Me levanté normal, hoy regresábamos delas vacaciones decembrinas, reanudando con etimologías y literatura Romana, Adrien tenía que llegar temprano para hacer unas exposiciones y yo tenía permitido llegar hasta las 8:30. Terminé de bañarme y fui a mi armario por mi ropa; una camisa blanca de manga larga, jeans negros, tenis blancos y un suéter gris de grecas blancas, me miré una vez más al espejo, ya no tenía ojeras, mi color de piel ya era normal, estaba completamente descansado...me sentía mejor.
Salí de mi recamara y me dirigí a mi salón, cuando sentí unos brazos rodearme por completo.
- Perdona no poderte haber visitado, tenía unas cosas que hacer- era Chris, me volteó y me dio un beso en la frente.- ¿Cómo la pasaste? Perdona si te dejé muy solo- dijo volviéndome a abrazar.
- No, no te preocupes, no estuve tan solo.
- ¿La pasaste con tu familia?
- No, mis papás se fueron de viaje
- ¿Amigos?
- Se quedaron con su familia.
- ¿Adrien?
- Vino su amigo desde Japón y se escaparon una semana al lado Oeste, llegando hasta Nueva York
- ¿¡Entonces?! ¡Mierda bebé me preocupas!- dijo haciendo un aspaviento y cruzando los brazos.
- N-nadie importante.
- Me estas mintiendo- dijo acorralándome contra la pared del pasillo, posicionó sus brazos a la altura de mi cabeza y acercó su cara a la mía.- ¿Con quién estuviste, hm? ¿Acaso estuviste con Bastian o Peter, cualquiera de ellos es mejor que yo no?- dijo escupiendo sus palabras, estaba enojado y o sabía por qué.
- N-no digas eso Chris, e-eres mi amigo y n-no eres s-solo uno- dije con la voz titubeante.
- Entonces dime...¿Acaso no soy lo suficientemente importante para ti?
- E-Estuve c-con Teufel...-dije cerrando los ojos, Chris quitó las manos y se apartó, caminó en dirección opuesta al salón y lo seguí.- ¿Chris? ¡Chris! ¡P-Por favor n-no vayas con él!
- ¿¡Y qué si voy?! ¡Ese bastardo ni siquiera debería verte a los ojos después de lo que te hizo! ¡NI SE TE OCURRA DETENERME!- dijo caminando sin siquiera voltear hacia mí.
- T-Te lo pido por favor, n-no hagas nada estúpido- dije tomándolo del brazo.
- ¡CÁLLATE! ¡ESE BASTARDO JAMÁS DEBIÓ HABERTE CONOCÍDO! ¿¡ACASO ERES SU MASCOTA PARA QUE HAGAS TODO LO QUE DICE!?
- C-Chris p-por favor no grites...c-cálmate.
- ¿¡CALMARME?! ¡NO HASTA QUE ESE HIJO DE PUTA SE ALEJE DE TU LADO MICHAEL! ¿¡ES QUE ACASO NO LO ENTIENDES?!- dijo empujándome, cayendo al piso de sentón y quedando con la mirada en él.
- ¡E-El que no entiende e-eres tú!... ¡B-Basta! ¿¡Acaso yo te estoy gritando por todo lo que me has escondido de ti y de lo demás?! ¡Yo soy el que debería reclamarte pero no lo h-hago!- me prometí no llorar, me prometí que no lo haría más, pero ver a Chris así me hacías sentir mal, no era mi culpa, pero tampoco salía limpio ¿Si era mi culpa que estuviera así por mí? Si, si era mi culpa.
- No sé de qué me estás hablando...
- ¿A-Acaso no eres un demonio como Teufel...como los demás?- dije levantándome lentamente.- N-No me mientas... ¡N-no me m-mientas!- dije entre lloriqueos e hipidos. Me cubrí la cara; estaba cansado, cansado de ser un niño chiquito que llorará por todo, Teufel me lastimaba, Christian y los demás me mentían y ya no tenía a nadie cerca, ¿podía confiar en alguien?
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DIABLO
General FictionUna pequeña alma que poco poco se apaga, sus últimos suspiros los daba en un maldito cuarto de hospital. Mientras tanto un ser despiadado que busca un esclavo que sacie sus deseos y más crueles fantasías, sucumbirá ante el encanto del pequeño...pero...