☼ Daniel☼

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Daniel... Daniel... Daniel...

Ese chico pelinegro, mal humorado, enfadado con todos, no se salia de mi cabeza. Y, eso era un problema.

Antes de el, solo habían unos ojos amarillos, unos impactantes y hermosos ojos amarillos, ojos miel, ojos ámbar, esos ojos no existían. Solo en el. Solo con Daniel.

Sus ojos eran amarillos, un color increíble, pero por la luz en ocasiones eran rojizos, anaranjados, con un fondo miel, esos ojos no eran comunes. No hay ningún humano en la tierra que tenga esos ojos. Y eso solo hacia que mi curiosidad crezca aun mas hacia el.

Lo peor de todo era que siempre lo encontraba mirándome fijamente, o de reojo, pero cuando hablábamos ni siquiera me miraba y siempre era frió y cortante.

¿Que le pasaba?  O, mejor dicho ¿Que me pasa?

Nunca antes  me había sentido tan atraída por alguien, o por unos ojos que solo los veía en mis sueños, pero desde que apareció Daniel y esos chicos, mi vida se a vuelto un drama, por que cada vez que los veo siento un hermoso cariño y nostalgia. Pero, yo no los conozco de nada. 

Desde su llegada ya había pasado seis meses, en los cuales pude conocerlos un poco mas, Napo era el amable, fiable podía contar con el para todo, Jae era infantil aunque aveces decía cosas maduras, Jack era agri- dulce, aveces dulce y en otras gruñón, Jorch era el egocéntrico, según el, el era el mas guapo, Louis era muy, muy, pero muy maduro y nos trataba a todos como sus hijos, era como nuestra madre, y Daniel era... bueno.. el era.. ¿Normal?. 

Estábamos Junio, y cada Junio de cada año nos íbamos de paseo, por que en este mes era el aniversario de nuestro colegio, así que nos íbamos de viaje, y el lugar dependía, este año todos habían decidido que deberíamos ir a un campo, que estaba cerca a un lago. 

Mi primer viaje junto a esos locos.. 

Y una chillona vos me saco de mis pensamientos.

- Caty!! - me llamo Jae en vos baja- ¿Iras, cierto? 

Yo sonrei y asentí. Le había dicho que iría desde la semana pasada, pero el me lo preguntaba cada vez que podía. 

Después de una larga y estresante clase de matemáticas, vino el glorioso recreo. Y, sin dudarlo me fui donde estaban ellos, desde el comienzo me pegue a ellos como chicles, algunos decían que tenia a los chicos mas guapos solo para mi, y aunque suene egoísta aveces lo deseo. Eran como  mis hermanos excepto.. Daniel. 

- ¿Iras, verdad? - dijo Jae y todos lo fulminaron con la mirada. Ellos se habían hartado que lo preguntara tantas veces.

- Si, si iré Jae, por milésima vez... - suspire y me senté sobre la mesa- 

- Daniel - lo mire Jae con malicia- 

- ¿Ummh? - dijo el, estaba muy entretenido leyendo un libro-

- Deja de fingir que lees, y alégrate que Caty ira - hizo un puchero adorable- 

Daniel le dio con el libro en la cabeza a Jae.

- No estoy fingiendo - le dijo- Y no veo por que alegrarme, no cambia nada.. - suspiro cansado- 

- Tenias el libro al revés - contra ataco- Y, te recuerdo - hizo una pose de diva- que eres tu quien solo habla de que Caty ira al paseo,a pesar de mi. - le saco la lengua, por mientras Daniel se ponía rojo y miraba hacia otro lado- 

Louis rodeo con su brazo el cuello de Jae y le dijo en su oído con una vos malvada.

- ¿Cuantas veces te digo que no andes como vieja chismosa? 

Demonios y Mariposas [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora