Fuego Azúl [Libro #1]

Capitulo 57: Entrenamiento y una visita inesperada

Sus manos acariciaban mis caderas, un hormigueo recorría todo mi cuerpo y me hacia temblar de excitación. Ahí estaba Miller tan hermoso como siempre con ropa para hacer ejercicio dejando ver sus músculos y su pecho marcado. Pero de pronto él desaparece y me encuentro gritando, tapándome los oídos.

"Te estas volviendo loca, mírate tan vulnerable a esas falsas voces"

Una risa retumba en mi cabeza, quiero correr pero no puedo.

— Rachy....

Miller me mira risueño. Esta solo con un bóxer y me pongo roja al instante. Estoy en la cama envuelta en sábanas, sábanas que cubren mi desnudez.
Había jurado que no esto pasaría de nuevo... ¡Vamos que estúpida eres Rachel!

— ¿Donde esta mi ropa?

Él levanta mi sostén color colar y lo agita como si fuera una bandera. En ese instante entra Jeim y me mira perpleja.

— Ya sabía yo que nada bueno hacían aquí encerrados.

Miller se puso tenso y escondió el sujetador detrás suyo.

— No me lo esperaba de alguien como tú Rachel. Juré que llegarías virgen al matrimonio.

Miller corrió a besarme la mejilla.

— Ya somos esposos o bueno algo así. Eso de tener una conexión por tener la misma cantidad de fuego es como un matrimonio, no puedo amar a nadie que no sea ella.

Jeim soltó una carcajada y yo permanecía callada, me sentía algo somnolienta y perdida.

— Ya cállense—. Estallé dejando a ambos atónitos. — Perdón, es que de verdad quiero algo de privacidad, no asimilo nada aún.

Miller asintió con la cabeza y haló a Jeim con ella.

A penas salieron me baje de la cama y me cambie, colocándome un vestido color plateado y un colgante de plumas de pavo real, junto con unos vans grises. Luego de eso decidí bajar y ver que había de desayuno, extrañaba una buena comida.

Al bajar por la escaleras estaba Erick con las manos cruzadas cabizbajo y por otro lado estaba Jack, pegado al umbral de la cocina con la mirada perdida. No había tenido una charla con él desde que llegó y la necesitaba. Así que me acerqué a él.

— Necesito hablar contigo.

Él me indico sentarme en un pequeño banco dentro de la cocina. Sus piernas colgaban algo chistosas.

— Lo siento—. Fue lo primero que dije.

— No... Por favor no te disculpes—. Me miró tocándose él pecho.

— Fui yo quien se enamoró de la persona equivocada y cometió locuras por aquello.

Una lágrima se escapo de mis ojos.

— Fue mi culpa...—.Sollozo y no puedo terminar lo que iba a decir.

— Ya dije que no digas eso.

— Si lo es, te di esperanzas cuando amaba a otro.

Jack soltó una carcajada.

— Siempre supe que estabas loquita por ese chico con problemas, solo que no lo acepté. Ahora se que lo que sentía por ti era inevitable, una bruja me lo dijo "Ten cuidado de los que cuentan con él verdadero fuego azul, son como un agradable vaso de agua en la sequía" — Eres irresistible Rach.

No pude evitar sonreír.

—Creó que si te amaba pero no tan profundo como lo hago por esa loca, agresiva y psicópata que tienes como amiga. Y ahora me pregunto como pude querer olvidarla.

¿Ah? ¿ Querer olvidarla?

— Espera... Tu le Borraste la memoria.

Jack asintió.

— Rach de verdad no se lo digas, pero ella y yo somos él fuego mortal. ¿Y sabes que significa? Que somos agua y fuego mortal literalmente. Yo podría matarla sin querer al igual que ella a mi, no lo podemos evitar.

Abrí los ojos como platos. Esto era verdaderamente horrible, ambos merecían ser felices.

—Así que lanzas agua o algo así.

Jack soltó una carcajada.

— Solo observa y siente. Jack abrió sus manos y dejo escapar lo que parecía un fuego pero si lo mirabas mas detallado parecía agua y al tocar mi piel se sentía como agua.

— Uhh.. Es muy cool, no entiendo como podría hacerle daño a Jeim.

Jack apretó los puños.

— Hace él mismo daño que una vez te causo Miller.

