¿Casualidad o Destino? (#COD1)

Capítulo 16

-¿Qué te parece si llevamos toda esta nieve? – sugiere Alanna.

Yo amaba la nieve, pero 10 litros de pura nieve, era demasiado.

-Llevemos 3 solamente. 10 litros son muchos, ¿No crees? – mire su cara ponerse un poco triste.

Mierda, no me gustaba para nada esa carita, sabia como controlarme.

-Mierda, después me arrepentiré de esto, pero está bien, llevemos los 10 litros – acepte por el maldito soborno de su triste cara.

Alanna se pone feliz y salta de emoción, me da un gran beso, hizo que mi piel se estremeciera, o también podría decir que se derritió, como sea, el chiste es que sus besos me matan por completo.

Estuvimos en Walmart buscando alimentos, Alanna solo escogía pura comida grasosa: tocino, pan para hacer Hot-Dogs, pizzas pequeñas, las nieves, botanas, entre un montón de cosas más.

Yo, como chico saludable, decidí agarrar algo de frutas y verduras. Tenía que mantener mi cuerpo, no solo con ir al gimnasio se formaba este hermoso cuerpo.

-Ugh – dice Alanna al momento de ver las verduras.

-¿Qué pasa? – pregunte.

-No me gustan las verduras – admite.

¿No le gustaban las verduras? Esta loca, es algo riquísimo, o bueno, para mí lo es.

-¿Cómo se supone que tienes ese cuerpo? – entre en curiosidad.

-Me hicieron con ganas – responde ella en forma de juego.

-Enserio, ¿Cómo es que tienes ese cuerpo si solo comes la mayoría de las veces grasa? – dije en todo serio.

Ella lo noto, porque también se puso seria.

-Pues la verdad no se – tan tonta – solo de vez en cuando como bien, y hago un poco de ejercicio.

Yo quería ser como ella, yo si dejo de hacer ejercicio, mi cuerpo se pone flácido y delgado. También tenía que alimentarme muy bien, porque si no, ocurría lo mismo aunque estuviera haciendo ejercicio.

-Bueno, no importa, sigamos con la compra – le planto un gran beso en la frente.

Estuvimos paseando por el pasillo de cereales, cuando miro a Mike en la otra punta.

Tenía que quisiera hacer algo en contra de Alanna, de que se la quisiera llevar y yo por defenderla, pelearme con él.

Pero esperen, estaba alguien con ella que no era Jenny.

No podía distinguir muy bien quien era, estaba de espaldas. Su pelo y su forma de pararse, se me hacían familiar, muy familiar.

Se dio la vuelta, y pude ver su rostro, era Paulina.

¿Qué carajo estaba haciendo Mike con Paulina?

Tenía que averiguarlo.

-Alanna, vámonos, ya agarre todo en este pasillo – retrocedí y jale a Alanna.

-Pero Jake...

-Vámonos, Alanna – me miro con cara confundida.

Parecía como si estuviera huyendo de alguien, y si, si lo estaba haciendo, estaba huyendo de Mike.

Alanna solo me siguió.

-Alanna – escucho gritar a Mike.

Maldita sea, la alcanzo a ver.

Rápidamente, Mike y Paulina corrieron hasta donde nosotros estábamos. Yo me puse delante de Alanna para que Mike no intente hacer nada.

-¿Qué quieres, Mike? – pregunto serio.

Quería atemorizarlo para que se fuera lo más rápido posible.

-Quiero hablar con mi hermana – no se lo iba a permitir.

-No lo harás, no vas a controlarla más – dije.

Alanna me agarra del brazo y me dice con la cabeza que está bien, o eso entendí yo.

-¿Qué quieres, Mike? – dijo con frialdad.

Nunca la había visto así, me sorprendió la Alanna fría. Pero me gustaba, y mucho.

-Quiero que regreses a la casa hermanita – espero haber escuchado mal, porque yo no lo permitiría.

Estar con Alanna, me había controlado. Había desaparecido el chico que se acostaba con la primera mujer que se le pusiera enfrente, el chico que solo quería aventuras, al que le gustaba salir de fiestas y embriagarse. De ninguna manera iba a permitir que volviera mi otro yo.

-No me llames "hermanita" – eso fue demasiado cruel, incluso para mí – y no regresare contigo, estoy muy feliz con Jake.

Sus palabras me calmaron un poco, por un momento pensé que aceptaría.

-Por favor – da uno cuantos pasos.

Por lo mismo, yo doy otro paso para quedar frente de él.

-No, Mike. No molestes – dije – ella no ira contigo.

Se acerca Paulina – pero tu si iras conmigo.

Paulina intenta agarrarme el brazo, pero Alanna no se lo permite, ella se interpone y le detiene el brazo.

-Tu que tocas a mi hombre, y yo que te rompo esa carita que tienes – amenazo.

Estaba conociendo a una Alanna completamente diferente, sus celos eran demasiado hermosos.

-Ya te dije estúpida...

-No le llames estúpida – me puse frente de ella.

-Jake sigue siendo mío – le guiña el ojo.

-Sigue soñando – asegure.

-¿Acaso ya te conto del beso apasionado que nos dimos la otra vez? – mierda.

Alanna me volteo a ver, desconcertada acerca de lo que decía Paulina.

-¡Cállate! – dije furioso.

-Oh, veo que aún no le dices.

-¿De qué está hablando, Jake? – pregunta Alanna

-Estoy hablando de que Jake y yo nos... - la calle, pero ella no hizo caso a mi orden – nos dimos un beso, estaba en toalla y se miraba tan sexy.

Esas palabras hirieron totalmente a Alanna.

Duro varios segundos parada sin moverse, parecía estatua.

Salió corriendo.

-¡Eres una mierda! – le dije a Paulina.

Dicho esto, salí corriendo para alcanzar a Alanna.

Espero les guste :D

Les invito a leer mi nueva historia "Mejores amigos... ¿O algo más?" la pueden encontrar en mi perfil.

Voten y comenten, también compártanla si pueden<3

Para los del grupo de WhatsApp, ya saben, solo déjenme su número por mensaje privado junto con la lada de su país.