Reinas VS. Playboys

Cap.3 Hasta nunca

POV. Carina

Me encontraba a las puertas de la casa de mi novio y futuro ex novio, si, lo voy a dejar estoy harta de todo lo dejé todo por él y así me lo paga, se cree que soy tonta y no se da cuenta de que me lleva robando mercancía desde hace no más de 2 meses más o menos.

Llamé al timbre y me abrió su ama de llaves Rosaline, me dejó pasar como siempre, pero esta vez fue diferente cuando me abrió la puerta era como si en realidad no quisiera hacerlo por precaución, como si me conociera tanto como para saber lo que tenía pensado hacer con su jefe.

me dirigí a el salón de donde prevenían ruidos, allí me encontré al desgraciado de mi novio con su familia a la que yo no conocí, pero la perra que estaba sentada en su regazo si.

- que estampa más enternecedora ¿no crees, Calum?

Él se puso tan pálido que parecía como si le hubieran tirado harina a la cara.

- perdona guapa pero ¿Quien eres?- me preguntó su madre.

- yo soy la novia de su hijo, la que pagó esta casa y la que dará fin a esta estampa familiar.

saqué mi arma una Glok 40 12mm.

apunté a la que estaba en el regazo de Calum y le metí una bala entre ceja y ceja, la siguiente fue su madre y por último su padre.

solo me quedaba Calum, le hice moverse hasta que quedara cara a cara conmigo, primero le partí la ceja derecha, la nariz tuvo la misma suerte que la ceja al igual que su boca que acabó su cara toda ensangrentada, mi siguiente blanco fue el torso le dí una patada en la boca del estómago con todas mis fuerzas, lo que provocó que se quedara sin respiración y seguidamente cayera de rodillas al suelo, no se si fue la rabia contenida de toda mi vida o no se el que pero esa sensación de adrenalina fue la que me impulsó a seguir con mi trabajo de matarlo con mis propias manos y no usando armas, como había hecho con su familia, no se si habían pasado horas o minutos pero la impresión que yo tuve fue que ya había terminado y que estaba exhausta, me retiré de la casa con la cabeza bien alta, todos los empleados me miraban con miedo en sus expresiones, al salir de la casa llamé a uno de mis mejores hombres para que se desiciera de los cuerpos, una vez se los llevaron, pasé en busca de una última cosa.

cuando llegué hasta mi destino, que era Rosaline, la cogí del brazo, ella me siguió hasta la salida una vez allí se montó en mi coche.

fuimos a mi casa donde ella se hospedaría hasta que supiera donde poder quedarse, Rosaline era una mujer que en parte me recordaba a mi madre, por lo que le tenía un aprecio especial.

cenamos en silencio, después de que le dijera donde dormiría, me fui a mi habitación me duché para quitar los restos de sangre y me puse unos de los pijamas más cómodos que tenía y me dispuse a dormir hasta que oí un ruido en la planta baja, no le dí importancia y seguí durmiendo.

me desperté y fui a ver que tal estaba Rosaline, lo que me encontré no creo poder borrar de mi mente era Rosaline muerta boca arriba y con unas grandes letras grabadas a conciencia en su plano vientre, la frase decía: "No te olvides de Alemania".