El juego de las gemelas

¿Cómo diablos lo sabía?

El chofer las llevaba al instituto y ambas estaban que resoplaban por el estúpido tráfico de D.C. Ellas preferían conducir sus autos o irse juntas en uno, definitivamente odiaban ser llevadas al instituto por su chofer. Se miraron la una y la otra y miraron sus celulares que vibraron al unísono. Y enseguida supieron sobre que era el texto. Chismes. Ultimas noticias. Kiara tomo su celular y abrió el mensaje, y ambas leyeron juntas.

RileyH: Nuevos chicos y chicas en el instituto, todos están que arden, K’s.

Se rieron. Seguro que sí, vieron el chofer mirarlas, ellas levantaron las cejas con arrogancia y chofer volvió su mirada a la carretera con temor a que ellas dijeran algo sarcástico, cruel o humillante.

—Toma nota, Kei. Hoy nos vamos a divertir —canturreo Kiara mirando con un plan en la mirada a su gemela.

—Uh. Eso es muy malo. ¿No iba a ser la última vez, Kia? —pregunto nerviosa.

Enarco una ceja. —Iba, Kei. ¿Dónde está la diversión en ser totalmente mundanas?

Se mordió el labio y miro a través de su flequillo a Kiara. —No quiero que mamá y papá nos castiguen, Kiara.

Kiara resoplo irritada. —No lo harán porque no lo sabrán, dulce Kei.

Miro su regazo y abrió una foto en su celular, volvió a subir la mirada. Ella no podía pelearse con Kiara.

—Tienes razón, K. Solo que bueno, tengo miedo de que nos salga el juego mal —susurro.

Se rió de las palabras de Keira.

—Confía en mí, Kei —Keira asintió.

—¿Cuál es tu plan? —pregunto obteniendo valor.

Kiara golpeteo una de sus uñas rojas contra sus labios pintados de color rojo cereza y miro a su gemela con un plan construyéndose en sus ojos. —Vamos a actuar, K. Vamos a jugar con ellos al estilo Hollywood.

Ella entendió el plan de su gemela. Ellas iban a tener que fingir delante de todos que los nuevos que querían ser sus amigas, ella rodo los ojos… ojala que estos no tomaran venganza. Inspecciono sus uñas rojas. A ella le hubiera encantado tenerlas de rosa o azul celeste pero según Kiara y su madre, ella no podía lucir diferente de su gemela. Si son gemela, deben lucir como gemelas, imito la voz en su mente.

Estudio su reflejo en el cristal, miro a las chicas caminar a sus institutos. Iban con tanta tranquilidad, sin preocupaciones… y a veces ella deseaba no tener una gemela pero cuando recordaba que la única familia de sangre que tenía y conocía era Kiara, olvidaba ese deseo y recordaba que la única cosa constante en su vida era su gemela.

A Kiara no le pasó desapercibida el estado pensativo de Keira y se preguntó que estaría pensando en ese momento. Antes, Kiara sabía leer a Keira muy bien ahora era tan misteriosa que a veces le ponía nerviosa que Keira se le revelara cuando ella se colocaba al mando. Estiro la mano y tomo la mano de Keira que estaba en el asiento, esta salió de sus pensamientos y se dio cuenta de que Kiara sostenía su mano, la apretó y su gemela apretó de vuelta.

—Todo estará bien —musito Kiara mirando con cariño a Keira.

—Realmente espero eso —dijo en voz baja.

Vieron el tráfico avanzar con lentitud, cuando lograron salir de la cola. El chofer manejo al instituto Weston Bright. Al entrar en el estacionamiento, se detuvo en la entrada. Todo el mundo se detuvo al ver el Audi A5 SB negro. El chofer bajo y abrió la puerta de Kiara y esta salió, seguida de Keira. Ambas fueron estudiadas a fondos por la población estudiantil, desde el más bajo de la casta de Weston Bright al más alto. Se miraron la una a la otra y emprendieron su camino. Los chicos babeaban mientras veían a las abejas reinas Douglas hacer su camino hasta su grupo de amigos.