Tu eres nueva en una escuela preparatoria, todo es genial hasta que algunas de tus compañeras te advierte algo: Nunca te lastimes, nunca entendiste del todo esas palabras pero cuando tuviste un accidente te llevan enseguida hacia la enfermería.
Han pasado 6 años desde mi boda y mi entrada a la universidad, mi vida es algo alegre porque tengo un buen trabajo una linda casa y dos hijos una niña llamada Yang Mi y un precioso niño con el nombre de Min Ki.
Me hallaba en mi oficina en el hospital mas prestigioso de Seul era medico especialista en cardiología apenas tengo 2 años trabajando en eso y lo he hecho bien hasta ahora, Jin estaba en otra especialidad, los niños normalmente estaban en la escuela y uno de los dos teníamos que ir por ellos.
Como no tenia mucho que hacer tuve que ir por ellos, le dejo una nota a la oficina de Jin pero abrió la puerta dándome un beso en la frente.
Jin: Hoy te toca traer a los niños a casa.
Tn: Por si me ibas a ver te iba a dejar una nota, bueno te veré en casa.
Me despido dandole igual un tierno beso pero me toma de la cintura queriendo que este en su oficina pero me separo de el riendo.
Llego a la escuela donde espero a mis dos angelitos, miro el cielo un poco y cuando suena el timbre de salida veo salir primero a mis hijos corren al verme, salieron muy bellos como su madre y padre.
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El pequeño Min Ki
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Y Yang Mi
Tn: Hola mis bebes (besando su mejilla a cada uno9 ¿Como les fue hoy?
