Scavenger hunt

369 25 5
                                    

Tener a Freya en casa era magnifico, no solo había sido amiga de mi madre si no que durante su estadía en la casa Mikaelson había sido su confidente y gracias a ella ahora tenía en mi poder el grimorio de Esther Mikaelson y memorias infinitas de mi hermano, aun si no confiaba totalmente en ella sabía que su presencia había traído paz para Nik quien permanecía encerrado pintando, había pasado una semana desde el incidente de la mordida y no sabia aun como abordarlo, solo una vez antes que el alguien me dijo que me amaba y en ese entonces aunque no tenía una crisis mental no supe que decirle y ese había sido el fin; tenía miedo de perderlo, había dejado de ser una simple pieza en mi tablero.

Fui y volví 100 veces a su habitación pero cuando iba a entrar me acobardaba, simplemente no podía entrar así que volví al salón y me serví un vaso de Absenta y me bebí uno tras otro como si fuera agua.

-No esta molesto contigo, quiere darte espacio, está muy arrepentido.

No acostumbraba a pedir ayuda, llevaba tanto tiempo valiéndome por mi misma que era difícil acudir a otros, pero no tuve mas remedio.

- ¿Freya, podrías ayudarme? No se como abordar a un híbrido de mil años para decirle que yo también lo amo y que no lo odio así hubiera intentado matarme.

-Ve a arreglarte mientras hago mi magia .Tenía una sonrisa hermosa, era perfecta para Eddard.

                                                                                ***********

Nunca me había arreglado tanto para alguien, me puse un vestido corto con un estampado de flores  unos botines negros de cuero y un blazer  y me maquillé mucho mas suave de lo que acostumbraba y fui a la habitación que hice solo para el.

Cuando entré me llevé la sorpresa de mi vida, no había nada, bueno una tarjeta pegada a un lienzo vacío que decía , sigue el rastro con un símbolo idéntico al Om tatuado en mi antebrazo.
Empecé a caminar por la ciudad siguiendo las pistas en las que encontraba un dibujo de mis tatuajes, con una nueva pista. La memoria de Niklaus era aterradoramente acertada el detalle de cada dibujo era perfecto, recorrer mi cuerpo incontables veces había dado su fruto.

La pista final estaba en la entrada del Golden gate park y había un dibujo de las flores de cerezo que adornaban mi costado derecho sabía que debía ir al templo principal en el jardín japones aunque ya era de noche.

Cuando llegue mi sorpresa fue total, velas encendidas en cada rincón del templo y un lienzo con los símbolos de mi espalda  y un gran anillo negro en la mitad, no tenía idea que era pero voltee y alli estaba el, mas apuesto que nunca vistiendo de negro con el anillo de la pintura en su palma extendida y esa sonrisa torcida que tanto amaba.

-Corrí a sus brazos y el me levantó sorprendido

-Te amo Niklaus, por eso te salvé, por eso ... y me silenció con un beso sabía que había encontrado a mi vengativa y sangrienta alma gemela.

Vi salir a Freya y a Eddard de un rincón con una gran sonrisa en los labios y me sentí apenada.

- Qué les parece si hacemos esto oficial después de todo heredé de tu abuelo las aptitudes de un chamán.
- Y allí en medio de la noche Nik y yo nos hicimos uno de verdad.

Éramos una familia pequeña con el peso de un gran secreto y una gran responsabilidad.

- Ve tío reúne a las 7 manadas y prepáralos, la guerra apenas comienza.

Besó a Freya en los labios y se fue.

________________________________________________________________________________

Bebes, gracias por leerme. Sigan votando y comentando. Esto se va a poner bueno . Besitos 

Ella, la manzana de la discordia - the originalsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora