La leyenda del licantropiro

Mas poder del que me imagine

Luego del pequeño sermón de mi madre me marche a mi cuarto donde me esperaba mi precioso Wii, me puse a jugar The Legend Of Zelda Twilight Prinsess mientras pasaba la tarde... Era martes y eso significa que tenia Karate en la tarde, mi madre fue de nuevo al trabajo y me quede otra vez sola con mis pensamientos. Recordé la inmensa tarea que nos habían dejado en la mañana y me puse a hacerla, pero no la hice como un humano normal lo haría, desde mi cama hice que el cuaderno saliera del bolso y lo coloque flotando en frente de mi, hice lo mismo con el lápiz y lo puse a escribir sin siquiera tocarlo. En poco tiempo ya tenia la tarea lista así que volví a concentrarme en mi juego ya avanzado mientras que Nala estaba acostada en mi regazo y comenzó a ronronear cuando pase con éxito el templo de hielo...Mas bien era una mansión pero el juego habló yyyy pues es un templo y no se diga más... La alarma de mi teléfono sonó,  lo revise y me di cuenta de que eran las 4:50, así que me aliste lo mas rápido que pude y en un segundo ya tenia mi Karategui puesto con mi preciado cinturón purpura en ese entonces. Me despedí de Nala, tome mis cosas y salí como una bala hacia el dojo, en poco tiempo ya estaba allí 4:55 para ser exactos. El sensei me estaba apenas abriendo y como siempre yo era la primera en llegar.

-Onegashimas sensei!!!-Exclame el saludo típico japones(significa: con su permiso y respeto)y este se sobresalto causándole una leve risa

-Os! Anastasia ya te a habías tardado, pensé que no ibas a venir-Dijo con alegría en la voz... Mi sensei se llamaba Alfredo, era una persona de lo mas agradable, era un poco mas alto que yo, moreno y musculoso, y con su característica barba en forma de candado.

-Cuando e faltado a clase?-Dije sarcástica.

-Nunca desde que te inscribiste.-Respondió con orgullo, según el, yo era su mejor alumna pero yo siempre le decía que no era así... Pero solo lo decía para no resaltar demasiado, aunque a la final siempre lo hacía.

Entramos al dojo los dos juntos y lo ayude a limpiarlo antes de que llegaran los alumnos... A mi me encantaba practicar Karate por que nunca me cansaba, o siempre lo hacia mas fuerte, o simplemente destacaba y por eso con tan corta edad era cinturón púrpura... Era casi la de mas alto grado a excepción de un cinturón marrón al que no soportaba llamado Carlos... Casi nunca asistía a clase y si lo hacia era para creerse superior que los demás,  por desgracia ese día vino.

-Hola sensei!!!-Casi grito pasando sin saludar como se debía.

-Que te e dicho sobre saludar así-Dijo el sensei furico.

-Bah!! Que mas da, ya entre- Dijo y se fue directo a sentarse en uno de los bancos del dojo... Aaash como lo odiaba!!!! Era el típico alumno que solo aparece cuando hay un examen o una competencia cerca. No tenia respeto por nadie, NI SIQUIERA EL SENSEI!!!!!

-Y tu que miras púrpura?-Me dijo escupiendo las palabras con desprecio.... "A NO! con mi cinturón no te metas" pensé y lo fulmine con la mirada provocando que a este le diera un fuerte dolor de cabeza repentino... Este se revolcaba de dolor en el asiento y yo sonreí macabramente.

-Anastasia!-Me llamó el sensei, yo voltee hacia el y Carlos dejo de retorcerse.

-Os!- Exclame y me acerqué a el (os! es entendido en japones XD solo explicaba .-.) Me asignaron un cinturón blanco para que le enseñara cosas básicas.

El resto de la clase me la pase enseñándole un montón de cosas a aquel niño mientras que Carlos solo se sentaba allí a hacer NADA!... Termino la clase y todos se retiraron menos Carlos el sensei y yo que estábamos terminando de cerrar el Dojo.

-Hasta luego sensei!- Exclamo Carlos sin preocupaciones... Yo le deje un regalito, lo volví a fulminar y empezó a caminar con dificultad por el terrible dolor en todo su cuerpo.

-No lo soporto-Susurré y empecé a caminar con el sensei 6:20 eran exactamente.

-No te estreses por algo que no vale la pena... El no fue y no sera nunca como tu -Dijo mi sabio sensei y luego me guiño un ojo y yo le sonreí.

Caminamos hasta donde el tomaba su taxi para ir a su casa. Luego de que se fuera eche a correr lo mas rápido que pude y llegue a mi casa pero no vi el cámaro amarillo de mi madre... Saque mis llaves y entre a la casa... Subí a mi cuarto y me desvestí para meterme a la ducha y quitarme los estreses del día... El primer día de clase, los maestros, Rafaella, el maldito timbre, William, el karate, William, el estúpido de Carlos, William.... William!!?? Desde cuando acá yo me pongo a pensar tanto en alguien? Por que no me lo podía sacar de la mente?... Termine la media hora duchándome con un suspiro, salí del baño y rápidamente me coloque un suéter gigante de esos que son suavesitos y me acosté en mi cama con el teléfono ya en la mano... Desbloquee el iphone y busque mis contactos... Que haría para conseguir el numero de William?? Fácil! Cerré mis ojos y me concentre en su rostro, su olor, sus pensamientos y sus ojos, sus preciosos ojos color cielo... Y rápidamente lo encontré, el estaba en su casa, que no estaba muy lejos de la mía, justamente en la misma posición que yo con el teléfono en la mano, AJA!!! Lo conseguí! abrí mis ojos y teclee las cifras de su numero telefónico y lo guarde en mis contactos.... "Escribe le" me dijo mi conciencia, no podía resistirme a la tentación de escribirle,  así que lo hice.

Hola... Soy Anastasia ¿Recuerdas? La que te calló encima esta mañanaXD" Lo envíe y espere la respuesta.

Hola!!! como conseguiste mi numero? No es que me moleste... Es que no recuerdo Habértelo dado 

MI.ER.DA...Rápidamente cerré mis ojos y volví a concentrarme en el... Todavía estaba acostado en su cama esperando mi respuesta... Para salvar mi pellejo me adentre en su memoria y coloque un momento extra en nuestro encuentro, era falso obviamente, pero tenia que hacerlo real.

Claro que me lo diste tontito! Antes de que sonara el timbre" Lo envíe y rogué por que funcionara.

Si, si ya lo recuerdo... Yyyy te veré mañana en el árbol? O POL DIOH!! había funcionado! Al parecer tenia mas poder del que me imaginaba.

Emmm si... Supongo que si

Excelente ;3 nos vemos mañana

Ok... Hasta mañana William" Termine de teclear y deje mi cell en la mesa de noche.

El cámaro de mi madre entro y se estaciono en el porche, 7:00!!!!!! Baje hasta la puerta y la abrí mentalmente mientras estaba parada en la sala con los brazos cruzados,  ella entro.

-Que?- Dijo haciendo una mueca.

-Donde estabas? se supone que llegas antes que yo llegue del karate-Le dije seria.

-Uy! pareces tu la madre en vez de la hija! Estaba haciendo horas extra en la universidad.-Alce una ceja y me limite a asentir.-Tienes hambre? Traje algunos dulces.-En ese momento sentí como se me iluminaba la mirada, si avía algo que me gustara mas que molestar a la gente con mis poderes eran los dulces.

-Que trajiste? -Dije casi babeando, abrí la bolsa y me conseguí con... DONAS!!!!! DE CHOCOLATE!!!!-GRACIAS!!!

-Hey! tranquila allí, una es para ti y una para mi-Asentí sin dejar de ver la dona mas grande y antes de que pudiera decir nada la tome y corrí a mi cuarto- NO ENSUCIES NADA!!! -Me grito cuando ya estaba en la cama comiéndome la dona.

-Ah... Dulce manjar de los dioses!-Dije al llegar al relleno.. Miau!-Quieres? Bueno pero solo un poquito por que sino te hace mal- Nala salto en la cama y se sentó mirándome pacientemente, yo tome un poco de dona y le unte relleno y se lo di en la boca, la gatita abrió lo mas que pudo y se lo comió entero- Eh! que te manchaste todos los bigotes de chocolate!!!- Dije riéndome y esta se los limpio.

Luego de eso me recosté en la cama lista para dormir, con mi gatita encima de mi pecho haciéndome compañía y volví a recordar de nuevo todo lo que me había pasado y me quede dormida esperando que el día siguiente fuera mejor aun.

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HOOOLA HOLAAAA GENTEEEEEEE!!!!!!!

Les gusto el capítulo? espero que si... Estaba muy inspirada y estaba como loca escribiendo.

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