Capitulo 18: La chica perfecta

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¿Esto era ser mujer? Yo no me sentía muy distinta. Quizá un poco ahogada pero, eso era porque Frank me tenía acurrucada entre sus brazos. Me sentía incómoda, quería mi ropa.

Me escabullí de sus brazos y corrí hacia el baño. Me metí en la ducha y me quedé un buen rato ahí.

Cuando salí del baño Frank estaba estirado con los abiertos y con una tonta sonrisa en sus labios.

- Sophie – me habló con un tono tierno - ¿por qué te vestiste?

- Recordé que había quedado en juntarme hoy con las chicas…

- Buu…quédate mejor conmigo…

- No puedo – me senté al borde de la cama - ¿me vas a dejar? 

- Si me das un besito 

- Bueno

Me acerqué a él y lo besé.

- Otro más…

Le volví a dar otro beso. Estuve así por un par de minutos.

Frank se vistió y me llevó hasta el centro del pueblito. Luego se marchó sin antes decirme que lo llamara cuando quisiera regresar a casa. Sí, él estaba muy amable.

Me senté en una mesita a fuera del restaurante a esperar a las chicas.

- Hola – una voz femenina no conocida para mí me saludó. Alcé mi vista y era Jane, la novia – creo- de Gerard.

- Hola – la miré extrañada.

- ¿Eres la amiga de Angel?

- Sí 

- ¡Lo sabía! – ella se sentó frente a mí – Angel me dijo que hoy sería una reunión de chicas, que era buena idea que participara…¿eres amiga de Gerard?

- Am… sí

- ¿Estudias? - preguntó amablemente.

- Sí, Literatura...

- Interesante, yo estudié diseño gráfico...

- ah que genial....- me corrí un mechón de mi cabello y noté como ella abría sus ojos desmesuradamente.

- ¡Ta vas a casar! – chilló - ¡Qué lindo!

- Ah, sí – intenté sonreír. 

- Pero… ¿qué edad tienes? – me preguntó ya más seria.

- 21…los cumplí días antes de llegar acá…

- ¡¿21?! – me miró atónita - ¡Pero si eres una nena todavía!

- Hummm…y ¿qué edad tienes tú?

- 24.

Linda y madura. Creo que Gerard iba mejorando sus gustos.

- Eres la novia de Gerard ¿verdad? 

- Lo era – suspiró pesadamente.

- Oh, ¿por qué lo eras?

- Me pidió un tiempo…- ella sonrió con melancolía – no sé qué sucedió. Todo iba tan bien, nos veía en muchos meses juntos…pero, ese día que fue a la piscina llegó distinto… ¿tú fuiste?

- ¡No! ¡No! – grité. Oh, esperen, ella me preguntaba si yo había ido a la piscina – ósea sí, sí.

- Jajá – ella rió - ¿sabes si pasó algo?

- No – mentí.

- Luego de ese día, Gerard cambió…lo veía pensativo, distante, inclusive me esquivaba…creo que le gusta otra chica…

- ¿sabes quién podría ser?

- No…

- Ojalá sea lo que sea, vuelva conmigo…- ella sonrió esperanzada – es tonto pero creo que me he enamorado…

No, no es tonto. Gerard tiene esa maldita capacidad de hacer que las chicas se enamoren de él con mucha facilidad.

Ya ven, la loca de mi prima…

- Las chicas se han tardado – dije para cambiar el tema.

- Sí, que raro.

- No, no lo es…- me reí – Angel debe estar esperando a que Rachel termine su sesión de maquillaje y Angela…bueno no la conozco mucho.

- Angela es la mejor amiga de Gerard, bueno él nunca ha dicho que lo sea pero eso parece…él siempre está cuidando a la hermanita de Angela…

- Sí, a la pequeñita esa.

- ¡Gerard es tan perfecto! – se quejó – ¿has visto sus dibujos? Ahora, está trabajando en la portada de un libro y le está quedando fantástica…

- ¿Portada de un libro?

- Sí, no sé de que es el libro pero de sólo ver la portada me dan ganas de leerlo…

- ¿qué te dan ganas de leer? – mi amiga Angel interrumpió nuestra conversación.

- El libro al que Gerard le hace la portada…

- Genial, Hola linda – Angel se acercó y besó mi mejilla.

- Hola, ¿y Rachel? – pregunté.

- ¡Aww! ¡Adivina!

- ¿qué?

- ¡Mikey le llevó un enorme ramo de rosas y se abrazaron así muy tiernamente! 

- Sabía que no durarían mucho separados…- sonreí ante la idea – que bueno que estén juntos de nuevo.

- ¿Dónde tendrán sexo de reconciliación? – Angel preguntó y con Jane la miramos sorprendidas – digo, en la pensión no se puede cuando tu mamá está y en casa de Mikey estará Gerard ¿no?

- Podría ir a entretener a Gerard jajá – comentó Jane y supongo que mi cara no fue muy amigable.

Angel y Jane comenzaron a hablar entre ellas. Yo poco a poco me fui distanciando de su conversación. Ojalá Rachel hubiera venido pero, claro, había un motivo mucho más importante por el cual ella no se encontraba aquí.

Al rato llegó Angela. 

- ¿Cuándo será la boda? – preguntó Jane al tiempo en que terminábamos de ordenar algo de comer.

- Eh…- la miré dudosa – no lo sé – me encogí de hombros.

- ¿cómo no sabes? ¡Yo estaría toda loca por poner luego la fecha!

- Eso es porque Sophie está indecisa…- comentó Angela y la miré con la boca abierta ¿cómo podía ser tan tonta?

- ¡¿Estás indecisa?! – Jane me miró atónita.

- Eh…- ¿qué se suponía que debía decir?

- Claro que está indecisa, por el vestido – Angela me sonrió – digámoslo así Sophie tiene dos opciones de vestidos: Uno es un Vera Wang, el vestido ideal para una novia, el perfecto, el que toda chica sueña y que, de hecho, más novias quieren pero…¡Sólo le queda a ella! 

- ¿y el otro? – Jane la miraba atenta.

- Es un vestido de algún diseñador muy desconocido, pero muy lujoso, también debe ser del agrado de muchas pero…no es el vestido perfecto…

- ¡Debes escoger el Vera Wang! – me alentó Jane. Pobrecita, si supiera de lo que Angela habla.

- Tal vez sea buena idea dejárselo a otra una que realmente sea vea bien con ese vestido y lo meresca…

- Claro, Sophie – Angela me miró feo y luego bebió un poco de jugo.

El resto de la tarde nos la pasamos conversando de distintas cosas.

Aunque me cueste admitirlo Jane es una muy buena chica, podría hasta decir que es la chica perfecta para Gerard.

Me hubiera gustado ser yo…pero…hay heridas que nunca me permitiré cerrar…

Cenizas parte 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora