Extra 1

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¿Extra? ¿Qué es eso? Se preguntarán... Pues verán, los extras son unas aclaraciones que quería hacer al final de la historia por algunas cosas que me imagino que no sabrán porque nunca escribí  de ellas (que obvio ha sonado esto). Pero bueno, según los lean sabrán a lo que me refiero.

Solo subiré un  par de ellos, espero que disfruten lo poco que queda por saber de esta historia ;)

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Ha llegado el gran día, o eso es lo que dice todo el mundo. Yo la verdad es que no estoy muy segura de ello. Para ser exactos: nunca estuve segura. En su momento lo tenía muy claro, nunca había tenido nada más claro en la vida. Quería abortar.

Pero claro, era él suplicándome que no lo hiciera, que dejara nacer a esa criatura que tenía creciendo en mi interior. Me prometió que no nos faltaría nada a ninguno de los dos, que se encargaría de nosotros... o nosotras. Quería formar una familia, pero yo no, aunque al final cediese, nunca quise.

Y aquí estoy yo ahora, con contracciones mucho más seguidas y mucho más dolorosas que las anteriores. ¿Cuándo va a acabar este sufrimiento?

Dos horas más tarde doy a luz. Es una niña, dice el médico. A mí la verdad es que no me importa mucho.

Según mi marido me la trae me fijo en como la mira, en como la mira con esos ojos con los que normalmente me mira a mí, en como le empieza a decir cosas tiernas, como empieza a decirle que es su princesa, como le da besos en la frente, como le dice que la quiere. ¿Por qué? ¿Por qué a ella y no a mí? Me intenta dar a la niña, yo la rechazo.

El médico dice que lo que tengo se denomina "depresión post-parto". Si es así, espero que se me pase pronto.

Pasan los años, y mi rechazo hacia esa niña sigue igual. Odio como va corriendo a saludar a mi marido cada vez que llega, odio ver como le llena de besos con esa boca llena de babas, odio ver como se lo lleva a jugar y lo aleja de mí. Odio ver como me quita lo que más quiero y más amo en esta vida.

Odio a esa niña.

Encuentro un refugio en el alcohol y las drogas. Sé que no es lo mejor para mí, pero así me distraigo, así no lloro. Así los gritos y llantos de esta niña no son más que un sonido de fondo que se calma con dos golpes bien dados, así la niña aprende a respetarme y a hacer todo lo que le ordeno, así mi marido me presta más atención. Así todo parece un mundo mejor.

Siguen pasando los años, sigue pasando el tiempo. Hoy la niña cumple 10 años. El padre ha querido apuntarlo en grande en el almanaque y con un gran corazón, a mí me da repulsiones de solo verlo. Cuando la niña vuelve de la escuela le entrego el sobre para que me compre lo de siempre. Lo bueno de mandar a una niña es que nadie sospecha de ella.

A la vuelta, mientras le doy una charla para que aprenda quien manda en esta casa, me voy colocando para que este día se me haga más ameno. Una vez terminado todo, le digo que se vaya y me deje sola.

Pasa el tiempo y parece que este insufrible día, que no ha hecho más que darme problemas, no acaba. Voy a la cocina y saco una aguja que tenía escondida debida a la desesperación de querer olvidarme de todo. Voy al baño para ponerme a ello.

Pero algo marcha mal. Me he caído al suelo durante el proceso. Estoy convulsionando. Veo a la niña llegar y, usando la poca energía que me queda, le pido ayuda. Pero no hace nada, se queda ahí, mirando, sin derramar ni una lágrima por su madre.

Al fin lo ha conseguido, este era su propósito desde que llego a este mundo. Matarme. Y la muy puta lo ha conseguido. Ahora ella lo tendrá a él para sí sola y a mi... a mi ya me ha hecho a un lado.

Todo esto es por su culpa.

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¡Y este era el "Extra" de por qué la madre la odiaba!

Le tenía celos, lo sé, suena raro, pero hay casos en los que se da.

Besos

CelyLove

PD: ¿De qué creen que irá el siguiente "Extra"?

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