Soldado de Invierno.

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CONTENIDO Y LENGUAJE SEXUAL. LEER BAJO SU PROPIO RIESGO.

tags: misión, soldado, pelea, etc-

autor: spideystark-

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The Winter soldier.

-Hey muchacho a comer. –grite terminando de colocar la comida de Dogger en su plato, el salió de entre los arbustos sacudiéndose y corriendo hacia mí. Me coloque a su altura y acaricie su cabeza mientras comía.

Alce la mirada cuando oí unos pasos acercándose a mí. Fue cuando lo vi, entre los arbustos, estaba un hombre. Me puse en mis piernas rápidamente, aterrada, di unos pasos atrás cuando el desconocido avanzó hacia mí. Salió de entre las sombras y algo resplandeció.

No podía creerlo. Tenía un maldito brazo de metal. Llena de miedo, di media vuelta y comencé a correr a la puerta trasera, podía oír como el corría también hacia mí.

Entre a la casa y estaba por cerrar la puerta cuando un pie me detuvo, lo observe entre el cristal, era un hombre, alto, con mirada perdida incluso podía decir que malvado y ni hablar de su brazo biónico.

Quería llorar de verdad que sí, la desesperación estaba creciendo dentro de mí.

-¿Quién eres? –dije con voz temblorosa y los ojos llenos de lágrimas.

Pero el no contesto, si no que empujo la puerta logrando abrirla un poco más. Sabía que no iba a ganar contra él, tenía que correr y escapar. Avente la puerta contra su cara, esta dio en el blanco y aproveche para correr.

Corrí como nunca. Pero antes tenía que recoger unas cosas importantes del segundo piso. No me podía ir sin ellas.

Cerré la puerta de mi habitación, colocándole también un mueble contra la puerta. Ya más tranquila tome una mochila y comencé a colocar cosas en ella. Podía escuchar los pasos del desconocido en las escaleras y el pulso se me acelero. No podía dejar que me atrapara.

Golpeo la puerta un par de veces, temía que fuera a tumbarla pero los golpes pararon después de unos segundos. No escuchaba nada de él. Apreté la mochila entre mis brazos y pecho, mirando la puerta fijamente y con la respiración entre cortada.

Cuando todo se volvió negro. Una tela negra se envolvió alrededor de mi cabeza, dejándome indefensa, la mochila cayó al piso y comencé a lanzar golpes a todas direcciones.

Él me empujo contra la pared, golpeándome la cabeza en el proceso y aprovecho mi estado de debilidad para atarme las muñecas en la espalda.

Podía sentir su respiración en mi nuca, su pecho aplastando mis brazos y mi cara contra la pared.

-¿Dónde está? –su voz sonó como un gruñido. Me tomo de los hombros y me dio media vuelta, me empujo contra la pared y me quito la tela de la cabeza. Estaba mareada y desorientada, sentía que iba a vomitar.

Fantasies | sebastian stan | one shots|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora