Capítulo VI

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[Esta novela se encuentra en edición y será sometida a numerosas modificaciones constantemente.]

Beth

Y ahí estaba yo.

Limpiando restos de comida de una ventana.

¿Charlotte? Mamá la envió a la cama. Dijo que estaba demasiado boracha y que no dejaría que olvidará el castigo y el sermón que la esperaban, la quería sobria, o en todos sus sentidos (aunque eso jamás sucede). Para ti, mi querida amiguita, te espera algo terrible. Aunque dudo que sea la mitad de peor que lo que mamá me había obligado a hacer.

Además de limpiar el desatre que no había llegado a causar, debía expresar unas disculpas personalmente a los dueños de la residencia y como la cereza del postre... tenía que ser la guía turística.

Debía mostrarle la Universidad.

Yo, que ni siquiera sabía donde estaba el pabellón de natación. ¿Qué les podía mostrar exactamente?

"Bueno, esta es mi habitación. Esta es mi cama. La cama de Jane. El pasillo. La oficina de mamá y papá. Una ventana... ¡Ah! Observen, por este lado tenemos otra ventana."

Me reí de mis pensamientos.

-¿Compartes el chiste? -Una voz culpable venía desde atrás mío.

George.

-Lo siento mucho. Entramos en pánico. Puedes ir a dormir. El equipo acabará de limpiar todo. Lo siento, si nos veían el equipo no jugaría esta temporada.

Parecía bastante sincero, sin mencionar que todo el equipo traía cubetas y elementos para limpiar.

-De verdad. Lo siento, deberías... irte a dormir. Estas cansada y no tuviste la culpa de nada. -Insistió George.

-¿Sabes que? - Le lancé el pedazo de tela con el que estaba limpiando. - Tienes razón. Me voy a dormir. Yo no hice nada. No pagare platos que no rompí, ya tengo suficiente con el castigo de mañana.

-¿Otro castigo? Pensé que tenía beneficios ser la hija de la directora.

-Para nada. Y si, otro castigo. Mañana tengo que ser de guía turística para las víctimas de tu estúpida broma. -Solté furiosa al recordarlo.

-Hey, ya te dije que de verdad lo siento, y además tu querías participar de mi "estúpida broma". Me encargaría pero digamos que el chico Darcy sólo me daría un par de golpes si intentó darle su pequeña excursión.

Me fui sin decir nada. Pero alguien me paró mientras me alejaba de la residencia.

No alguien. Algo.

Unas voces.

Dos chicos que limpiaban el desatre estaban discutiendo.

-¿Que clase de broma es esta si vamos a limpiar todo después?

-Limpia y cállate. El chico tiene razón. No podíamos dejar que ella limpiara sola. La chica Bennet ni siquiera llegó a romper una hoja cuando la culparon.

- Su problema. Hubiera corrido cuando tenía que hacerlo. Mucha gente inocente va a la cárcel.

-Esto no es la cárcel idiota, y fue culpa de George. Emborracho a la otra chica y Bennet no quiso dejarla sola. No me parece mal. Lo haría por ti. Aunque veo que tu por mi no.

Estaba por estornudar, por lo que salí corriendo y ya a una distancia prudente hice todos los ruidos que me apetecian.

¿Quien tenía razón? "El chico tiene razon", recordé que dijo uno. Por lo que había hablado no fue George quien había convencido al equipo de volver a limpiar.

Mamá.

Si, después de todo ella los vio. Seguramente todo fue una excusa para que hable con el señor. "Filtwilliam perfecto idiota arrogante Darcy"

Mamá. Eres terrible.

Eres muy parecida a mí.

¡Que horror!

Aunque el chico de las residencias se había referido a mi salvador como "el chico".

¿El chico?

¡¿Y quien demonios era el chico?!

¡Bingley!

Claro. Él debió de haberlos convencido o algo así. Parece muy buena persona. Podría convencerme de lo que sea.

Aunque se ve demasiado generoso. No pudo haberlos obligado. ¿Todo un equipo de futball contra un londinense.... bañado de dinero? ¡Claro!

Así debió haber conseguido a los patanes de sus amigos.

¿Les habrá pagado?

Realmente tengo curiosidad de como se mueven los ricos.

#Chicos. El libro está en edición. No se sorprendan si los capítulos cambian. Es un libro que necesita más tiempo y estructura. No se sorprendan por favor si notan que cambio cosas muy relevantes en la historia, cosas que van a influir fuertemente más tarde, me disculpo por las repentinas modificaciones. Sin más que decir, Feliz Navidad y muy bien Año nuevo.
Y por si no conocen mi política, me gusta que ustedes sean parte de la historia. Que me ayuden. Comenten, ríanse, compartan, y si ven errores: No se sientan mal en avisarme. Acá estamos todos para aprender.
Disfruten mi nueva novela.

Orgullo y Prejucio: la nueva generación Donde viven las historias. Descúbrelo ahora