Ella, la manzana de la discordia - the originals

Un mal presentimiento

Me sentía plena, tranquila, feliz  pero tenía mucho por hacer en mi ciudad, cuando volví a la cama Nik se estaba despertando.

—¿Nik, me acompañarías al Lafayette? necesito pagar mis respetos y luego debo contactar a Hope.

—No, no la llames aún. Después de ayer creo que necesitamos un momento de tranquilidad para los dos.

—Esta bien, vamos a recorrer la ciudad. Lo besé  y tomó mi mano, halandome de nuevo a la cama, nunca me sentí tan feliz.

A pesar de haber vivido tanto en la ciudad nunca la había recorrido así, con otros maravillados por ver lo que yo deje pasar por alto, fuimos por el barrio francés y jackson square y el mariposario, ella estaba feliz y me hablaba de cómo había venido a estos lugares con su familia cuando era una niña feliz, era tan humana y justo lo que yo necesitaba.

—¿Alguna vez habías visto la ciudad así?

—Nunca, gracias por mostrarme algo nuevo.

El cementerio fue la última parada,  sus ojos se abrieron maravillados por la imponencia del lugar, pero entró con tal humildad y respeto que me fue imposible no imitarla, a pesar de haber experimentado eventos desagradables allí mismo; caminamos en silencio y al verla sabía que estaba llenándose del poder del lugar.

—Puedo sentirlos más fuerte que nunca, Nik. Voy al altar, ¿me esperas?

—Ve.
Camine en silencio hacia la tumba de Camille, la había visto muchas veces en mis años de encierro su recuerdo no me permitió enloquecer y por ello le estaba agradecido, ella había sido una gran influencia y su recuerdo siempre lograba arrancar una sonrisa de mi; me agache a limpiar la maleza cuando de repente me invadió una sensación de terror algo terrible estaba a punto de pasar y las escuche.

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—¿Hope?

—Arianne, ¿que haces aqui?

—Vine a visitar el lugar, es precioso y está lleno de magia ¿no la sientes?, tu que haces aquí vestida de luto y emanando tanta tristeza.

—¿Nunca te enteraste, verdad?

Antes de poder decirle nada, me abrazo y lloró.

—André murió hoy hace 6 meses, vine a visitarlo me parte el corazón saberlo en este lugar.

Sollozo frente a mi y sin decir más se dio vuelta y me dejó allí con el corazón roto.

—Murió... mi hermano muerto, ¿cómo no lo supe? perdí el equilibrio y me sostuve contra un mausoleo mientras miraba a lo lejos a los Mikaelson  llorando al niño que  pudieron ver crecer y dejaron morir, estaba segura que era su culpa, mi cabeza empezó a doler y solo supe que debía salir de allí, sentí una fuerza desconocida recorriendo mis venas  y luego nada.

La ví caer, escuché lo suficiente para saber que todo estaba muy mal, estaba pálida pero de alguna manera sentía un poder increíble emanando de ella, sabía que debía sacarla de la ciudad lo antes posible así que la llevé al hotel recogí nuestras pertenencias, tomé el auto y comencé a manejar hacia el Bayou, hallé la cabaña abandonada y  la deposité en la cama, debía ser paciente y esperar.