- Con Teufel...
- ¡¡¿¿QUÉ??!!...Jejeje...me diste un muy buen susto Mikey, es más, creo que hasta risa me dio; pero ya hablando en serio, quiero saber dónde estuviste anoche- dijo acomodándose el cabello y sentándose en la cama.
- No te estoy bromeando...estuve con Teufel- dije sentándome a su lado, automáticamente su expresión divertida cambió a una de enojo.
- ...¿¡QUÉ HIZO ESE BASTARDO?! ¡NO SE LA VA A ACABAR ESE MALDITO HIJO DE PUTA, JURO QUE SI TE PUSO UN DEDO ENCIMA LO VOY A MA- le cubrí la boca y lo interrumpí.
- Primero déjame contarte o que pasó...por favor...- le quité la mano y me miró dudoso, para luego asentir y mirarme de frente.- Bien...al subir al baño un chico apareció y me consoló un poco, para después drogarme y llevarme a una de las habitacio- me interrumpió.
- Te dije que ese bastardo no iba a ca-
- No era Teufel...ese chico me llevó a la habitación y estaba a punto de violarme; Teufel fue quien me salvó...de ahí me llevó de regreso y me llevó a su cuarto; ahí me prestó ropa y me acostó en su cama. Hoy en la mañana me levanté sin recordarlo y ver a Teufel...me aterró, pero si recuerdo cuando ese chico me llevó al cuarto y no recuerdo más...no tuvo nada que ver, tarde más porque me preparó el desayuno...
- Hmmm...no sé, suena que estuvieses hablándome de otra persona, no de Teufel...Mikey ¿Seguro que estas bien?- dijo acariciando mi mejilla.- En verdad, si fuiste a casa de algún chico no me voy a sorprender; en esas fiestas te emborrachas y de vez en cuando te acuestas con alguien, no tienes que ponerme pretextos..
- Si, no te estoy mintiendo...de no haber sido por él...ahhh...pero no quiero que le digas a nadie; esto es entre nosotros, te lo cuento porque te tengo mucha confianza Adrien...- me abrazó y me repitió una y otra vez que gracias, que él igual me quería de esa manera y que si estaba bien, el igual.
-Muy bien...te creo, pero no voy a dejar que termines como la otra vez; si hace una cosa la cual te haga sentir triste, yo mismo me encargaré de su cuerpo...y tú de la pala.
- Jejejeje, si claro Adrien, no olvides el ataúd- dije levantándome de la cama y entrando al baño.
Domingo, fui a visitar a mis padres, ya que desde que habían regresado de sus vacacione y yo con la universidad tenía menos tiempo sin verlos.
Al entrar a casa, me topé con un bello florero de color jade con decoraciones en negro, viendo esas flores que seguían como nuevas desde el día que "alguien desconocido" me las trajo a la puerta de la casa; me pidieron que me quedara en casa a cuidar a Moka mientras ellos salían por la cena. A la media hora de que se fueran escuché el timbre y fui a abrir la puerta; era ese demonio con el que había pasado la noche: Teufel.
- Hola...fui a buscarte a tu cuarto pero el rubio me dijo que no estabas...supuse que habías salido y...vine aquí- vestido con un pantalón ajustado negro, una camisa de tirantes blanca y unos tenis del mismo color.- ¿Puedo...pasar?
- S-Seguro...- dije haciéndome a un lado y dejando que pasara.- Mis padres volverán un rato con la cena...así que, s-si no tienes nada que hacer t-te puedes...q-quedar a cenar...- mire sus hombros y los tatuajes que los adornaban.- Nunca los había visto hasta ayer q-que no traías ca-...c-camisa- dije acercándome a su hombro derecho y tocando la calavera que tenía en él.
- Nunca dejo que los vean...son...algo excéntricos, más el del cuello- dijo dándome la espalda y mostrándomelo.- Junto con el del costado son los más extravagantes que tengo...digamos que la gente no los ve muy normales...
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DIABLO
Ficción GeneralUna pequeña alma que poco poco se apaga, sus últimos suspiros los daba en un maldito cuarto de hospital. Mientras tanto un ser despiadado que busca un esclavo que sacie sus deseos y más crueles fantasías, sucumbirá ante el encanto del pequeño...pero...