Lo mire atónita ¿ Como sabia eso?

— Si y lo se porque te tenia bien vigilada.

— Eso es acosos, pero bueno si no pueden estar juntos ¿ Por qué le hiciste recordar?

— Porque descubrí que lo podemos controlar mientras nos alejemos cuando estemos enojados. Y ya sé Jeim siempre esta molesta, pero me refiero a un enojo verdaderamente peligroso.

Un par de personas empezaron a gritar y Enseguida Jack y yo salimos de la Cocina. Era Miller y su hermana. No la había visto desde aquella vez que nos enfrentamos contra Chad y su ejército.

—Ya te dije que te quiero alejada de todo esto.

—Por favor Miller, soy tu hermana y lo único que quiero es estar contigo.

—¿Acaso no lo entiendes? La bruja quiere tomarte y usarte como sacrificio. Vete ya de una vez y no vuelvas más. Lo hago por tu bien hermana.

— ¿Como así que la bruja la quiere?

Miller me miro con los ojos bien abiertos.

—Miller creo que estas siendo duro, podemos protegerla todos nosotros. Además Estela esta de nuestro lado y vemceremos a esa bruja, pero no intentes hacer con tu hermana los mismo que hiciste conmigo.

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—Siempre te sales con la tuya Rachy, es algo molesto a veces.

—Pero así me amas.

Así es él me ama. Debía creerlo mas de seguido hasta que por fin creyera de una buena vez por todas que era así. El problema es que Miller era tan raro y problemático.

—Si y también estoy algo impaciente por ver al amor de mi vida con esa ropa ajustada.

Si que ajustada, er a una ropa que dejaba ver las curvas de mi cuerpo y mi falta de trasero. Me sentí decepcionada por lo último.

—Por favor Rach sal ya.

Abrí la puerta y deje mostrar mi ropa ajustada. Él me miró boquiabierto y corrió a cargarme.

—Si que vale la pena entrenarte.

— Pervertido... Sabes Miller me he hecho una pregunta desde hace tiempo ¿Crees que para hacer él amor es necesario del cuerpo?

—Claro que no, podria amarte aún si solo tuvieras una cabeza.

Solté una carcajada. No había entendido lo que le había tratado de decir pero bueno debíamos entrenar.

—Bueno mejor entrenemos ya.

Miller asintió y me llevó al tiro al blanco con cuchillos incendiados con fuego azul. Esto era algo que se me daba verdaderamente bien. Aunque a Miller le iba muchísimo mejor.

Luego pasamos a la prueba de control con la naturaleza. Pocas veces usaba este poder pero si que era uno de mis favoritos.

—Sabes quiero comer manzanas ahora mismo.

Asentí y me dispuse a hacer crecer un gran árbol de manzanas, estas estaban verdes aún.

— Bueno las prefería rojas pero las verdes son realmente deliciosas—. Alcanzó una.

—Bueno pasemos a la siguiente fase.

Él negó con la cabeza.

—Esa no era la prueba, solo tenia hambre. — Haz volar ese pino a kilometro de aquí, luego haz que toda la vegetación de aquí muera y por ultimo vuelve todo como antes.

Era algo realmente complicado pero me dispuse a realizarlo. Comencé por desprender él árbol que fue lo mas difícil mis manos temblaban y varias veces caí, levantada siempre por Miller. Pero al intento numero 30 logre arrancarlo y hacerlo mandar a Kilómetros, en ese momento lo de la destrucción fue fácil pero lo de volverlo como antes fue aun mas complicado que él árbol.

— Rachy si de verdad no puedes dejar aquí—. Dijo Miller al ver sangre saliendo de los orificios de mi nariz.

Negué con la cabeza. Tenia que hacerlo. Me levante y agite de nuevo las manos concentrándome.

" Por favor vuelvan mis queridas plantas a vivir"

Los arboles volvieron como renacidos y cargados de bellas flores. Parecía primavera.

— Eso estuvo muy bien por ahí. Vamos a descansar en serio lo necesitas.

Negué con la cabeza.

—¿Crees que no me he dado cuenta? Estas perdiendo tú fe en ti y estas dejándote llevar por él estrés. Nunca te había visto temblar de aquella manera con algo que pudiste hacer antes con un solo movimiento de dedos. Eres mas fuerte que cualquier fuego azul, debe creerlo.