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Hoy me he levantado más vieja de lo normal. Me siento súper fatal, me duele las muelas, los cordales. Me ha salido un jodido barro doloroso. Me ha empezado a dar fiebre, y siento mucha debilidad. Me molesta todo, ahora más que nunca siento morir, mis pensamientos no me dejan en paz. Pensamientos confundidos, negativos, depresivos, pensamientos suicidas más acelerados de lo normal. Hoy más que nunca me siento más muerta, más sola, más adolorida, más pesada, más negativa.

Puede parecer estúpido pero tengo ganas de llorar, estoy enferma por dentro y ahora lo estoy por fuera. Siento mi vida caer... otra vez. Ya no creo poder levantarme otra vez. Mi cuerpo lucha con mi alma, mientras uno quiere rendirse otro lucha por vivir, y es muy fuerte para mí. Mi cerebro tiene personas atascadas, y mi corazón las quiere pero lo tengo destrozado y en muy mal estado, y no sé si puedan entrar en esos pedazos.

Tengo miedo, cuando más tranquila quiero estar es cuando la tormenta sale y empeora su rango junto con sus poderes haciéndome débil y mala jugadora. Se alimenta de mi negatividad, debilidad y malos pensamientos, haciéndose mejor mientras que yo me voy derrumbando sin respiración hacia lo peor.

Cuando estoy decida a algo de la nada aparecen más opciones y mejores que hacen dudar de la anterior escogida.

Es una pelea de tres, mientras que lo jugadores son fantasmas y ni saben que pelean entre ellos, yo soy la espectadora, lo veo y siento todo aunque los fantasmas ni tienen idea de lo que hacen por una parte están inconscientes, pero yo si la tengo y puedo verlos.

Me empieza a dar miedo, soy la única que presiento todo mientras que nadie más lo hace. Presenciar me hace sentir débil pero es un don, y no puedo rechazarlo como un vaso lleno de cualquier contenido.

Siento como mi cabeza está cobrando vida, y se sigue llenando de pensamientos aún escribiendolos, causándome dolor, mucho dolor.

Todo empieza y se desarrolla en mi cabeza... ¿Cómo terminará? No lo sé pero si no se resuelve solo, tendré que acabarlos yo, tendré que acabarme...

Desahogos del almaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora