Puse mi corazón en el agua
y lo dejé partir
en los reflejos de mi alma.Lo vi navegar a contracorriente
como un barquito de papel
en los charcos de la mente.Y lo dejé en libertad
para descubrir
los secretos de la verdad.Porque a fin de cuentas
sólo eso podría salvarlo
de las aguas turbulentas.Sólo eso lograría
que llegue la calma
después de la tormenta.Y mi barquito de de papel
ya es libre
al fin.Aunque las flores
en su cubierta
ahogarlo intenten.Y mi corazón,
a lo lejos
puede latir.Aunque yo haya creído
que hundirse
era su fin.
