ONE-SHOT PARTE 2

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- E-Eres tú...e-el H-Heyvan...- dijo repitiendo las palabras y señalando al joven que se encontraba enfrente de él.

- Si...pero prefiero que me llamen por mi nombre.

- S-Si claro...T-Teufel...

- ¿Estas mejor?- dijo colocando su mano en su frente y luego en su mejilla.- Te encontré en el bosque a punto de ser devorado por un oso...estarás mejor en dos semanas.

- ¿Q-Qué? N-No no puedo quedarme aquí- dijo tratando de levantarse pero cayó al suelo tan solo al apoyarse con su pierna lastimada, el joven lo tomó en brazos y lo volvió a dejar en su lugar.

- No...tienes que reposar; tu hueso se rompió en dos y tu brazo le falta un pedazo de carne...suture lo que pude y tu pierna ya no está rota; necesitas reposo- dijo levantándose junto con la lámpara de aceite y prendiendo otra. La cueva era muy grande; el lugar en donde se encontraba Mikey acostado era la cama, tenía varias pieles de animales y cobijas de lana, había algunos muebles tallados a mano y una fogata en medio.

- P-Pero...necesito volver a casa.

- Escucha niño; soy el único que sabe cómo volver, si quieres irte vete, pero no llegarás a ver más que bosque y algún otro animal además del oso del que te salvé...reposa y cuando estes mejor te llevó a tu hogar...

- Ahhh...esto es increíble; estoy en una cueva con un brazo a medias y una pierna rot-... ¿cómo hiciste para que mi pierna?...- dijo razonando lo anteriormente dicho por el joven; tu pierna ya no está rota...

- ¿ES EN SERIO...Estas en una cueva en las montañas, con una bestia que se transforma en un humano...y te preguntas eso?- dijo volteando con una cara de desconcierto brutal, Mikey a su reacción, sonrió y soltó una pequeña risilla.

- Jejejeje...tienes razón...pero también estoy con un asesino- dijo seriamente hacia el joven que le daba la espalda.

- ¿Disculpa?

- Si; mataste a todo el rebaño de mi amigo, sin dejar ni una sola... ¿Sabes? Hoy traeríamos más ganado para que ellos pudiesen subsistir; todo es tu culpa...- la bestia suspiró y se colocó enfrente del menor.

- Mira, ahora los animales son menos; el clima ha hecho que invernen o se muevan a lugares con climas más calientes...ya no me satisface comer bayas o frutos en mi forma humana, los venados cada vez son menos, tengo que dejar que vuelvan los que se fueron y dejar que se reproduzcan para que se compense el daño...mira; me disculpo por mis acciones...después de tanto tiempo todavía no sé cómo controlarme...es parte mi culpa que la población de herbívoros disminuyese...y ya que no me puedo mover de aquí...Pero nada de eso se compara a lo que hicieron ustedes.

- ¿Perdona, lo que hicimos?

- Ustedes mataron a mi gente, mataron a los que protegía; mi pueblo. Ellos y yo no teníamos ni un poco de parentesco, ellos humanos y yo una bestia, pero no me temían, me veían como una bestia protectora...alguien amigable...y ustedes llegaron con sus rifles, dinamita y armas, a matarlos y hacerlos sus bufones y esclavos... ¿Y yo soy un monstruo?...toda la felicidad que me quedaba y ustedes por su maldito egoísmo y sed de conquista los mataron ¿No pudieron vivir junto a ellos? ¿Acaso era tan necesario verlos como seres inferiores a ustedes? Creo que en su sabiduría y conocimientos pacíficamente les hubiesen dado tierras para que pudiesen vivir...pero no- el joven se acercó al castaño hasta quedar cara a cara.- ¿Y me dices a mí que no tengo perdón de nadie? Ustedes son más asesinos que yo contando toda mi vida- dijo levantándose y dándole la espalda de nuevo.

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