Al dar la vuelta en el pasillo se encontró con su hermana agrediendo a una de las becadas, apuro sus pasos y agarro la mano de su hermana que iba a golpear la mejilla de la becada que se llama, Leila. Kiara se fijó en que su gemela evito que ella le diera el merecido a la estúpida y fea pobretona.
—¿Qué haces? —siseo a su hermana. Keira la miro sin creer.
Miro a Leila. —Vete —ordeno. La chica la miro con agradecimiento y corrió lejos de las gemelas—. Kiara… —gruño fulminando a su hermana—. ¿Qué diablos piensas que haces?
—Yo le iba a dar su merecido, hermana.
Keira con sus manos desato el puño que se formaba en la mano de Kiara. —Esa no es la forma, K. Sabes que no lo es.
La mirada acusadora de Keira, hacía temblar internamente a Kiara. Esta temía a su hermana cuando enojada, Keira es tranquila y callada, hacía casi todo pero cuando se trataba de algo que no le gustaba. Se imponía y Kiara le temía a que su hermana diera su poder a conocer.
—Ella me acuso de ser una zorra por estar con Cameron y por haber salido con su primo, Tyler, el fin de semana —la rabia hervía en Kiara.
—Eso te los has buscado tú, gemela.
La gente de alrededor intentaba escuchar. Nadie comprendía quien era quien y cual era a la que le debían dar las gracias por parar a la otra. Coloco a su hermana frente y la pego al casillero, la miro con desafío.
—Antes de cometer una estupidez, quiero saberlo. ¿Entendido? Porque yo no voy a pagar por tus platos rotos. ¿Has comprendido, K? —el labio inferior de Kiara, tembló.
—Sí. Te lo comentare, K…
—No digas mi nombre —gruño Keira.
La gente se sorprendió de eso. ¿Quién era Keira? ¿Quién es Kiara? La población de estudiantil estaba malditamente, confundidos.
—Ahora, hermana. Si me disculpas, tengo cosas que hacer —se alejó, volteo a medio camino—. Nos vemos a la salida.
Los hermanos Blake vieron el espectáculo. Ellos estaban igual de confundidos y se preguntaron sin ambas eran unas perras que solo gobernaban y humillaban a su antojo.
La vieron ya lejos. Tan hermosas y jodidas que son.
Lander alcanzo a Keira, envolvió un brazo por encima de sus hombros. Ella se apoyó contra su costado, agradecida por el abrazo y la calidez de él. ¿Saben quién es Lander? El mejor amigo de Keira y él podía diferenciarla de Kiara.
—¿Estas bien? —le pregunto al oído.
—¿La verdad? —el asintió—. No. No lo estoy, Lane.
Al llegar al patio, ella no se dirige a la fuente donde están los demás populares, sino a una esquina donde están los árboles y se sientan en la sombra. Lander abre las piernas y deja a Keira recostarse de su pecho. Ella mira el cielo con la nuca apoyada del hombro de su amigo.
—¿Podre alguna vez huir de mi vida? —pregunto Keira.
—Tal vez. ¿Por qué sigues las órdenes de algo que no te parece? —pregunto desconcertado.
—Mamá desea eso. Papá espera que siempre seamos unidas, como una sola Y Kiara es mi gemela. ¿Qué puedo hacer, Lane?
—Imponer lo que opinas, Kei.
Envuelve sus brazos alrededor de ella y suspira en el cabello de ella, el cual tiene un aroma increíble a fresas y cerezas. El aroma de Lander es a avena y coco, ella se acurruca contra el cuerpo de Lander. Él es como un novio para ella, casi. Aun no llegan ahí por el miedo de ella de perderlo. Le gusta, la entiende, la quiere. ¿Qué más puede pedir?
ESTÁS LEYENDO
El juego de las gemelas
Mystery / ThrillerUn misterio rodea a las gemelas Douglas, quienes son acechadas. Desean saber quienes fueron sus padres biológicos, pero esta no está su alcance, al menos no sin luchar.