ONE-SHOT

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EEEEEEEEEEEEEEEEEESTA ES UNA NUEVA DINAMICA, EN LA CUAL ESCRIBIRÉ HISTORIAS CON LOS PERSONAJES DE ESTA HISTORIA, PERO NO AFECTARA EN NADA AL RUMBO QUE LLEVA, POR EJEMPLO: ESTE SERÁ UNA VERSIÓN DE CAPERUCITA ROJA UN POCO CAMBIADA, ASÍ QUE SI LES GUSTA ESTA DINAMICA LA SEGUIRÉ HACIENDO, ASÍ QUE GIVE ME ALLLLLLLL YOUR VOTES IF YOU LOVE IT!!! (ESTOS SERÁN NARRADOS POR NARRADOR OMNIPRESENTE, SEASE SIN QUE ALGUN PERSONAJE LO NARRE)

En una vieja aldea cerca de la montaña, ya hace vario tiempo, cerca del 1804; vivía un chico de cabello castaño y de ojos verdosos, llamado Mikey. Sus padres eran leñadores y él se encargaba de ayudarles a vender la madera, además de que el vendía pan y pasteles para ayudar con los gastos. Mikey era un chico muy amable y bondadoso, sin duda alguna dispuesto a ayudar al prójimo.

Todos en el pueblo lo querían y en verdad lo estimaban; sobre todo por algunos chicos del pueblo que lo pretendían; eran la mayoría más grandes que él per de buenas familias.

Christian, que era hijo del dueño de la librería, muy culto, alto, rubio y con un gran carisma. Bastian y su hermano Peter, uno el cual era un escritor y poeta y el otro que fascinaba de cocinar, hijos de una panadera y un escritor. Aku, hijo de un arquitecto, Hust, hijo de un músico y de una cantante y Thomas, el cual su padre era el médico del pueblo. Cada uno pretendiendo al menor con sus diferentes encantos, sin que Mikey cayera por ninguno.

Se encontraba en la plaza del pueblo, sentado en la fuente leyendo un libro, cuando, de entre los edificios y la paz, se escuchó un grito proveniente de una mujer.

- ¡Ayuda! ¡Una bestia ha atacado el rebaño de ovejas y se ha comido a las gallinas!- gritó la señora que llegó a donde se encontraba lo que parecía ser su hijo, el cual la acompañaba junto con varia gente del pueblo. Mikey cerró su libro y corrió detrás de la muchedumbre.

Al llegar a la escena se encontraron con el terror; las ovejas completamente devoradas, ya séase por partes o solo dejando la cabeza y un cuerpo sin carne, la lana estaba teñida de un carmín y junto con algunas partes del pasto. Las moscas rondaban por los cadáveres de estas y el viejo hombre estaba de rodillas viendo a su rebaño asesinado.

- ¡FUE LA BESTIA! ¡FUE EL HEYVAN!- grito desde la posición en la que se encontraba, tirado en el suelo al lado de un cadáver de su rebaño.

- Cariño...no puedes aseverar esto, pudo haber sido un lobo o un oso hambriento- dijo su mujer al lado suyo tratando de reconfortarlo, su hijo, un chico de ojos avellana y cabellera castaña clara, casi rubia; Adrien.

- Ya padre...verás que haré lo posible por sacar dinero de lo que sea que pueda hacer; iré al pueblo vecino por unas cuantas y comenzaremos desde cero- dijo su hijo colocándose a su altura y dándole un fuerte abrazo. Mikey después de ver la escena. Se alejó de la multitud para acercarse un poco más a la cerca de lo que era el campo para pastar del ganado asesinado; cada una de ellas, despedazadas y algunas completamente vacías.

De regreso al pueblo la gente comenzó a murmurar: la bestia volverá, fuimos advertidos hace mucho tiempo; debimos haberles hecho caso, ¿ahora qué haremos?, ¿y si no solo es al ganado?, se comerá a nuestros hijos.

Mikey caminó directo a la biblioteca de la familia de Chris, haciendo sonar la campanilla y haciendo que un hombre con lentes, cabello blanco y barba, se desviase del libro que nenía en las manos.

. Mikey, tanto tiempo sin verte- dijo el hombre sacando una sonrisa a relucir.- ¿Terminaste el libro que te di ayer?

- Todavía no, solo me faltan unas páginas, pero quería un lugar más tranquilo para leer, hay mucho alboroto afuera.

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