Capítulo 5: "Sentimientos extraños"

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Un grupo de chicos vestidos con sus trajes de baño se encontraban en el borde de la playa formados en equipos para entrar a la misma.

Como solo somos 5 equipos, será una lucha todos contra todos, decía Vegueta mientras los demás jóvenes que no participaban murmuraban entre ellos.

Milk es hermosa, vaya que bien escondiditos tenía sus atributos, decía Yamcha mirando de pies a cabeza a la pelinegra.

Suerte la de el estúpido de Son que la tendrá tan cerca de él, decía con molestia Freezer.

Que linda es Bulma, decía Majim boo mirando a la peliazul.

La verdad todas las chicas se ven hermosas, dijo Cell mirando a sus compañeras.

Y los chicos, no se quedan atrás, dijo una chica de cabello lila, mirando a su compañeros mientras Lunch y Marón asentían y un jovencito regordete ya iba comiendo su sexta hamburguesa.

No se que les ven, yo soy mejor, dijo Yajirobe haciendo que las tres chicas voltearán a verlo y sonrieran.

Mientras tanto:

Milk estás lista, dijo Gokú colocándose en cuclillas para que la pelinegra subiera a sus hombros.

Si, dijo Milk.

Milk, más tarde me das los folletos, dijo Gokú.

Esta bien, más tarde te los doy, dijo la pelinegra subiendo a los hombros del joven de cabello alborotado que sintió su corazón acelerarse al tener tan cerca de su amada.

Los jóvenes ingresaron dentro de la playa las chicas que iban sobre los hombros llevaban una especie de palos con puntas protegidas para con ello tratar de derribar a su rival.

Vegueta y Bulma, luchaban contra Cirys y Diecisiete, Mientras Gokú y Milk lo hacían con Krilín y Mai y Broly y Dieciocho.

Cirys trataba de lastimar a la peliazul con el palo que llevaba en las manos, pero gracias a los buenos reflejos de Vegueta, él evitaba que la peliroja golpeara a su novia.

Por su parte Gokú y Milk ya habían derrotado a Mai y a Krilín, quedando solo combatiendo con Broly y Dieciocho.

No te preocupes Mai diste lo mejor, dijo el pequeño calvo sonriendo.

¡Gracias¡ dijo Mai apenada.

Si hubieras combatido conmigo no hubieses perdido, dijo irónico Túrles mirando a Krilín.

Pues tú no me lo pediste, además no fue culpa de Krilín sino mía, porque no se de luchas, dijo Mai pasando molesta junto a Túrles yendo a sentarse con su amigas.

Ni pareces primo de Gokú, dijo Krilín mirando con molestia al moreno yendo junto a su grupo de amigos a ver el desenlace de la batalla.

Eres una tramposa, se quejaba Bulma al haber recibido un golpe en el brazo con el palo que sostenía Cirys.

Ustedes están descalificados el golpe se da al palo, no al cuerpo, dijo Vegueta con molestia.

Yo no tengo la culpa que tu novia sea una inútil y no sepa esquivar los golpes, decía Cirys irónica.

Bulma no es ninguna inútil, están descalificados, dijo Vegueta con firmeza.

Él tiene razón Cirys, el combate es con el palo, dijo Diecisiete lamentándose mientras se agachaba para que la peliroja bajase de sus hombros.

¿Estas bien linda?, ¿crees que podamos seguir?, dijo Vegueta.

Si, si podemos, además mira ya tenemos finalista, dijo la peli azul sonriendo al ver caer a su rubia amiga al agua.

¡Discúlpame Dieciocho no medí mi fuerza¡ decía dulcemente la pelinegra.

No te preocupes, ya me estaban doliendo los brazos, dijo la rubia parándose del agua con ayuda de Broly y saliendo de la playa.

Bueno, solo quedamos los cuatro, dijo Gokú sonriendo mirando a Vegueta.

Pues que ganen los mejores amigo, dijo Vegueta.

Así será, dijo Gokú empezando una nueva lucha con la pelinegra sobre sus hombros.

Milk y Bulma median sus fuerzas con la ayuda de los palos, mientras Gokú y Vegueta probaban la resistencia de sus piernas en el agua así como sus fuerzas para sostener a las chicas.

Luego de algunos minutos, la peliazul cayó a los brazos de su novio, terminando ganadores Gokú y Milk quienes se abrazaron mutuamente sintiendo con aquel pequeño actos sensaciones extrañas dentro de ellas.

Horas más tarde:

Un par de pelinegros se encontraban sentados en una mesa mirando algunos folletos.

Esta me parece interesante, decía Gokú.

Yo también pensé en ella, dijo Milk sonriendo.

De ser así seguiremos viéndonos en la universidad, dijo Gokú mirando cada facción de su bella amiga al igual que ella lo miraba con detenimiento a él, cuando escucharon.

Chicos hoy por la noche la marea estará alta, se les recomienda no salir caminar por la playa, ni hacer fogatas, será mejor que permanezcan en sus habitaciones, decía uno de los tutores.

Si chicos duerman temprano y no estén observando por las ventanas, no es recomendable cuando el mar se pone bravo, decía la anciana.
¿Y cuánto durara esto?, dijo Freezer.

Solo será por hoy, dijo la anciana.

Adiós fogatita, dijo Yamcha sonriendo.

Ya Yamcha, en cuanto baje la marea podrás hacerla, dijo Ten sonriendo mientras Piccolo asentía.

Por la noche:

El viento soplaba fuerte, golpeando las ventanas de las habitaciones donde los jovencitos descansaban.

El sonido de las olas parecía música para muchos de ellos que llevados por la suave melodía que producía el sonido de las olas y el viento haciendo caso omiso a las advertencias se asomaron a la ventana.

Que linda melodía, decía una pelinegra mientras una peliazul asentía asomándose a la ventana mientras una rubia dormía profundamente.

Al igual que ellas otros jovencitos miraban a través de su ventana las gigantescas olas.

Kakaroto ven a mirar, decía Vegueta.

No gracias, dijo Gokú continuando su sueño.

Déjalo, él se lo pierde, decía Krilín sonriendo.

Al día siguiente:

Un par de chicas se levantaban de su profundo sueño mientras una rubia las miraba sonriendo.

¿Qué les paso?, ¿ni que se hubieran desvelado?, decía la rubia.

¿Pasarnos?, dijo la pelinegra.

Si pasarles, ya son las 11 am y tu Bulma nunca te pierdes un desayuno con tu Vegui y tú siempre madrugas en la preparatoria y aquí no sería la excepción para llegar diez minutos antes y hablar con Gokú, dijo Dieciocho sonriendo.

¿De qué estás hablando Dieciocho?, Vegui y yo no somos nada, dijo Bulma mientras una extraña opresión sentía en su pecho al decir eso.

¿Cómo que no son nada?, es tu novio, ¿o discutiste con él por lo de Cirys?, dijo la rubia desconcertada ante la respuesta de su amiga que solo la miro igual de desconcertada.

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