Condenados (Louis y tú) [EDITANDO]

Capítulo 5 "Llegarás muy lejos, niña"

Narra Louis

Cuando Liam nos dijo que era lo que teníamos que hacer quedé atónito. Es una locura. Ya me esperaba algo sombrío de ese hombre, pero no me imaginé que sería necesario quitarle la vida a alguien solo porque sí.

Luego de que ese chico, Zayn, hablara y Liam contestara, escuché una voz que esperé no volver a oír nunca más en esta vida. Y la vi, ahí estaba ella. _____ López, la chica que hizo que me despidieran de la agencia. Pareciera que esta chica nunca cambia, sigue siendo la misma chica infantil que no sabe lo estúpidas que pueden resultar sus acciones. No ganará nada pareciendo una loca en frente a Liam y a todos los demás, solo la verán como un blanco fácil porque parece asustada.

Cuando Liam dijo la razón de todo esto y el porqué de matarnos, era obvio, por lo menos para mí. Las autoridades están metidas en esto, es lo único que se me ocurre. ¿Qué razón tendría el FBI de reintegrar a un ex-agente que mató a su compañero? Claro, Liam desaparece a varios de sus problemas, incluyéndome. Que bajo han caído. 

Después de la pequeña discusión que tuvo _____ con Liam, él nos mando a comer y habló de una inyección. Al parecer, es para una vacuna contra las enfermedades comunes o una cosa así. También dijo que estaríamos un mes aquí.

Bueno, la verdad la idea de estar aquí y hacer algo por la vida, en vez de estar cumpliendo con mi rutina diaria, me parece perfecto. Claro, eso saltándome el hecho de que dentro de un mes estaré metido en una guerra a sangre fría.

*****

Luego de comer, decidí ir darle una vuelta a _____. No pregunten por qué, porque ni yo mismo sé. Sólo dirigí mi paso hacia ella sin razón alguna. 

Fui hasta ella y me miró a los ojos fijamente. No podría decir qué emoción mostraba al acercarme a ella, pues, su semblante estaba inexpresivo. Su mirada de un color café oscuro estaba apagada y recorriéndome.

—¿Cuánto tiempo, eh? ¿Cómo te ha tratado la vida? —dije, esperando ver alguna reacción. Un poco cruel, tomando en cuenta que estuvo presa. Pero qué va, se lo merece. Además, ¿en serio no tuvo ninguna reacción al verme, o es que la supo disimular muy bien?.

—¿Qué quieres, Tomlinson? —preguntó de manera fría y cortante.

—Nada. Solo quería entablar conversación con una chica a la que no he visto hace un año —dije a la ligera. No respondió— ¿Qué haces aquí?

—Comer, ¿no se nota?  —preguntó sarcásticamente. Ella sabe a lo que me refiero

—Nunca cambias, ¿cierto? Sigues siendo una niña de malas bromas, sarcasmos absurdos y que no piensa antes de abrir su boquita —dije para fastidiarla. Pasar un año en la cárcel parece no ser suficiente para poder pensar un poco antes de hablar.

—No me vuelvas a llamar niña, ¿ok? —dijo, claramente molesta. Vaya, por fin demuestra una emoción y es justamente esa. Cascarrabias.

—¿No lo eres? Mmm... Pues, lo que hiciste hace un momento no demostró mucha madurez de tu parte, niña.

—¿A qué te refieres? —preguntó, entrecerrando los ojos.

—No tenías porqué alocarte y discutir con Liam —Quise sonar relajado, pero de algún modo, salió un tono de reproche. Ella quiso hablar, pero seguí hablando—. Con lo que hiciste, mostraste claramente que tienes miedo y eso te hará un blanco fácil. Aprende a pensar un poco, niña. Si los que están aquí son criminales, marginados sociales, prófugos, entre otros... ¿Les importaría matar a unas cuantas personas para ganar un millón de dolares? No, niña. Piensa las cosas. Siempre que hablas sin pensar echas las cosas a perder.

—A ver, Tomlinson. Gracias por el breve sermón, pero no me importa lo que ellos piensen de mí. No soy un blanco fácil y no lo seré. Fin de la historia —Yo iba a hablar, pero ella no me dejó, igual como hice con ella hace unos momentos—. Además, ¿Qué te importa a ti si me tienen en la mira como blanco o no? Ni que yo fuera algo importante para ti —dijo ella con una mirada llena de rabia.

Ella fue algo importante para mi, pero ahora no. Ahora ella no me importa, es un cero a la izquierda. Tiene razón. ¿Qué hago al reprocharle su error, si ella no me importa?

—Me voy. Que tengas buen provecho —dije, evadiendo de la manera menos disimulada lo que acaba de decir ella.

"Bien hecho, Louis ahora ella se dará cuenta que te incomodaste por eso".

—¿Buen provecho? Gracias a ti perdí el apetito. Eso, sin mencionar que ahora tengo nauseas por tu fea cara y hedor —dijo, haciendo una mueca extraña.

—Sigue con tus palabras infantiles. Llegarás muy lejos, niña —dije, haciendo énfasis en mi última palabra.