Departamento 813 [Rin x Len] [Miku x IA]

Dieciocho: Contratada

Y ahora, cuando todo ha terminado,

no hay nada que decir,

tú te has marchado, y tan fácilmente

has ganado,

puedes seguir adelante, cuéntaselo,

cuéntales todo lo que sé ahora,

grítalo desde los tejados,

escríbelo en el horizonte,

ahora, todo lo que teníamos ha desaparecido,

cuéntales que yo era feliz,

y mi corazón está roto,

todas mis cicatrices están abiertas...

Impossible - James Arthur.

...

La pregunta lo había tomado desprevenido, no se lo esperaba de ninguna forma.

- ¿Que?

- Lo escuchaste Oliver, quiero saber qué pasó con el.

- Pero tú estabas allí, deberías de decírmelo tu.- intento responder con tranquilidad. 

Oliver estaba inquieto, por no decir nervioso.

- Chocamos.- respondió la rubia.- Pero nunca lo vi subirse a la camilla.

- Quizás se lo llevaron mientras seguías inconsciente...

- ¿Quizás? ¿No lo sabes?

Rin lo miraba directamente a los ojos, prácticamente lo escudriñaba con la mirada.

- O sea...es lo lógico ¿No crees?.- Las manos le sudaban, la voz le temblaba ligeramente. No podía mentirle a su pequeña chica.

Rin se lo pensó, por supuesto que era lo lógico pero aún no podía olvidar aquellas huellas impresas en la nieve. En la noche Miku había dado por zanjado el tema y sinceramente ella también prefirió dejarlo hasta ahí, pues era una verdadera locura, pero había algo...un presentimiento tal vez, que no la dejaba dormir.

Estaba inquieta por algo netamente soñado.

- Tienes razón, lo siento.

¿cuantas veces había dicho eso en menos de un día?

-  Oye está bien...-la consoló.- entiendo que tengas dudas, me contaste que recordaste el accidente hace poco ¿no? Entonces quizás estés confundida.

Rin asintió, era lo más creíble.

- Lo extraño mucho.- susurró bajándome la mirada.

Oliver se acercó y la abrazo fuertemente.

- Yo también pequeña, yo también.

Después de eso Oliver y Rin comenzaron a ver los preparativos para la banda. Lo primero que hicieron fue charlar sobre reabrir el blog.

- Pero Kaito tiene las claves...- comentó la menor.- Y sabes que el me odia.

- ¿No haz hablado con el?

- No y no pienso hacerlo.

Oliver suspiro pesadamente.

- Está bien, cambiaremos las claves. Y el equipo de diseño rediseñara la página completa.

- ¿Podré publicar por mi cuenta?

Oliver asintió.

- Si.