VOICE ➳ LIAM PAYNE {COMPLETA}

capítulo 12.

  ¿Por qué niego una sensación tan linda como el amor? ¿Será una de esas cosas raras de adolescente que aún no comprendo? Qué vida, eh. Siempre que veía a mis primos mayores de Mullingar hacerse tantos problemas por este tipo de cosas decía: ya, supéralo. Ahora que lo pienso, no era en broma eso de "no escupas mantequilla al techo que te mancharás".
Aunque, no creo que sea porque el sentimiento no me guste, sino... sino... porque es nuevo. O eso creo. Es que nunca me enamoré. Lo único que llegué a amar, por así decirlo, fue un osito de peluche, y se terminó la lista.
Al mismo tiempo, esto del amor me ha estado curando. ¿Será que amor es lo que necesité?
El ruido de alguien tocando a mi puerta me interrumpió. Luego de decir—Pase—Niall entró con una media sonrisa en su rostro.
—¿Pasó algo?—pregunté. Él disintió y puso sus manos en los bolsillos de su jean.
—Sí, me gusta Natalie—dijo terminando la oración con un suspiro. Pegué un pequeño gritito y aplaudí dos veces debido a la emoción.
—Lo sabía.
—Es que... es raro, ¿sabes? ¿Y si no le gusto?—dijo comenzando a preguntarse a sí mismo—La conozco hace mucho tiempo, pero...—suspiró—no lo sé.
—¿Por qué no le preguntas?—dije crédula. Él me dedicó una mirada exagerada.
—No puedo. No quiero ser botado sin siquiera haber salido con ella.
—Ay, hermanito, si no lo intentas no sabrás que pasará—dije esperanzada. Ok, ¿de donde me salieron los consejos amorosos?
—Creo que lo haré—dijo con algo de miedo. Se quedó pensativo un momento y luego aludió:
—Tú aún no me has contestado algo—me replicó—Olive Sophia Horan ¿te gusta Liam?
Odiaba que usara mi nombre completo para interrogarme. Si será.
—No voy a decirte—dije cruzándome de brazos y dándole la espalda—James—agregué.
—Juro solemnemente no burlarme, no querer matarlo si es cierto—dijo transmitiéndome su confianza. Ay, cuando quería era persuasivo.
Resoplé y me di vuelta con los brazos colgando.
—Sí, me gusta—dije resignada.
—Ok, eso era lo único que quería oír—dijo con una sonrisa tonta—gracias—y como entró, se fue.
Genial, enloqueció. ¿Qué irá a hacer este chico? Que no me meta en un rollo de aquellos porque lo mataré. Ahora es cuando por fin puedo decir... ¿Por qué la vida es tan difícil?

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Unos días después, desperté para un día de escuela. Estaba muy entusiasmada, incluso con los exámenes encima. La música era algo que amaba, así que era pan comido para mí.
El otoño empezó a asomarse por Wolverhampton. Los días eran más fríos, las hojas comenzaron a tomar un color amarillento casi naranja y los días empezaban a durar menos. Tomé algo de ropa, la tiré sobe mi cama y me cambié. Decidí usar un par de jeans negros, una camiseta hasta los codos en rosa pastel, un suéter color crema con bordados y zapatillas rosas. Me puse brillo de labios e intenté por primera vez ponerme delineador, tal como Hannah me había enseñado. Me miré al espejo y era un cambio. Me veía linda. Natural, pero bonita. Sonreí con los resultados positivos de la primera vez que me he maquillado en mi vida. Até mi pelo con una coleta alta y salí del baño.
Llegué a la escuela con Niall y me acompañó a mi casillero. Puse la combinación y lo abrí. Dejé algunas cosas y tomé solo unas partituras, mi anotador y un bolígrafo. Apenas cerré el casillero, la imagen de Liam Payne estaba frente a mí. Su mirar tenía algo de nervios, pero siempre con ese toque de jovialidad. El corazón se me paró de repente.
—Oli, ¿puedo... puedo hacerte una pregunta?—titubeó. Asentí dándole oportunidad para hablar.
—¿Te... te gustaría salir conmigo?