Capítulo 3

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[Jimin]

Nunca había estado tan paralizado en mi vida, sentía que mi corazón se salía de su lugar, mi mente estaba en blanco y mis labios temblaban.

Yoongi era la persona que amaba, fuera a primera vista o no, me atraía de muchas formas. Quería besarlo tan salvajemente pero a la vez quería matarlo por el dolor que me causaba cada que decía "me das asco".

En verdad quería cerrar el trato y no parar de besarlo, ni mil besos de cada niña de la escuela se compararían con uno de Yoongi. Sus labios tan suaves y rosados, su piel tan blanca, y sus pequeños ojos rasgados me estremecían.

En verdad quería comérmelo a besos.

Pero no toda mi vida es feliz, a pesar de ya tener el dinero de la deuda que tenía con la banda de Monster, mis gastos son extremadamente altos, mi madre está tan enferma que no puede trabajar, mi padre había fallecido hace ya dos años, ayudaba a mi madre en los gastos de la casa y en sus consultas, en verdad necesito trabajar un poco más.
Además, es solo trabajo, no me involucraría con una chica, es sencillo puesto que pagarían mucho por tan solo salir una tarde con ella.

Pero con Yoongi, con él me meto hasta en la cama.

[Yoongi]

Bajé a desayunar con Sunhae, y como todas las mañanas estaba tomando su taza de té.

— Sunhae — dije avergonzado.

— Buenos días, ¿necesita algo? — saludó amable.

— ¿Qué es el amor? — balbuceé.

— Es algo que no se puede explicar Yoongi, digamos que es ese cosquilleo que sientes cuando cruzas miradas con una persona especial — miró hacia el techo — Es como si vieras el mismísimo cielo estrellado en sus ojos — terminó el relato con una sonrisa.

— Oh ya veo — jugué con mis dedos por el nerviosismo.

— No se preocupe, encontrará a una persona antes de que lleguen sus padres — sonrió.

Sonaron las llaves de la puerta y tacones chocando con el piso de concreto, hasta que paró el silencio y tocaron el timbre.

— Yo abro Sunhae — me dirigí hacia la puerta.

Me sorprendí al ver a mis padres fuera de casa y una chica delante mío en el marco de la puerta.
Una sonrisa se formó en su cara y se abalanzó sobre mi, haciendo que cayera de espalda al piso y que ella quedara arriba de mi.

— I love you — gritó abrazando mi cuerpo con fuerza.

— ¡Aléjate! — grité alterado empujándola al otro lado.

— Yoongi — dijo mi padre — Sé cortés con tu futura esposa — rió alegre.

Me estás jodiendo.

— ¿Se encuentra bien joven Yoongi? — se acercó alterada Sunhae.

— ¿No iban a llegar mañana? — me levanté nervioso.

— Nos adelantaron el vuelo — sonrió mi madre — Todo gracias a ella — tomó el brazo de la chica.

No me queda de otra. Necesito de su ayuda.

|Flashback|

— Entonces, ¿vas a cerrar el trato Yoongi?

— Claro que no mocoso, menos con alguien como tú.

— Bueno, si llegas a cambiar de opinión aquí está mi número.

— Sigue soñando enano, no estoy tan necesitado para llamarte.

|Fin de Flashback|

— ¿Me permiten un momento? — saqué el celular de mi bolsillo — Tengo que hablar con alguien — marqué el número.

[Jimin]

Ya había terminado con la plaga de niñas fuera de la escuela, estuvieron siguiéndome hasta mi casa, por suerte logré perderlas en un parque cercano.

— Llegué mamá — grité cerrando la puerta principal.

Nadie había contestado, lo más seguro es que mi mamá estuviera dormida, se cansa demasiado rápido, pero es normal, está enferma.

Me recosté en mi sillón y cerré mis ojos, mis piernas se relajaron de tanto correr y mi estomago crujía de hambre.
Entonces mi bolsillo comenzó a vibrar, revisé el celular y era Yoongi. Una sensación de nerviosismo y cosquilleo por todo mi cuerpo hizo que contestara la llamada.

— Quiero que vengas a mi casa ahora — exclamó con desesperación desde la otra línea.

— Es muy rápido para que seas mío, ¿no crees? — dije pícaramente.

— Déjate de juegos Jimin — murmuró — Necesito que cerremos el trato — dijo entre dientes.

— ¿Estás seguro de lo que dices? — dije aguantando mis ganas de gritar de emoción.

— Sólo dime en dónde te voy a recoger y cerramos el trato después — pude sentir su sonrojo.

[Yoongi]

Pasé por Jimin a su casa y salió con la mejor cara que le he visto en la vida, se había puesto un traje y olía a perfume, estaba mucho más apuesto de lo normal.

— No tenías que arreglarte tanto — dije rascando mi nuca.

— En el trabajo hay que estar presentables — sonrió de una manera atrevida.

— Sólo apúrate y ya — me di la vuelta y caminé rápido.

— Creí que traerías carro — dijo indignado — ¡Me duelen mis pies! — gritó cerrando sus ojos.

—No iba a traer auto cuando vives a tan solo diez casas de la mía — rodé los ojos.

Llegamos a casa y aún no estaba listo para presentar a Jimin como mi "novio". ¿Que pensaran mis padres de que su hijo tiene una faceta homosexual?

Entramos y todos voltearon a la puerta, haciendo que mis manos sudarán más de lo normal.

— Sunhae, mamá, papá y chica que no conozco — exclamé nervioso — Les presentó a Jimin, mi novio — dije lo último sonrojado.

— Mucho gusto, mi nombre es Park Jimin — dijo haciendo una leve reverencia.

•Renta de novio•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora