Capítulo VIII

458 41 1
                                    

[Esta novela se encuentra en edición y será sometida a numerosas modificaciones constantemente.]

Beth


El recorrido ya casi terminaba. Y parecía una real pérdida de tiempo puesto que Jane y Charles no parecían de los que más prestaban atención y Darcy, a juzgar por su rostro, parecía que se dispararía en las orejas en cualquier momento. Pero que importa, realmente quería ver eso.

Jane me miró y finalmente habló luego de hacer gestos que no entendí.

-Bueno... creo que seguiré yo si no te molesta. Puedes ir a ver a Charlotte. Ella... debe estar preguntándose por ti.

Asentí y Charles y ella desaparecieron pero Darcy seguía atrás mío.

-¿QUE?

-No parecía que estabas sorprendida de ver quién era.

-La verdad es que siempre lo supe. Creo que me engañe a mi misma.

-¿Tan obvios somos?

-Créeme Darcy. A ti y a tu amiguito se les nota en la cara que no son de aqui. Traen "Londres" escrito en la frente.

-¿Traigo algo más en la cara?- Intentó hacerse el gracioso.

-No pienso caer en tus estúpidos juegos. Dile a tu amigo que cuide a Jane. Ella no es cualquier chica.

-Él no la va a lastimar. No te preocupes.

-Si, lo se. No parece "esa clase de chico". -Agregue.

-¿Que clase, a que te refieres? - Parecía sorprendido.

- Obvio a ti. -Lo señalé.

-No me conoces. - Dijo algo ofendido. Aunque parecía muy relajado. Como si no tuviera nada que ocultar.

-No hace falta. No me pierdo de mucho, estoy segura. No eres el primer chico con dinero que se cruza en mi camino.

-No parece. Estas muy a la defensiva.

-Digamos que "tolerable y apenas tentadora" no es mi insulto favorito.

-En serio lo siento. Pero de verdad no soy como crees. Se que no me perdonaras pero me gustaría remediar las cosas de alguna forma. ¿Te gustaría cenar conmigo esta noche? Y quizá cambie tu opinión hacia mí.

-Mmm no creo poder. Mi pareja de esta noche parece una persona bastante difícil y arrogante. -Le dije. - Cambiar mi opinión sobre él no parece una misión imposible. ES imposible.

-Y que recomiendas para aliviar y remediar los errores.

-Bailar. Aunque la pareja de uno sea apenas tolerable.

Y me aleje.

-Entonces bailemos esta noche.- Gritó desde el medio del campus mientras corría hacia mi.

- No, gracias. Mejor sube a la terraza y lanzate con total confianza. Estaré abajo para intentar atajarte. Será como una cita.

- Me temo que tu hermoso y delicado cuerpo no podrá atajarme.- Argumentó riéndose.

Riéndose.

Dios. Lo odio.

- Créeme. Mi cuerpo puede hacer más que atajarte. - Eso no sonó como esperaba.

-Ya lo creo. Bailare para aliviar mis errores. Usted que hará con su odio hacia mi para aliviar su alma.

-Voy a empujarte cuando te vea bailando en la terraza. Y después meditaré de mis errores haciéndole otra novatada a tu residencia. -Solté furiosa.

No me había dado cuanta de que estábamos caminando a grandes zancada mientras llegamos a la residencia de las chicas.

-Espera. Aún me debes un Tour. - Dijo antes de verme desaparecer por la puerta hacia dentro del edificio.

-Bien. Esta es la puerta de la residencia de mujeres. En donde no se te permite pasar. Y esta soy yo alejandome de ti por la puerta trasera.

Entré y al fin lo perdí.

Señor Darcy. Usted está muerto para mí. Ni siquiera me molestaré en hacerle la vida imposible. La vida ya le pagó con su actitud arrogante y pedante. Y lo peor, usted es más orgulloso que yo.

Me enferma.

$87:!

Orgullo y Prejucio: la nueva generación Donde viven las historias. Descúbrelo ahora