí de golpe al suelo a plena vista, ¿Acaso no me ve?, ¿Pero cómo?

La tensión y el miedo se apoderó de mí, provocando que mi cuerpo no se moviera en absoluto, orando porque no me encontrará.

La hiena se acercó lentamente a mí y al erizo, yo solo apretaba con fuerza los puños, no quería pelear, no es lo mío, no quería lastimar al niño. El miedo aumentó en mi al sentir como respiraba sobre mí. La tensión era mucha, no me creía capaz de salir de esta, hasta que de la nada, dejo de olfatearme mirando hacia mi lleno de confusión, corriendo a la entrada del laboratorio.