Rodé mis ojos y caminé hacia mi asiento, logré ver la sonrisa burlona de Michael y justo cuando pasé, lo golpeé con el paquete de hojas.
No me molestaba trabajar con él, además me ayudaría más en mi objetivo. Aunque seguramente a él no le gustará nada tener que pasar tiempo conmigo.
El profesor siguió dando las indicaciones del trabajo, pero yo seguía en mi mundo.
¿Cómo era que no me había dado cuenta de que estaba en mi mismo salón? Según yo, solamente estábamos en Historia. ¿Por qué el idiota de Michael no me lo había dicho?El timbre sonó liberándonos de Física pero encadenándonos a la siguiente clase. Rápidamente el salón se vació. Tomé mi bolsa que estaba a mi lado para guardar el enorme paquete de hojas, pero este ya no cabía.
Caminé hacia mi casillero, dejaría la bestial guía ahí y antes de salir regresaría por ella, pero mi plan cambió. Al ir por el pasillo logré divisar a Ruggero en el que seguramente sería su casillero. Acomodé mi cabello mientras caminaba en su dirección.
- Aquí tienes. - le dije y él, al escucharme volteó. Le puse la enorme guía en el pecho obligándolo a tomarla. Me di la media vuelta y volví a caminar.
- Hey, hey, hey - sonreí al escucharlo llamándome, más mi nombre no es "Hey" así que no voltearía - Te estoy hablando. - dijo sujetándome del brazo.
- Disculpa, no recordaba llamarme "Hey".
- Bueno si... Tú, clon de Candelaria. - si seguía así me iba a hacer enojar - ¿Qué o quién te crees? - dijo con su ceño fruncido.
- ¿Eh? - dije sin entender.
- Yo no haré todo el trabajo, así que... - tomó bruscamente mi brazo para regresarme la guía. - ...Ten.
- Yo nunca dije que hicieras tú el trabajo. - le dije molesta - No cabe en mi bolsa y tampoco en mi casillero. - le informé - Así que guárdalo. - se lo regresé con más fuerza, aunque seguramente ni cosquillas le hizo.
- Yo no lo voy a guardar - ambos ya estábamos más que molestos.
- Bien, no lo guardes. - se lo quité de las manos y caminé hacia uno de los basureros, pisé la pequeña palanca para que se abriera la tapa y lo dejé caer. - Listo... - volteé hacia el - Problema solucionado. - sólo porque su mandíbula estaba sujeta a su cabeza, si no está hubiera perforado el piso.
(...)
- Parece que alguien se topó con la horma de su zapato. - se burló Michael.
- No estoy para bromas. - le dije molesta, en realidad no lo estaba.
- ¿Qué pasó? - preguntó divertido.
- Le di la enorme guía de Física, no la quiso guardar, yo tampoco así que la tiré a la basura. - le conté.
- ¿Si escuchaste que valía como examen final? - me recordó.
- Sí, pero prefiero reprobar la materia antes que...
- Antes de tragarte tu orgullo. - no eran las palabras con las que iba a terminar la oración, pero estaba en lo correcto. - Te veo mañana. - dio un beso en mi frente antes de irse.
Continué sacando todas las cosas de mi casillero, solo dejaría los libros. Era un desastre, tenía ropa, zapatos, maquillaje prácticamente de todo. Como pude cargué todas mis pertenencias, cerré el locker y casi todas mis cosas caen al suelo, al encontrarme con Ruggero detrás de la puerta.
- ¿Qué quieres? - le dije de mala gana.
- Mira... Creo que tienes una idea de lo mucho que me molesta tenerte cerca... - el tipo hablaba pero la verdad sus palabras me entraban por un oído y salían por el otro. Yo estaba completamente perdida en él, su chaqueta de mezclilla estaba abierta dejando ver su anatomía solo protegida por una camisa blanca, que para mi mala fortuna, en esta se marcaba su bien definido abdomen –¡Concéntrate!– reprendió mi voz interior - ... no reprobaré esa materia por tus estúpidos caprichos, así que tu harás la mitad y yo la otra mitad. - fue lo que logré escuchar al lograr "concentrarme". Me entregó la mitad de las hojas.
- No, no, no. - negué seguidamente. - No me arriesgaré a que respondas mal y la calificación sea para ambos. - soltó una carcajada amarga - Le sacaré copias y trabajaremos por separado.
- ¿Qué no me escuchaste? - dijo molesto - ¡Te acabo de explicar que no se puede! - habló con desespero - ¿Qué no puedes dejar de pensar en ti por cinco minutos? - pasó su mano rápidamente por su cabello con frustración -Si supieras en lo que pensaba...- reí estúpidamente por dentro.
- Entonces lo siento. - dije hipócritamente - Tendremos que trabajar juntos, aunque no te guste. - sonreí duramente - Yo tampoco reprobaré por tus caprichos. - da lo mismo si repruebo por mi culpa, pero si es solo porque al "niño" le molesta estar cerca de mí, no da lo mismo.
Haciendo un gran esfuerzo de no caer con la montaña de cosas que traía en mis manos, le entregué las hojas.
- Mañana, ¿tu casa o mi casa? - pregunté caminando, dejándolo atrás. Soltó un gruñido y se escuchó un fuerte golpe en uno de los casilleros, sonreí victoriosa.
- No puedo, trabajo. - escuché sus pasos detrás de mí.
- ¿Tú casa, mi casa o reprobamos? - repetí.
- TRA BA JO. - repitió igual separando en silabas.
- FAL TA. - le respondí igual.
- Yo si soy responsable. - dijo mientras salíamos del edificio.
- ¿Cuántos años tienes? ¿Sesenta? - volteé a verlo, podría jurar que me detesta aún más que Candelaria.
Regresé mi mirada al frente pero no fue lo suficientemente a tiempo ya que choqué con alguien, y esto hizo que todas mis cosas cayeran al piso.
- ¿Por qué no te fijas por dónde vas? - me dijo de mala gana Lionel.
- ¿Y tú porque no te quitas de mi camino? - le dije de la misma forma, mientras me agachaba para recoger mis cosas - Lo bueno es que estoy rodeada de caballeros. - dije sarcásticamente casi en un grito, refiriéndome a Ruggero y Lionel que solamente veían mis cosas esparcidas por el piso. De pronto un par de chicos llegaron presurosamente para ayudarme. - Gracias. - tomé nuevamente todo en mis brazos.
- Si quieres te ayudo hasta tu auto y no sé...
- Lárgate. - dijeron Ruggero y Lionel al unísono.
- Tengo que hablar contigo ahora mismo. - ordenó Lionel y sólo solté una carcajada.
- Me encantaría pero... - dije sonriente - no, ¿sabes? - puse una cara pensativa - No me encantaría y tengo muchísimas cosas más importantes que hacer que escucharte. - le sonreí ampliamente - Mañana me dices que decides. - le dije a Ruggero y reanudé el caminar hacia mi auto.
Dentro de poco llegamos a 1K de vistos💕 Qué lindooo, gracias por leer la novela 💚
Instagram: ruggarolsevirelli
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Me, myself & I (Ruggarol) TERMINADA.
FanfictionLa envidia de cualquiera de su mismo sexo, y el deseo del masculino. Excepto uno... Por una apuesta para recuperar a su ex, se terminaría fijando en quién muy pronto sería alguien más importante para ella, pero... ¿Qué pasaría si lo pierde? ¿Qué pas...