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Caminé por el pasillo de la escuela, hacia mucho frío y según las noticias había probabilidad de que nevara, iba totalmente solo buscando a Jaime o Jenna para decirles que si querían ir conmigo por un café o algo caliente. Kellin normalmente me evita en la escuela, dice que no quiere que me señalen por juntarme con él, todavía no entiende que no me importa lo que digan si a él lo hace feliz.

Choqué contra un gran cuerpo que estaba de espaldas, sentí como empujaba a esa persona hacia enfrente. En seguida llego a mi cabeza la posibilidad de haber golpeado a Oliver y así fue.

Extendí mi mano para tratar de ayudarlo pero me ignoró, se veía la furia en su cara, era mi momento para salir corriendo tratando de defender mi vida pero las piernas no me estaban funcionando, posiblemente por el gran miedo que él me transmitía.

—¿Puedes tener más cuidado? —. Gritó empujandome

—Si, lo siento —. Miré sobre su hombro y vi a Andy parado detrás de él, eso explicaba su enojo

—¡Largate de aquí! —. Volvió a gritar

—Tranquilo, fue un accidente, lo lamento

—Vic, no me hagas enojar —. Dio un paso hacia mi

—Oliver, sabes que no te tengo miedo —. Mentí pero lo dije firme, casi yo mismo me lo creí —No se si a Andy le vaya a gustar tu comportamiento —. Se enojó aún más

Me empujó tirandome al piso, Andy lo agarró del brazo pero sinceramente no iba a conseguir detenerlo mucho. Cubrí mi cara con mis brazos y traté de pararme e irme pero fue en vano. Todos los alumnos que estaban en los pasillos gritaban que querían ver una pelea.

No estaba seguro de si Oliver era realmente capaz de golpearme, tal vez sólo estaba tratando de amenzarme. Aunque parecía demasiado enojado para ser esto sólo una amenaza.

—¡Vic! —. Gritó Kellin, todos se callaron casi instantáneamente y voltearon a verlo —¿Qué pasa?

Oliver se quitó de encima de mi y aproveché para pararme. Tomé a Kellin de la mano y comencé a caminar con él, se notaba que no se sentía cómodo con tanta gente mirándolo y no quería que se sintiera mal por mi culpa.

—¡Espera a que se entere, Fuentes! —. Gritó Oliver, traté de ignorarlo pero fue complicado no ponerme muy nervioso por ese comentario.

No podía decirle a Kellin, él me odiaria por el resto de su vida y yo jamás podría perdonarme haberle hecho esto. Sabía lo mucho que a Kellin le iba a lastimar si se llegaba a enterar que estuve jugando con él, que sólo fue parte de una apuesta. Eso no es del todo cierto, si siento afecto por él, si no fuera así jamás lo habría llevado a mi casa ni habría hecho nada de lo que he hecho por él, igual no estaba seguro de si Kellin podría entender eso.

Jamás iba a aceptar que por culpa de él rencoroso de Oliver se viniera abajo todo lo que trato de hacer por Kellin y lo que había conseguido con él, que de algún modo era más que una simple amistad.

—Espera a qué se entere... ¿quién y qué? —. Preguntó

—Es algo de Jaime, nada importante —. Le sonreí tratando de verme sincero

—Esta bien, prometeme que no te pelearán con nadie mientras estemos lejos

—Lo prometo, pero ¿Ya para qué te alejas?

—Ya te he dicho

—No, ya no quiero ese pretexto

—Lo pensaré —. Dijo

Miró para ambos lados, se aseguró de que nadie nos viera, me sonrió y besó antes de irse. Quería que se quedará conmigo no porque lo quisiera cerca exactamente, si era una razón pero no era la principal, lo principal era que no quería que estuviera solo porque era más fácil para Oliver acercarse a él y decirle.

Happy Boy. [Kellic]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora